En el barrio centro del pueblo de San Antonio tuvo lugar el martes la entronización de la imagen de San Pantaleón.
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En el barrio centro del pueblo de San Antonio tuvo lugar el martes la entronización de la imagen de San Pantaleón.
Es conocido que detrás de la imagen de cada santo está puesta la fe en Dios, además que se trata de un puente que lleva a la intercesión con el Señor.
Éste es el caso y la historia de quien en vida fuera Herminia Chauque, quien dejó este mundo hace poco tiempo. Ella adquirió esta imagen para ser venerada, ya que con sus dolencias físicas, con su edad y acompañada siempre por su esposo José Diaz, pero con la inalterable fe puesta en Dios decidió hasta cerrar sus ojos entregar sus oraciones al santo.
En la actualidad, su esposo, su hija, nieta y bisnieta decidieron compartir esta imagen con la comunidad toda sabiendo de la devoción que el santo genera por su historia como mártir de la iglesia católica.
Por ello decidieron rezar la novena junto a vecinos, acción que inicialmente lo hacían en familia y entronizar al santo en una gruta montada en la entrada del domicilio de esta familia sobre calle Sarmiento.
La ceremonia contó con la presencia del padre Carlos Arnaud, quien procedió a realizar una invocación religiosa y posteriormente dar la bendición a los feligreses y al lugar en el que San Pantaleón a partir de ayer será venerado año tras año.
San Pantaleón fue un mártir cristiano. Nació en Nicomedia, actual Turquía a finales del siglo III. Era hijo de Eustorgio y Eucuba y fue médico como su padre. Su nombre, en griego, significa: "El que se compadece de todos". Estudió filosofía y retórica y después se dedicó a la medicina. Tras ser torturado de varias maneras, murió. Según la tradición cristiana, el fallecimiento tuvo lugar bajo una higuera seca, que floreció al recibir la sangre del mártir luego de ser decapitado. (Carlos Tasca).