El Carnaval de las Yungas presentará una nueva edición el próximo fin de semana largo, integrando las festividades de varias localidades jujeñas con una gran variedad de actividades que continuarán hasta marzo. En este marco, existe una visita obligada para la región: el Parque Nacional Calilegua ofrece un destino natural a tono con el colorido carnavalesco y con una amplia gama de opciones recreativas, que conjugan valores culturales regionales con una fuerte impronta vinculada a la madre tierra y su cuidado.
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El Carnaval de las Yungas presentará una nueva edición el próximo fin de semana largo, integrando las festividades de varias localidades jujeñas con una gran variedad de actividades que continuarán hasta marzo. En este marco, existe una visita obligada para la región: el Parque Nacional Calilegua ofrece un destino natural a tono con el colorido carnavalesco y con una amplia gama de opciones recreativas, que conjugan valores culturales regionales con una fuerte impronta vinculada a la madre tierra y su cuidado.
El parque, cuyo camino de acceso fue escenario del lanzamiento de la edición 2017 de este Carnaval, es la muestra protegida más extensa de la selva de las Yungas. Su vasta diversidad de formas de vida incluye árboles que superan los cuarenta metros de altura, espectaculares orquídeas, especies en peligro de extinción y otras peculiaridades que atraen visitantes de todo el mundo. Las alternativas para el visitante son variadas. Distintos senderos -de baja, media y alta dificultad- permiten adentrarse en la cultura del pueblo guaraní, así como la espesura selvática.
El Parque Nacional Calilegua cuenta con un sector de acampe libre, un campamento agreste con sanitarios, fogones, mesadas y proveeduría, un área de recreación y atención permanente del personal del área protegida. Además, existe un colectivo que parte a la mañana desde la vecina localidad de Libertador San Martín rumbo a Valle Grande, con paradas en el parque, y regresa por la tarde.