A una semana del alud en la Quebrada devenidos del desastre natural, las ciudades de la Puna jujeña comienzan a sentir el desabastecimiento.
La Quiaca es el punto donde las comunas del departamento Yavi, Santa Catalina y parte de Salta convergen para abastecerse de provisiones, al inicio de la semana las cosas no solo aumentaron de precio también escasean.
En el mercado central una sola carnicería estaba abierta de todos los puestos que existen, según la propietaria la venta era un kilo por familia en tan solo unas horas debió cerrar porque vendió todo.
Tampoco en otros puntos de la ciudad hay carne a la venta, por lo que los quiaqueños recurrieron al pollo la demanda fue tal que muy pronto las pollerías se quedaron sin mercadería.
Por otro lado las verduras y frutas tuvieron un notable aumento, algunas verdulerías del mercado y feria mayorista cerraron sus puertas y lo poco que puede encontrarse tiene un costo elevado además la venta al público es racionada, hasta medio kilo por persona.
Algunos puestos están semivacíos, complicando la situación al momento de preparar el menú diario para el ama de casa, el cordero paso a ser otra alternativa para el consumo hasta los restaurantes ofrecen menús en base a carne de ovino.
Además en los comercios es muy difícil encontrar lácteos, fiambres, leche, gas envasado entre otros productos, la poca mercadería disponible tiene una importante remarcación de precios, por lo que vecinos solicitaron control a los entes correspondientes.
Al otro lado de la frontera, es decir Villazón, la "avivada" es moneda corriente, en Villazón el pollo subió a valores importantes es lo único que los quiaqueños consumen debido a que la carne es de procedencia dudosa.
Los medicamentos están faltando en las farmacias de la ciudad, los más perjudicados son aquellas personas que necesitan algún remedio específico y solamente son traídos por pedido.
Panorama complicado para todos los habitantes de esta parte de la provincia.
Susques
La comunidad susqueña también tiene sus similares problemas, lo preocupante es la situación en las escuelas de verano, la ministra Isolda Calsina ordenó a pesar de todo lo acontecido los docentes sigan prestando servicio.
Sucede los establecimientos no cuentan con la mercadería del comedor escolar, porque los proveedores no tienen, el único alimento para muchos niños puneños no puede ser brindado.
Ante del reclamo de los docentes la ministra respondió "denle mate a los chicos", cabe mencionar en esas instituciones educativas brindan desayuno, almuerzo y en algunos casos merienda.
La Quiaca es el punto donde las comunas del departamento Yavi, Santa Catalina y parte de Salta convergen para abastecerse de provisiones, al inicio de la semana las cosas no solo aumentaron de precio también escasean.
En el mercado central una sola carnicería estaba abierta de todos los puestos que existen, según la propietaria la venta era un kilo por familia en tan solo unas horas debió cerrar porque vendió todo.
Tampoco en otros puntos de la ciudad hay carne a la venta, por lo que los quiaqueños recurrieron al pollo la demanda fue tal que muy pronto las pollerías se quedaron sin mercadería.
Por otro lado las verduras y frutas tuvieron un notable aumento, algunas verdulerías del mercado y feria mayorista cerraron sus puertas y lo poco que puede encontrarse tiene un costo elevado además la venta al público es racionada, hasta medio kilo por persona.
Algunos puestos están semivacíos, complicando la situación al momento de preparar el menú diario para el ama de casa, el cordero paso a ser otra alternativa para el consumo hasta los restaurantes ofrecen menús en base a carne de ovino.
Además en los comercios es muy difícil encontrar lácteos, fiambres, leche, gas envasado entre otros productos, la poca mercadería disponible tiene una importante remarcación de precios, por lo que vecinos solicitaron control a los entes correspondientes.
Al otro lado de la frontera, es decir Villazón, la "avivada" es moneda corriente, en Villazón el pollo subió a valores importantes es lo único que los quiaqueños consumen debido a que la carne es de procedencia dudosa.
Los medicamentos están faltando en las farmacias de la ciudad, los más perjudicados son aquellas personas que necesitan algún remedio específico y solamente son traídos por pedido.
Panorama complicado para todos los habitantes de esta parte de la provincia.
Susques
La comunidad susqueña también tiene sus similares problemas, lo preocupante es la situación en las escuelas de verano, la ministra Isolda Calsina ordenó a pesar de todo lo acontecido los docentes sigan prestando servicio.
Sucede los establecimientos no cuentan con la mercadería del comedor escolar, porque los proveedores no tienen, el único alimento para muchos niños puneños no puede ser brindado.
Ante del reclamo de los docentes la ministra respondió "denle mate a los chicos", cabe mencionar en esas instituciones educativas brindan desayuno, almuerzo y en algunos casos merienda.
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A una semana del alud en la Quebrada devenidos del desastre natural, las ciudades de la Puna jujeña comienzan a sentir el desabastecimiento.
La Quiaca es el punto donde las comunas del departamento Yavi, Santa Catalina y parte de Salta convergen para abastecerse de provisiones, al inicio de la semana las cosas no solo aumentaron de precio también escasean.
En el mercado central una sola carnicería estaba abierta de todos los puestos que existen, según la propietaria la venta era un kilo por familia en tan solo unas horas debió cerrar porque vendió todo.
Tampoco en otros puntos de la ciudad hay carne a la venta, por lo que los quiaqueños recurrieron al pollo la demanda fue tal que muy pronto las pollerías se quedaron sin mercadería.
Por otro lado las verduras y frutas tuvieron un notable aumento, algunas verdulerías del mercado y feria mayorista cerraron sus puertas y lo poco que puede encontrarse tiene un costo elevado además la venta al público es racionada, hasta medio kilo por persona.
Algunos puestos están semivacíos, complicando la situación al momento de preparar el menú diario para el ama de casa, el cordero paso a ser otra alternativa para el consumo hasta los restaurantes ofrecen menús en base a carne de ovino.
Además en los comercios es muy difícil encontrar lácteos, fiambres, leche, gas envasado entre otros productos, la poca mercadería disponible tiene una importante remarcación de precios, por lo que vecinos solicitaron control a los entes correspondientes.
Al otro lado de la frontera, es decir Villazón, la "avivada" es moneda corriente, en Villazón el pollo subió a valores importantes es lo único que los quiaqueños consumen debido a que la carne es de procedencia dudosa.
Los medicamentos están faltando en las farmacias de la ciudad, los más perjudicados son aquellas personas que necesitan algún remedio específico y solamente son traídos por pedido.
Panorama complicado para todos los habitantes de esta parte de la provincia.
Susques
La comunidad susqueña también tiene sus similares problemas, lo preocupante es la situación en las escuelas de verano, la ministra Isolda Calsina ordenó a pesar de todo lo acontecido los docentes sigan prestando servicio.
Sucede los establecimientos no cuentan con la mercadería del comedor escolar, porque los proveedores no tienen, el único alimento para muchos niños puneños no puede ser brindado.
Ante del reclamo de los docentes la ministra respondió "denle mate a los chicos", cabe mencionar en esas instituciones educativas brindan desayuno, almuerzo y en algunos casos merienda.
La Quiaca es el punto donde las comunas del departamento Yavi, Santa Catalina y parte de Salta convergen para abastecerse de provisiones, al inicio de la semana las cosas no solo aumentaron de precio también escasean.
En el mercado central una sola carnicería estaba abierta de todos los puestos que existen, según la propietaria la venta era un kilo por familia en tan solo unas horas debió cerrar porque vendió todo.
Tampoco en otros puntos de la ciudad hay carne a la venta, por lo que los quiaqueños recurrieron al pollo la demanda fue tal que muy pronto las pollerías se quedaron sin mercadería.
Por otro lado las verduras y frutas tuvieron un notable aumento, algunas verdulerías del mercado y feria mayorista cerraron sus puertas y lo poco que puede encontrarse tiene un costo elevado además la venta al público es racionada, hasta medio kilo por persona.
Algunos puestos están semivacíos, complicando la situación al momento de preparar el menú diario para el ama de casa, el cordero paso a ser otra alternativa para el consumo hasta los restaurantes ofrecen menús en base a carne de ovino.
Además en los comercios es muy difícil encontrar lácteos, fiambres, leche, gas envasado entre otros productos, la poca mercadería disponible tiene una importante remarcación de precios, por lo que vecinos solicitaron control a los entes correspondientes.
Al otro lado de la frontera, es decir Villazón, la "avivada" es moneda corriente, en Villazón el pollo subió a valores importantes es lo único que los quiaqueños consumen debido a que la carne es de procedencia dudosa.
Los medicamentos están faltando en las farmacias de la ciudad, los más perjudicados son aquellas personas que necesitan algún remedio específico y solamente son traídos por pedido.
Panorama complicado para todos los habitantes de esta parte de la provincia.
Susques
La comunidad susqueña también tiene sus similares problemas, lo preocupante es la situación en las escuelas de verano, la ministra Isolda Calsina ordenó a pesar de todo lo acontecido los docentes sigan prestando servicio.
Sucede los establecimientos no cuentan con la mercadería del comedor escolar, porque los proveedores no tienen, el único alimento para muchos niños puneños no puede ser brindado.
Ante del reclamo de los docentes la ministra respondió "denle mate a los chicos", cabe mencionar en esas instituciones educativas brindan desayuno, almuerzo y en algunos casos merienda.