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28 de Marzo,  Jujuy, Argentina
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Un pacto imposible. Jugadas políticas. Mensajes esperados

Domingo, 26 de marzo de 2017 20:01
CARLOS SADIR. Otro pacto fiscal
NICOLAS DUJOVNE. ¿Llegará a Jujuy?
"PIQUI" BERNIS: Todo queda como está.
GM: ¿cambios para el segundo año?
"CHULI" JORGE. Un mensaje esperado

Hubo de todo. Fue una de esas semanas en las que se pueden encontrar buenas y malas para todos los paladares. Los ministros de economía de casi todas las provincias –diecisiete- se reunieron con el titular nacional Nicolás Dujovne en Mendoza y firmaron lo que el gobierno nacional calificó como “histórico pacto” de responsabilidad fiscal (otro más y van…), que sentaría las bases para la elaboración final de un proyecto de ley, con el  objetivo de ordenar el país y establecer una suerte de programa de premios y castigos para los gobernadores, según sus administraciones observen contención de gastos, ajuste de sus déficits y un ordenamiento general de sus cuentas. Por Jujuy, obviamente, participó el ministro Carlos Sadir, quien se comprometió junto a sus pares, a no vender activos del estado provincial y a no tomar personal seis meses antes de las elecciones generales. El estado jujeño no tiene previsto –que se sepa- vender activos, y la idea de frenar las designaciones de personal llega quince meses tarde. Apenas algunos distraídos o demasiado lentos, estarán quedando afuera, si es que se comienza a cumplir ese compromiso. Pero este nuevo pacto fiscal, es un farragoso vademécum de argumentos técnicos que al lector se le puede resumir en los siguientes puntos: 1) Los gobernadores que controlen sus gastos, podrán acceder a créditos internacionales para obras de infraestructura, sin necesidad de tener que pedir permiso a la Nación. 2) A los gobernadores que tengan problemas en sus cuentas y sus déficits se les impedirá asignar fondos a gastos corrientes –léase con claridad salarios estatales- más allá del índice de inflación. 3) Los gobernadores que cumplan los objetivos, recibirían mejoras en la calidad del gasto de capital, para cloacas, agua potable y vivienda. Como se ve, hasta aquí, se trata de una expresión de deseos que mete en camisa de fuerza y casi anula la soberanía y la autarquía de los mandatarios provinciales. Que a un gobernador “se le impedirá” asignar fondos a lo que él y su realidad provincial consideren indispensable o lógico, es lisa y llanamente un avasallamiento de su autoridad. Si bien le da un argumento para negar aumentos salariales que pretendan superar el techo, le subordina su autonomía. Hay otros dos rubros que aparecen importantes. Uno mueve a expresar un “¡Por fin!” lleno de esperanzas. Es el que contiene la denominada “regla del fin del mandato” que establecería que seis meses antes de la finalización del mandato de cada gobernador, éste estará imposibilitado de asumir gastos permanentes o compromisos que después deberá afrontar el nuevo mandatario. El otro, mueve una sonrisa compasiva dirigida al dueño de la idea: obliga a que las provincias con sus cuentas saneadas, deban destinar los fondos excedentes de sus presupuestos a crear un fondo anticíclico que se podrá usar en caso de recesión o de reducción de la recaudación impositiva. Es tan simpático, que se convierte en ridículo. Es como volver a imaginar regiones argentinas, particularmente la del NOA, con mejores status que países como Alemania o Suecia, o con mejores estándares de vida que los cantones suizos. Paralelamente el instructivo a las provincias indica que deberán reducir la carga impositiva y eliminar los impuestos distorsivos.

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Hubo de todo. Fue una de esas semanas en las que se pueden encontrar buenas y malas para todos los paladares. Los ministros de economía de casi todas las provincias –diecisiete- se reunieron con el titular nacional Nicolás Dujovne en Mendoza y firmaron lo que el gobierno nacional calificó como “histórico pacto” de responsabilidad fiscal (otro más y van…), que sentaría las bases para la elaboración final de un proyecto de ley, con el  objetivo de ordenar el país y establecer una suerte de programa de premios y castigos para los gobernadores, según sus administraciones observen contención de gastos, ajuste de sus déficits y un ordenamiento general de sus cuentas. Por Jujuy, obviamente, participó el ministro Carlos Sadir, quien se comprometió junto a sus pares, a no vender activos del estado provincial y a no tomar personal seis meses antes de las elecciones generales. El estado jujeño no tiene previsto –que se sepa- vender activos, y la idea de frenar las designaciones de personal llega quince meses tarde. Apenas algunos distraídos o demasiado lentos, estarán quedando afuera, si es que se comienza a cumplir ese compromiso. Pero este nuevo pacto fiscal, es un farragoso vademécum de argumentos técnicos que al lector se le puede resumir en los siguientes puntos: 1) Los gobernadores que controlen sus gastos, podrán acceder a créditos internacionales para obras de infraestructura, sin necesidad de tener que pedir permiso a la Nación. 2) A los gobernadores que tengan problemas en sus cuentas y sus déficits se les impedirá asignar fondos a gastos corrientes –léase con claridad salarios estatales- más allá del índice de inflación. 3) Los gobernadores que cumplan los objetivos, recibirían mejoras en la calidad del gasto de capital, para cloacas, agua potable y vivienda. Como se ve, hasta aquí, se trata de una expresión de deseos que mete en camisa de fuerza y casi anula la soberanía y la autarquía de los mandatarios provinciales. Que a un gobernador “se le impedirá” asignar fondos a lo que él y su realidad provincial consideren indispensable o lógico, es lisa y llanamente un avasallamiento de su autoridad. Si bien le da un argumento para negar aumentos salariales que pretendan superar el techo, le subordina su autonomía. Hay otros dos rubros que aparecen importantes. Uno mueve a expresar un “¡Por fin!” lleno de esperanzas. Es el que contiene la denominada “regla del fin del mandato” que establecería que seis meses antes de la finalización del mandato de cada gobernador, éste estará imposibilitado de asumir gastos permanentes o compromisos que después deberá afrontar el nuevo mandatario. El otro, mueve una sonrisa compasiva dirigida al dueño de la idea: obliga a que las provincias con sus cuentas saneadas, deban destinar los fondos excedentes de sus presupuestos a crear un fondo anticíclico que se podrá usar en caso de recesión o de reducción de la recaudación impositiva. Es tan simpático, que se convierte en ridículo. Es como volver a imaginar regiones argentinas, particularmente la del NOA, con mejores status que países como Alemania o Suecia, o con mejores estándares de vida que los cantones suizos. Paralelamente el instructivo a las provincias indica que deberán reducir la carga impositiva y eliminar los impuestos distorsivos.

De la “copa” ni hablar

El novel ministro Dujovne, cuya visita se espera en Jujuy para los próximos días según anticipos oficiales, se habrá anotado un poroto dentro de las expectativas del gobierno nacional. El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, (que no pudo estar en el cónclave de Mendoza) habrá sentido que retrocedía un paso, porque tanto él como su viceministro Alejandro Cardarelli (que no representó junto a Guillermo Guissi, director nacional de Relaciones Fiscales), vienen siendo los hombres que defienden a las provincias y su delicada crisis estructural. Pero quizás no hayan alcanzado a sentir como muchos provincianos, que esta nueva vuelta de la tuerca de un gobierno nacional sobre los estados federales, es otro “engañapichanga” para meter a los gobernadores en una suerte de obligaciones casi imposibles de cumplir, o en una competencia perdida de antemano, que volverá a someter a las provincias al arbitrio de los funcionarios nacionales y a los vaivenes útiles al gobierno central. Este paso de comedia –o tragedia- ya lo intentó Carlos Menem, instalando como parche, un festival oprobioso de ATN (aportes del tesoro de la Nación) que se entregaban según la cara –y el comportamiento- del cliente,  y los Kirchner, que llegaron a “revisar” cada tres meses el comportamiento de los gobernadores para abrir o cerrar la canilla que les diera vida. Y Carlitos Sadir, habrá sentido que tenía que firmar lo que todos firmaban para no quedar como la mosca blanca de la reunión, con las consecuencias de la rebeldía. Esto nunca dio resultados y escondió siempre lo que verdaderamente hubiese sido revolucionario y refundante de la vida de la República: una discusión mayúscula acerca de una nueva y equilibrada distribución de la coparticipación federal, una verdadera actitud revolucionaria que restableciera el orden y contribuyese a la paz social. De esto habían hablado en campaña Maurico Macri y Gerardo Morales, pero parece que quedará para más adelante. Porque el peso conservador de los hábitos y otras razones, todavía pueden más. Las provincias de La Pampa, Buenos Aires y San Luis, no firmaron este pacto, porque las tres no integran el llamado “Consejo Federal para la responsabilidad fiscal”. La Pampa y San Luis, por su propio orden interno y Buenos Aires, por su propio desorden que sólo supera con la garantida bendición presidencial.

Operación fallida

La semana que pasó, dejó como saldo sobresaliente el resultado de otra pulseada en la legislatura. Al momento de establecer sus días de sesiones ordinarias, el pleno de cuerpo resolvió que será los días miércoles o jueves o viernes. Es decir, en cualquier momento. En la preparatoria todos tenían sus ojos puestos en los jefes de bloque, que luego de varias charlas reservadas entre ellos y otras ampliadas, y conciliábulos y avances y retrocesos, debían resolver en el recinto quienes serían las autoridades del cuerpo y de las comisiones de trabajo. El Frente Renovador, a través de operadores del vicegobernador, de los diputados de Primero Jujuy y algunos funcionarios, había intentado durante los días previos el objetivo de sumar voluntades para desplazar a los legisladores del bloque del Partido Justicialista, de los lugares de conducción de las comisiones donde ejercen presidencia o vicepresidencia. También habían operado “desde afuera” importantes caciques del peronismo que hoy buscan un nuevo espacio para sobrevivir. Así se llegó al lunes, día en que en la Legislatura el diputado Carlos Lops, discreto referente del moisesismo sampedreño y discreto nuevo simpatizante del massismo, llegó luciendo un traje digno de una asunción. Amigos habían trabajado para lograr que fuera él el nuevo vicepresidente del Poder, en reemplazo del peronista Rubén Rivarola. Detrás de ese cambio, las demás modificaciones hubieran sido un sencillísimo“efecto dominó”. Sorprendió el jefe radical Alberto “Piqui Bernis”, quien en unos segundos argumentando que al no haber habido una elección, entendía que las autoridades de la cámara debían seguir siendo las mismas. Su moción fue rápidamente compartida por el jefe del justicialismo Javier Hinojo que no tuvo necesidad de recurrir a ningún argumento. Hubo luego una alocución del compromiso del diputado Ermindo Marcelo Llanos ex frente para la victoria y actual presidente del bloque Peronista adscripto al massismo, quien frente a la fallida “operación cambio” resguardó la “calidad de las personas” que se pretendía cambiar, y adelantó la abstención por razones “puramente políticas”. También habló otro diputado del massismo, tras lo cual se levantó la sesión dejando todo como estaba. Dicho de otro modo, el radicalismo eligió sus adversarios en la legislatura, descartó las pretensiones de sus socios y simpatizantes en el gobierno. Piqui Bernis –y por su voz el mismísimo GM- marcó la cancha, y así tomó posición frente a algunos aliados que últimamente le traen más dolores de cabeza que satisfacciones. Todo fue tan rápido que no hubo ni tiempo para sorpresas o análisis. Ni para advertir el desaliento de algunos dentro de la Casa de Piedra y de otros que como Julito Moisés, esperaban el éxito de un primer movimiento de piezas que repercuta en la interna del PJ.

Otro bloque... y van…

El episodio que dio una respuesta a medias a aquella expectativa, fue la creación del nuevo bloque “Eva Perón”. Como ya se sabía las legisladoras Mariela Ortiz y Patricia Armella, se escindieron formalmente del bloque del Partido Justicialista con el que venían manteniendo diferencias desde el mismo momento en que se perdieron las elecciones del 2015, o incluso antes. Ambas legisladoras se cobijan ahora bajo la conducción del vicegobernador Carlos Haquim en quien dijeron públicamente haber encontrado las virtudes que durante años ponderaron en Eduardo Fellner, de quien recibieron en su momento algunas bendiciones para acceder a diferentes cargos electivos y partidarios. Así sin sorpresas, ratificaron lo que en el mundo parlamentario y político era un secreto a voces. Lo notable es que siguen apareciendo bloques, pero no ideologías diferentes. Salvo los diputados tupaqueros (de un bloque en peligro de extinción), todos los demás son radicales o peronistas. Contradiciendo a Borges, a éstos ¿no los separa el amor, sino el espanto?

Noticias peronistas

En la cuestión del peronismo, nos tiempos se agotaron. Los diez días de la jueza María Romilda Servini vencen hoy a primera hora judicial. Los peronistas encolumnados detrás de la intervención de Celso Jaque aseguran que el fallo confirmará la validez de esa intervención. Dicen además, el Consejo Nacional del Partido Justicialista realizará mañana a la tarde una reunión de su mesa nacional ampliada en su sede histórica de Matheu 130. Allí analizará la situación de cada distrito con miras a las elecciones intermedias de este año y según anticiparon fuentes oficiosas, confirmaría las razones y los objetivos de la intervención al distrito Jujuy, y también la exigencia de que el irregular presente finalice con una interna sin exclusiones y con una amplia convocatoria a las PASO, en el caso de los cargos electivos nacionales. Los massistas instalados en el Partido confían en otro resultado, pero por las dudas ya abrieron los paraguas diciendo frente a cada micrófono disponible que esa decisión no es la última y que todavía habrá otra instancia de apelación. Es cierto, pero detrás de ese tironeo, están los plazos electorales que cuelgan sobre el PJ como la espada de Damocles. Deben pensar que además de resolver qué hacer con el Partido Justicialista, los dirigentes que queden al frente, todavía tienen que salir a recorrer calles, pueblos y ciudades, y golpear puerta por puerta para buscar peronistas dispuestos a volver a la lucha.

Gremios

Los gremios estatales volverán a sentarse en la mesa de diálogo convocados por el gobierno. Los caciques sindicales no abrigan demasiadas esperanzas en cuanto a las ofertas del patrón que está plantado en un 10% de aumento y una cláusula gatillo para alcanzar a la inflación, y menos con relación a respuestas acerca de la propuesta que ellos mismos elaboraron. De todas maneras, “la voluntad está” dijo una dirigente de la segunda línea, “y no podrá decir el gobernador que no apostamos a dialogar”. De todos modos, es tal la brecha entre ambas posiciones que las partes deberán extremar su capacidad de ceder para evitar males mayores a la maltrecha economía cotidiana de Jujuy.

Los actos del 24

Otro hecho sobresaliente de la semana fueron los actos y marchas del 24 de Marzo, Día Nacional por la memoria, la Verdad y la Justicia. El gobierno tuvo una sobria –y casi desapercibida- evocación de la fecha en el Salón de la Bandera y en la plazoleta que recuerda al fiscal de los Juicios a las Juntas Militares, Julio César Strassera. Dio brillo a esos homenajes, la presencia de la viuda del emblemático abogado autor de la célebre sentencia “Nunca más” con que clausuró su alegato en el juicio,  Marisa de Strassera. Los otros actos fueron realizados por organizaciones defensoras de los derechos humanos, y tuvieron la presencia, la emotividad y el compromiso que renuevan con igual vigor cada año. Se diferenciaron así de los actos en la Capital Federal, donde la injerencia de las internas de las agrupaciones de izquierda y la intención del kirchnerismo de copar las evocaciones, casi termina banalizando los altos objetivos de los homenajes.

Los mensajes 

Esta semana culminará con el mensaje del Gobernador Gerardo Rubén Morales, inaugurando el período de sesiones de la Legislatura, arbitrariamente dispuesto para el viernes 31. Se espera además del repaso sobre los logros y el cumplimiento de objetivos que el GM considere pertinentes, alguna definición concreta de los próximos pasos de la gestión y si este año el gobierno convocará a los jujeños a meterse de cabeza –finalmente- en un debate que reorganice la vida política provincial, con un nuevo código electoral, otro piso electoral, nuevo número de diputados provinciales, etc. y si llegará -finalmente también- la prometida convocatoria a elección de constituyentes que actualicen, reformen o cambien la Carta Magna de Jujuy, todavía llena de vicios, de disposiciones obsoletas y de zonas anacrónicas, promesas que también se menearon durante las campañas electorales, como factores trascendentes del cambio que los jujeños aceptaron masivamente. El sábado, el Intendente Municipal de san Salvador de Jujuy, Raúl Jorge, hará lo propio frente al Concejo Deliberante. Se espera de él cualquier tipo de mensaje alentador, acerca del futuro la “Tacita de plata”, tan leal, tan constante, y tan paciente con sus autoridades.

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