Comenzaron los primeros trabajos de desmalezamiento para la implementación de un vivero municipal y una huerta comunitaria, destinada a un futuro arbolado de la ciudad de General Güemes y a satisfacer necesidades alimenticias de los pacientes internados en el hospital Joaquín Castellanos.
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Comenzaron los primeros trabajos de desmalezamiento para la implementación de un vivero municipal y una huerta comunitaria, destinada a un futuro arbolado de la ciudad de General Güemes y a satisfacer necesidades alimenticias de los pacientes internados en el hospital Joaquín Castellanos.
Para el desarrollo de este proyecto se dispuso de una porción del enorme predio perteneciente al hospital Joaquín Castellanos de Güemes. El espacio está ubicado del lado oeste, cerca de donde funciona el sector de geriatría. Se trata de un cuarto de hectárea que se encontraba alambrado, pero lleno de malezas. El espacio ya había sido destinado para el funcionamiento de una huerta, implementada en su momento, como una terapia para las personas mayores que se encontraban alojadas en geriatría. Ellos se encargaban de cuidarlo y recoger sus frutos.
La necesidad de repoblar con vegetación algunos de la ciudad, cuya importancia para el control del intenso calor del verano, está fuera de toda discusión. Esto surge de un estudio previo sobre las principales calles del casco céntrico, dando origen a un proyecto que ya está en marcha.
"Los costos para reforestar la ciudad son sumamente elevados: un plantín de alguna especie nativa de árbol, cuesta alrededor de $6.000, para una buena reforestación son necesarios al menos 1.000 plantines; por esa razón, junto con el ingeniero Carlos Lorenzatti del INTA, decidimos empezar de cero, es decir creando un vivero municipal que nos provea de esos plantines, los cuales serán gestados desde la misma semilla", dijo el director de Medio Ambiente, Ismael Veliz.
Durante los meses previos al inicio del proyecto se buscó un lugar apropiado para la instalación del vivero, pero todos los terrenos disponibles por el municipio se encontraban alejados del ejido urbano, en lugares muy susceptibles a sufrir robos. "Por suerte logramos arribar a un acuerdo con la gerencia del hospital para ocupar este espacio, en forma inmediata nos pusimos a trabajar. Esperamos en un año ya contar con plantines de tamaños adecuados para ser reubicados en distintos sectores de la ciudad", expresó Veliz.