Miembros del grupo yihadista lanzaron piedras contra la víctima hasta que murió en el área de la "iglesia antigua" en la ciudad de Al Bukamal, situada en la provincia siria de Deir Ezzor y fronteriza con Irak, agregó el Observatorio.
Los asesinatos de civiles por parte de los yihadistas se han vuelto frecuentes como medio de aterrorizar a la población y como instrumento de propaganda. El lunes, cinco jóvenes de la localidad de Al Mayadin, también en Deir Ezzor, perdieron la vida a manos del Estado Islámico, que les imputó varios cargos.
Cuatro de ellos fallecieron por los disparos de los extremistas por supuestamente haber luchado contra la organización radical. El quinto, acusado de "prácticas indecentes con un hombre", fue arrojado desde lo alto de un edificio, que es como el grupo asesina a los homosexuales o a quienes dice que lo son.
Miembros del grupo yihadista lanzaron piedras contra la víctima hasta que murió en el área de la "iglesia antigua" en la ciudad de Al Bukamal, situada en la provincia siria de Deir Ezzor y fronteriza con Irak, agregó el Observatorio.
Los asesinatos de civiles por parte de los yihadistas se han vuelto frecuentes como medio de aterrorizar a la población y como instrumento de propaganda. El lunes, cinco jóvenes de la localidad de Al Mayadin, también en Deir Ezzor, perdieron la vida a manos del Estado Islámico, que les imputó varios cargos.
Cuatro de ellos fallecieron por los disparos de los extremistas por supuestamente haber luchado contra la organización radical. El quinto, acusado de "prácticas indecentes con un hombre", fue arrojado desde lo alto de un edificio, que es como el grupo asesina a los homosexuales o a quienes dice que lo son.