Sasakuy es una cooperativa de artesanos que reúne y difunde producción propia y lugareña de Quebrada y Puna. Está ubicada en el kilómetro 1804 de la ruta nacional N° 9, en la localidad de Uquía.
inicia sesión o regístrate.
Sasakuy es una cooperativa de artesanos que reúne y difunde producción propia y lugareña de Quebrada y Puna. Está ubicada en el kilómetro 1804 de la ruta nacional N° 9, en la localidad de Uquía.
Sasakuy se constituyó en el año 2002 con el afán de promover la artesanía auténtica de la provincia de Jujuy. Reúne una gran cantidad de artesanos independientes, en especial tejedores, pero también ceramistas, orfebres, diseñadores, bordadores y pintores. Actualmente, son alrededor ciento setenta artesanos que están vinculados a este emprendimiento.
Oscar Escalante y Mariela Cazón son esposos y están al frente de este emprendimiento que tiene la característica de reunir arte y diseño respetando las técnicas ancestrales de esquilado, escardado, lavado, hilado, teñido y tejido.
Hace alrededor de un año y medio se trasladaron desde la ciudad Humahuaca a Uquía. Están realizando los trámites para obtener la personería jurídica y trabajan incansablemente para mantener las técnicas milenarias del lugar y lograr poner en valor la artesanía local que se diferencia de la producción industrial.
Buscan que quienes visiten el lugar lo perciban como un símbolo de vida donde se reúnen las enseñanzas de los abuelos del pasado con la energía creativa del presente. Tanto es así, que ponen en valor las técnicas tradicionales en telar, para recuperar antiguos puntos y diseños, investigan el significado de esos diseños, que caracterizan a los tejidos autóctonos e informan sobre simbología a todos los que visitan el lugar.
Oscar Escalante nos cuenta que el nombre Sasakuy significa energía y proviene de una leyenda del lugar. La cooperativa tiene un claro objetivo y es que la gente logre apreciar el verdadero trabajo artesanal.
Cada prenda realizada es trabajada muy cuidadosamente. Según explica Escalante, todo comienza con la cría de los animales. Es por eso, que en la parte posterior de este emprendimiento, hay unas llamas a las que esquilan para obtener la materia prima ya que no hay hilanderíasen los alrededores.
Una vez que se esquila a los animales, se sacude la materia prima para limpiarla y podercomenzar con el proceso de hilado. Éste puede ser de la forma tradicional utilizando la puska o en tornos que permiten un hilado más parejo. Según explica, Escalante "aquí nos adaptamos de acuerdo a la cantidad de lana que nos traen los artesanos para hacer un producto y decidimos por ejemplo a tal tejedora le pedimos este producto y a otra, otro."
Luego, realizan el teñido de los hilos de llama, alpaca u oveja. Para eso utilizan dos técnicas, el teñido industrial realizado con anilina y con el que se obtienen colores más vivos y el teñido natural que requiere un proceso más largo ya que se realiza con diferentes plantas del lugar.
Posteriormente, con los hilos naturales o ya teñidos, los tejedores comienzan su trabajo. En Sasakuy hay aproximadamente treinta y cinco tejedores a dos agujas y veintiocho a telar. Muchos son de otras localidades quebradeñas y de la puna.Oscar y Mariela les llevan la lana, los diseños y les pagan las jornadas de trabajo por las prendas realizadas. Lo interesante es que por lo general hay diferentes generaciones de tejedores y cada uno impone su estilo en las prendas.
Escalante es un tejedor a telar y realiza sus tejidos en la cooperativa. Nos cuenta que también trabajan a pedido y de acuerdo a la demanda. Él realiza diferentes telas como el barracán y el picote con diversos puntos de tejido y telares desde dos o hasta doce cuadros.
La experiencia de ir conociendo el proceso de este trabajo es sumamente enriquecedora para aquellos amantes del arte y de la cultura que buscan conocer y vivenciar estas técnicas ancestrales.
Es por eso que dentro de poco, la gente de esta cooperativa estará recibiendo a estudiantes de una universidad francesa de diseño que visitarán el lugar para realizar una pasantía y conocer todo el proceso y las técnicas que se realizan en el lugar.
En los salones se pueden encontrar tejidos, pinturas, cerámicas y otros productos artesanales como vinos, cinturones, carteras y algún que otro producto industrial.
Los atractivos
Otro atractivo para hacer una parada en la sede de la cooperativa quebradeña es que allí funciona una casilla de información turística.
Una construcción llamativa realizada por los integrantes de la entidad que tiene la forma de una gran tinaja y que además es un mirador que permite contemplar los bellos paisajes de Uquía.
La casilla fue inaugurada en febrero del 2016 y es atendida ad honorem por los integrantes de la cooperativa Sasakuy .
En esa ocasión, Mariela Cazón explicaba que la forma de tinaja elegida para la casilla turística tiene que ver con simbologías vinculadas al dar y recibir y al hecho de ser contenedora y conservadora de saberes, por lo que intentan que esté siempre llena para recibir a los turistas.
El mirador permite admirar la quebrada de las Señoritas, formación de cerros rojos no solo de gran belleza sino de una mística que el turista podrá develar al acercarse al lugar.
También hay formaciones calcáreas que hacen al cerro Blanco; además de altos cerros en forma zigzagueante que llevan a la histórica mina de Moya.
Las vivencias que se pueden experimentar en el lugar están relacionadas, por un lado, con el turismo aventura, y por el otro, con el turismo rural y comunitario, ya que los pobladores están abiertos al intercambio cultural y de conocimientos con los visitantes que lleguen al lugar.
Sin duda, se trata de un lugar con un entorno paisajístico extraordinario, además de ideal para la contemplación.