Jujuy parece no tener posibilidades de mantener la paz social durante mucho tiempo. Cuando uno piensa en el tiempo transcurrido desde el 2015 hasta hoy, hay dos formas de comprenderlo. La primera, diciendo que es como si hubiera transcurrido un siglo, desde el cambio de gobierno, y la segunda, se reduce a la famosa frase “parece que fue ayer”. Ocurre que el esfuerzo por entrar en la calma y la paz social, es tan trabajoso, tan complicado, y tan endeble, que en cuestión de minutos estalla por los aires, y el viejo rostro de la sinrazón y la intolerancia se instala en las calles y derrumba las construcciones recién comenzadas, y cunde el desánimo social en toda la Provincia.
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Jujuy parece no tener posibilidades de mantener la paz social durante mucho tiempo. Cuando uno piensa en el tiempo transcurrido desde el 2015 hasta hoy, hay dos formas de comprenderlo. La primera, diciendo que es como si hubiera transcurrido un siglo, desde el cambio de gobierno, y la segunda, se reduce a la famosa frase “parece que fue ayer”. Ocurre que el esfuerzo por entrar en la calma y la paz social, es tan trabajoso, tan complicado, y tan endeble, que en cuestión de minutos estalla por los aires, y el viejo rostro de la sinrazón y la intolerancia se instala en las calles y derrumba las construcciones recién comenzadas, y cunde el desánimo social en toda la Provincia.
Azúcar oscura
Se veía venir la cuestión azucarera. Mientras otros ingenios de la región se encontraban enfrascados en la lucha salarial las labores de cosecha y fabrica no se resintieron. En Ingenio Ledesma la situación se iba convirtiendo en un polvorín que finalmente tuvo sus explosiones. el SOEAIL, un sindicato muy duro,y una empresa dispuesta a dialogar pero con limites alejados de las exigencias gremiales. La política que metía la cola a cada rato, particularmente desde la izquierda ubicada al extremo izquierdo del arco, y el perfil de un tiempo electoral que daba marco al calentamiento del ambiente hicieron el resto. Finalmente, la sangre llego a las rutas y los choques entre obreros y fuerzas de seguridad volvieron a Jujuy con toda la crudeza de otras épocas. La autoridad laboral autorizó los aumentos salariales inicialmente conversados y produjo una exhortación a los trabajadores a desocupar las rutas. Todavia falta ver cómo y de qué manera se podrá ir descomprimiendo la situación, si es que esa válvula que colocó el ministerio de Trabajo de la Nación funciona. Seguramente, no será sencillo, porque el SOEAIL se mantiene con otro paro de 96 horas y la empresa sostiene que no volverá a sentarse a las mesas de diálogos en el marco de medidas de fuerza en curso. La cara de la violencia, también reapareció, inevitable. Heridos de ambos sectores, y el terrible y peligroso juego de versiones con la palabra muerte, como si no estuvieran frescos horribles y dolorosos antecedentes, y la zozobra de toda una ciudad que vive al ritmo del ingenio y que disfruta o padece las climas emergentes de estos vaivenes. Cabe preguntarse si los mecanismos de las paritarias son entonces, válidos y positivos, o si no será tiempo de enfrascarse en discutir otras variantes que den un marco m{as seguro para la resolución de conflictos.
Colgando como espada de Damocles sobre las cabezas de todos los jujeños, está también pendiente la situación del Ingenio La Esperanza. Mientras pesadamente la zafra avanza, el inversor interesado no volvió a venir por Jujuy, y muchos temen que no vuelva, si hasta hoy, no apareció con las garantías que el gobierno provincial le puso como exigencias tope para vender el complejo agroindustrial. La frase del Gobernador Gerardo Morales, suena como un estridente sonido de sirenas alertando que él no está dispuesto a dar un salto al vacío con una venta insegura, y mucho menos a ceder a otra posibilidad de arrendamiento, porque las experiencias fueron muy malas y eso que aún ni siquiera se conoce profundamente cómo fueron aquellas administraciones colegiadas que mixaban las obligaciones del estado (mantener la fuente de trabajo y hacer crecer la producción), con los intereses de los socios privados (obtener el máximo de ganancias con una mínima inversión en campo y planta). Quizás un día los jujeños, verdaderos y únicos inversores hasta hoy, puedan saber que fue de sus dineros durante tantos años. Pero como se dijo, esta zafra va, tratando de aprovechar al máximo un buen momento de los precios internacionales para resarcirse un poco de varios malos años continuados. El inversor colombiano del grupo Omega tal vez se haya desalentado cuando a su vez, le tomó el pulso a la situación real del complejo agroindustrial, pero más que eso, al clima social existente, a la complicada estructura de pensamiento oficial con relación a los promocionados programas de absorción de trabajadores por parte de la administración pública, a la no menos complicada estructura conceptual sindical, y naturalmente, también habrá echado un ojo sobre las posiciones de la oposición política que no está dispuesta a hacer concesiones sobre el tema pesado, menos en un año donde cada paso que se da, puede ser subirse al podio, o caer al vacío. Solamente andar con pie de plomo y dejar de poner fechas alegremente a compromisos que nunca se cumplen, permitirá que se siga conteniendo tantas esperanzas fallidas. El GM sabe esto y ordenó mesura a muchos de sus funcionarios, siempre dispuestos a ponerle una fecha a otro fracaso.
Milagro Sala otra vez
Y como si todo esto fuese poco, se abrió un nuevo capítulo del caso Milagro Amalia Ángela Sala de Noro. La jefa tupaquera, beneficiada por la lucha del lobby kirchnerista, de posición dominante en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. en el CELS y otros balcones desde donde se trabaja por los derechos humanos, alcanzó el rango de “presa política” en la ONU y en la OEA, a pesar de los esfuerzos del gobierno y la justicia provincial por considerarla una presa común a la espera de los juicios por diversas causas de corrupción y delitos en perjuicio del estado provincial y nacional. Así fue que logró la prisión preventiva domiciliaria en su casa de fin de semana en Dique La Ciénaga, se convirtió tal como se preveía, en centro de peregrinación de adeptos, y oficina de distribución de material periodístico que en forma cotidiana. Producía desde reclamos por la aparición de Santiago Maldonado, hasta misivas dirigidas al gobierno del venezolano Nicolás Maduro, pasando por cuestionamientos al gobierno nacional de MM y provincial de GM. Y el último intento por demostrar el manejo desde su prisión es la convocatoria a otra marcha por la aparición del simpatizante de la causa mapuche que sigue en un limbo inexplicable. Las producciones eran a través de notas, videos en redes sociales, entrevistas en medios K, o simplemente de fuertes arengas dirigidas a sus custodios gendarmes que rodeaban la coqueta casona frente al lago. Los abogados que la atacan arreciaron con sus presentaciones, la Justicia Provincial y Federal, desde distintos ángulos cerraban el círculo advirtiendo que la detenida rebasaba diariamente los límites reglamentarios del control penitenciario. La sorpresa de dias atrás, fue la presencia del estridente diputado nacional peronista Alfredo Olmedo, salteño él, quien como simple ciudadano pidió a la justicia el retorno de la diputada del Parlasur no asumida, por considerarla peligrosa y amenazante para la seguridad nacional. Los abogados de la señora Sala arreciaron a su vez con una serie de programadas dilaciones legales y recusaciones, con la obvia tarea de patear la pelota todo lo adelante que se pudiera. El juego finalmente llegó a su final. Al menos en esta etapa, y tras la decisión de la Cámara de Apelaciones de Jujuy que integran Gloria Mercedes Portal, Carlos Catán y Néstor Paoloni, se revocó “in totum” el beneficio ordenándose la restitución de la exdiputada provincial al penal de mujeres de Alto Comedero, desde donde había salido hace pocas semanas con una sonrisa triunfal hacia un emocionado abrazo con su esposo Raúl y sus hijos. Se inicia naturalmente, otra ronda de idas y vueltas legales, apelaciones y declaraciones en los medios que han comenzado otra vez a saturar el ánimo de los jujeños que inundan redes sociales, dando cuenta que la grieta con respecto a la señora Sala, seguía intacta, apenas tapada con pastos, y hoy, vuelve a mostrar que la división en la sociedad, aunque marcadamente adversa a la dirigente social, sigue vigente. Llamó la atención que el ministro de gobierno Agustín Perassi haya tratado de restar valor al episodio. Declaró que nada de lo que ocurre es demasiado significativo, ni el impacto mediático, ni el humor de la sociedad, ni siquiera asignó importancia a los gastos que demanda el rigurosísimo control y seguimiento encomendado a los organismos de seguridad sobre la vida de la señora Sala. Quizás tratar de menospreciar lo que ocurre sea la forma menos adecuada de hacer de cuenta que los rebotes del caso no están en toda la prensa nacional o internacional y dando motivo a resonantes declaraciones en foros de todo el mundo. El golpe a Milagro Sala rebotó en los rostros de todos sus allegados, de muchos que habían vuelto a aparecer en escena alentados por la presencia mediática cada vez más fuerte de la jefa, y otros que integrados en el Frente de Unidad Ciudadana, puro bastión K si los hay, estaban de parabienes pensando en la resurrección política después del ostracismo desde el que miraron transcurrir las primarias de Agosto, como si ya estuviesen totalmente acabados. La cachetada debe haber llegado hasta Cristina Elisabet Fernández, el CELS, y las misma barbas de los jerarcas de la CIDH, que hasta se habían tomado la molestia de venir a Jujuy a reconocer una realidad que nunca estuvieron dispuestos a analizar con objetividad ni en todas direcciones. Aníbal Ibarra, Hugo Yasky, Myriram Bregmann, Wado de Pedro, Martin Sabatella y Agustín Rossi, entre otros personajes se subieron al caballo del reclamo en contra de lo definen con una jugada de la justicia de propiedad del GM. De todos modos, no es posible imaginar que para el GM esta decisión de la Cámara de Apelaciones sea una maravilla. Porque reaviva enfrentamientos, reinstala debates de los que él seguramente hubiera preferido mantenerse alejado, por lo menos durante unos 23 días más. Pero los más recalcitrantes adversarios de Cambiemos descreen de esta hipótesis y por el contrario, aseguran que fue toda una maquinación a la que la Justicia se prestó, y que le servirá el GM y sus candidatos, para volver a subir al ring a la enemiga acérrima, que le garantiza que gana con la sola comparación de sus ideologías, metodologías y relatos diametralmente opuestos. "Sigue las instrucciones del macrismo que cree que al elegir a CEFK como su adversaria, podrá asegurarse votos, pero tiran tanto de la soga que corren el riesgo de cortarla en cualquier momento" aseguraban ayer en el bunker K, mientras Milagro Sala lo hizo directamente responsable "por lo que pueda pasar" mientras le colgaba el sambenito de que el gobernador de Jujuy "es capaz de cualquier cosa". "Los radicales tienen miedo" fue otra de las frases más escuchadas, " Milagro quiere competir con el GM en el 2019, pero desde la libertad". Los jerarcas de la campaña del frente Cambiemos no llevan el apunte a este desafío, y siguen adelante. En tanto los abogados de la Tupac apelaron la decisión de la Cámara, la movida seguramente tendrá como primera consecuencia la congelación de la decisión de los jueces hasta que la misma tenga la confirmación en instancias superiores, o finalmente la hagan caer.
Como si nada, la política de Jujuy sigue enfrascada en su campaña rumbo al 22-O. A muchos les importa poco que ocurra con la señora Sala. Otros prefieren hacer de cuenta que no la conocen y que no la conocieron nunca. Están los que de frente reconocen que durante muchos años, la jefa tupaquera les arrebató el control de las políticas sociales, pero admiten al mismo tiempo que todo había ocurrido como consecuencia de las imposiciones del gobierno nacional, que tenía en la dirigente social una referente sólida a la que no trepidó en comparar con la figura insigne de Eva Perón, para disgusto de los peronistas y de los no peronistas. Pero eso es harina de otro debate. Los frentes que se disputan el voto en Jujuy, están presentes en los medios gráficos y audiovisuales cada día con mayor intensidad, unos tratando de olvidar el pasado; otros, tratando de recordárselo a cada paso. Mientras el nivel de la discusión política siga siendo ese, será muy difícil que se pueda dejar atrás a los fantasmas de los enfrentamientos estériles, de la vigencia de Milagro Sala, de los desencuentros sociales, y del fortalecimiento de pasados relatos. Las encuestas están orientadas a definir las preferencias sobre los que compiten. Ninguna consultora de opinión pública atinó hasta hoy a preguntarles a los jujeños si están satisfechos con la calidad institucional de los poderes del estado y de los partidos políticos. En realidad si existen algunos datos sobre estos interrogantes, pero los dueños de la información prefieren decir que no los tienen, antes que malquistarse con toda una clase dirigente. Vamos hacia el 22, y esa encuesta arrojará algo de claridad sobre el destino de la provincia y el país. Alfo, solamente. Las gestiones de gobierno, los relatos, los ajustes y las correcciones que vendrán después, podrán decir si según el viejo refrán, las "vox populi" sigue siendo la "vox Dei". Por ahora, pensamos que mientras se diluciden todas estas inquietudes, lo importante, lo primordial, sera recuperar y mantener la paz social.