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Bombardeos ponen en peligro el alto el fuego

Miércoles, 02 de marzo de 2016 01:30
LATAKIA, SUFRIERON ENFRENTAMIENTOS ENTRE TROPAS DEL RÉGIMEN Y DE LA OPOSICIÓN.
El cuarto día del alto el fuego acordado por Rusia y Estados Unidos en Siria puso ayer en evidencia su fragilidad tras una serie de combates ocurridos en Alepo y bombardeos en la provincia de Latakia, donde un grupo de periodistas resultó herido tras ser alcanzado por un bombardeo durante una gira organizada por el Ejército ruso para observar los alcances de la tregua.
El cese de hostilidades entró en vigor en la medianoche del pasado 27 de febrero con cerca de 97 facciones armadas comprometidas a respetarlo, pero desde sus primeras horas se tambalea, y las acusaciones cruzadas de violación del pacto han sido la tónica en estas 96 horas.
Ayer, combates entre el Ejército y facciones rebeldes islámicas (que quedaron fuera del acuerdo) estallaron desde la madrugada, cuando en los alrededores del barrio de Suleiman Halabi en Alepo, la mayor ciudad del norte de Siria, se escucharon las fuertes detonaciones.
Los grupos armados dispararon proyectiles contra zonas bajo el control de los efectivos gubernamentales, que, a su vez, abrieron fuego de artillería contra el distrito de Al Sajur.
Paralelamente, en el norte de la provincia de Alepo, milicias rebeldes opositoras arrojaron cohetes de forma intensa contra los pueblos de Bashamra y Basufan, en los alrededores del enclave kurdosirio de Afrin.
El acuerdo de cese de hostilidades logrado por Moscú y Washington y avalado por Damasco, dejó expresamente fuera al grupo islamista radical Estado Islámico (EI), al Frente Al Nusra y la rama siria de Al Qaeda.
En la provincia de Latakia, en tanto, la endeblez del acuerdo se puso de manifiesto cuando un grupo de periodistas de varias nacionalidades resultó alcanzado por un bombardeo cuando realizaban una gira organizada por el Ejército ruso para observar el cumplimiento del alto el fuego.
Como resultado del ataque resultaron heridos leves periodistas de Rusia, Bulgaria, Canadá y China, informó el general Igor Konashenkov, portavoz oficial ruso en la base aérea de Jmemeim, citado por los medios rusos.
"El ataque se realizó desde la frontera turca, desde la zona de Dama e Idlib", según el militar, que precisó que el grupo estaba integrado por 33 periodistas rusos y de otros países, como China, Alemania, Estados Unidos, Canadá, Bulgaria y Grecia.
Una fuente del Ejército sirio, citada por los medios rusos, señaló que el Frente al Nusra, uno de los grupos yihadistas que no están incluidos en el acuerdo de alto el fuego alcanzado entre Rusia y EEUU, fue el autor del ataque.
Ayer, el presidente sirio, Bashar al Assad, aseguró que sus tropas mantienen por ahora el alto el fuego acordado por Estados Unidos y Rusia pese a las violaciones de los "terroristas".
En una entrevista que divulgó ayer la televisión pública alemana "ARD" Assad se comprometió a hacer "su parte" para que se mantenga firmemente el cese de las hostilidades, aunque matizó que todo tiene "su límite" y que el éxito depende del "otro lado".
Cifras preocupantes
Las declaraciones de Al Assad se producen el mismo día en que el Observatorio de los Derechos Humanos indicó que al menos 4.802 personas murieron por la guerra en Siria durante el pasado mes de febrero, lo que supone una cifra superior a enero, cuando hubo 4.680 fallecidos.
La ONG con sede en Londres y una amplia red de informantes in situ, precisó que dentro de ese recuento hay al menos 1.109 civiles, de los que 234 eran menores de edad y 156 mujeres.
De esos civiles, al menos 488 perecieron por los bombardeos de la aviación gubernamental siria y la rusa; 96, por disparos de proyectiles de facciones opositoras, el Frente al Nusra (filial siria de Al Qaeda) y el grupo Estado Islámico (EI); y 170, en atentados con coches bomba y suicidas con cinturones de explosivos.
El gobierno ruso y el la ONU salieron ayer a reiterar la importancia de que se mantenga el alto el fuego y la distribución de asistencia humanitaria, y bregaron por que se reanuden las negociaciones políticas.
En la ciudad siria de Deir al Zur (noreste), en tanto, donde los barrios en poder gubernamental están sitiados por el Estado Islámico aviones rusos y sirios lanzaron ayer varios paquetes de ayuda humanitaria.
El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, anunció el pasado viernes la reanudación de las negociaciones el próximo 7 de marzo, pero advirtió de que el proceso político solo se concretaría si se mantenía el cese de hostilidades, y siempre y cuando las más de 400 mil personas que viven en zonas sitiadas, obtuvieran ayuda esencial para sobrevivir.

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El cuarto día del alto el fuego acordado por Rusia y Estados Unidos en Siria puso ayer en evidencia su fragilidad tras una serie de combates ocurridos en Alepo y bombardeos en la provincia de Latakia, donde un grupo de periodistas resultó herido tras ser alcanzado por un bombardeo durante una gira organizada por el Ejército ruso para observar los alcances de la tregua.
El cese de hostilidades entró en vigor en la medianoche del pasado 27 de febrero con cerca de 97 facciones armadas comprometidas a respetarlo, pero desde sus primeras horas se tambalea, y las acusaciones cruzadas de violación del pacto han sido la tónica en estas 96 horas.
Ayer, combates entre el Ejército y facciones rebeldes islámicas (que quedaron fuera del acuerdo) estallaron desde la madrugada, cuando en los alrededores del barrio de Suleiman Halabi en Alepo, la mayor ciudad del norte de Siria, se escucharon las fuertes detonaciones.
Los grupos armados dispararon proyectiles contra zonas bajo el control de los efectivos gubernamentales, que, a su vez, abrieron fuego de artillería contra el distrito de Al Sajur.
Paralelamente, en el norte de la provincia de Alepo, milicias rebeldes opositoras arrojaron cohetes de forma intensa contra los pueblos de Bashamra y Basufan, en los alrededores del enclave kurdosirio de Afrin.
El acuerdo de cese de hostilidades logrado por Moscú y Washington y avalado por Damasco, dejó expresamente fuera al grupo islamista radical Estado Islámico (EI), al Frente Al Nusra y la rama siria de Al Qaeda.
En la provincia de Latakia, en tanto, la endeblez del acuerdo se puso de manifiesto cuando un grupo de periodistas de varias nacionalidades resultó alcanzado por un bombardeo cuando realizaban una gira organizada por el Ejército ruso para observar el cumplimiento del alto el fuego.
Como resultado del ataque resultaron heridos leves periodistas de Rusia, Bulgaria, Canadá y China, informó el general Igor Konashenkov, portavoz oficial ruso en la base aérea de Jmemeim, citado por los medios rusos.
"El ataque se realizó desde la frontera turca, desde la zona de Dama e Idlib", según el militar, que precisó que el grupo estaba integrado por 33 periodistas rusos y de otros países, como China, Alemania, Estados Unidos, Canadá, Bulgaria y Grecia.
Una fuente del Ejército sirio, citada por los medios rusos, señaló que el Frente al Nusra, uno de los grupos yihadistas que no están incluidos en el acuerdo de alto el fuego alcanzado entre Rusia y EEUU, fue el autor del ataque.
Ayer, el presidente sirio, Bashar al Assad, aseguró que sus tropas mantienen por ahora el alto el fuego acordado por Estados Unidos y Rusia pese a las violaciones de los "terroristas".
En una entrevista que divulgó ayer la televisión pública alemana "ARD" Assad se comprometió a hacer "su parte" para que se mantenga firmemente el cese de las hostilidades, aunque matizó que todo tiene "su límite" y que el éxito depende del "otro lado".
Cifras preocupantes
Las declaraciones de Al Assad se producen el mismo día en que el Observatorio de los Derechos Humanos indicó que al menos 4.802 personas murieron por la guerra en Siria durante el pasado mes de febrero, lo que supone una cifra superior a enero, cuando hubo 4.680 fallecidos.
La ONG con sede en Londres y una amplia red de informantes in situ, precisó que dentro de ese recuento hay al menos 1.109 civiles, de los que 234 eran menores de edad y 156 mujeres.
De esos civiles, al menos 488 perecieron por los bombardeos de la aviación gubernamental siria y la rusa; 96, por disparos de proyectiles de facciones opositoras, el Frente al Nusra (filial siria de Al Qaeda) y el grupo Estado Islámico (EI); y 170, en atentados con coches bomba y suicidas con cinturones de explosivos.
El gobierno ruso y el la ONU salieron ayer a reiterar la importancia de que se mantenga el alto el fuego y la distribución de asistencia humanitaria, y bregaron por que se reanuden las negociaciones políticas.
En la ciudad siria de Deir al Zur (noreste), en tanto, donde los barrios en poder gubernamental están sitiados por el Estado Islámico aviones rusos y sirios lanzaron ayer varios paquetes de ayuda humanitaria.
El enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, anunció el pasado viernes la reanudación de las negociaciones el próximo 7 de marzo, pero advirtió de que el proceso político solo se concretaría si se mantenía el cese de hostilidades, y siempre y cuando las más de 400 mil personas que viven en zonas sitiadas, obtuvieran ayuda esencial para sobrevivir.

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