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20 de Abril,  Jujuy, Argentina
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“Tienen el potencial para producir prendas de vicuña”

El emprendedor belga y autor del libro “La Economía Azul” visitó Jujuy a fin de desarrollar un plan estratégico en conjunto con productores vicuñeros de la Puna, para fomentar el agregado de valor a la fibra de vicuña, propiciando la elaboración de prendas artesanales.
Viernes, 14 de julio de 2017 20:20

¿Qué lo impulsa a trabajar con el sector vicuñero de la provincia?

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¿Qué lo impulsa a trabajar con el sector vicuñero de la provincia?

Ustedes tienen unos recursos extraordinarios que admiramos, tienen una cultura ancestral que ha sobrevivido por más de diez mil años en contacto con las vicuñas. Para nosotros es extraordinario tener contacto con los primeros productores textiles en el mundo que no fueron con lana de oveja, sino con vicuña, es decir que es una historia para el mundo, es por eso que cuando conocí  a Rosa Cruz y la gente de comunidades vicuñeras de Jujuy, que quieren trabajar con la vicuña y recuperar esta tradición extraordinaria, quise compartir mi experiencia y mis conocimientos para que ellos puedan darle valor agregado a su materia prima.

¿Qué potencial tiene Jujuy en el sector vicuñero para proyectarse al mundo?

El mundo tiene solamente 20 mil toneladas de lana de vicuña y la demanda es muy superior; hay 16 mil toneladas de cachemir (un tipo de lana de cabra) y solamente 20 mil de vicuña, entonces si bien no hay oferta, hay una gran historia milenaria por detrás lo cual aumenta el precio del producto. Para eso se necesita contar con sastres que saben cómo trabajar la vicuña, cómo hacer el hilo porque es tan fino que no puede tener contacto con el metal, se tiene que tratar sólo con madera. Es decir, actualmente hay muchos intermediarios y etapas para llegar a un producto final de muy alta calidad que aprecie el mundo, cuando Jujuy tiene todo para hacerlo, tiene una historia que es más que un buen producto, a la cual sólo hay que sumarle una estrategia de desarrollo territorial en beneficio de las comunidades que han vivido con esto toda la historia.

¿Cuáles son las recomendaciones que ha brindado desde su experiencia a los productores?

Yo he venido con un saco de vicuña para que vean cuál es el producto final, porque pienso que se tiene que tener un producto final en la mente, no es el hilo, no es la tela, es el producto final el que la gente compra con mucho cariño y con una gran decisión porque no es un producto para una sola generación  sino que se compra para tres generaciones, es otro modelo de consumo el que proponemos. Al igual que los reyes, en el pasado, nunca compraron una ropa para lavarla cinco veces como las prendas de hoy, sino que compraron para generaciones. Yo creo que primero hay que definir el producto y en eso quiero trabajar con ellos, argumentando por qué es importante generar valor agregado a un simple hilo que se vende a un precio rápido, de mercado. Después se deben definir los artesanos, necesitamos una nueva generación de artesanos  ya que los viejos artesanos se perdieron; este proyecto de vicuña no se refiere a una mera prenda, sino que es verdadero arte y por eso tenemos que trabajar con gente que aprenda el arte de la vicuña. En Jujuy se podría lograr una muy buena producción que podría tener un gran impacto económico en la región; un kilo de lana de vicuña cruda vale 500 dólares, bien trabajado el hilo puede costar mil dólares, pero un saco que se puede elaborar con dos kilos, vale 20 mil dólares.

¿En cuánto tiempo Jujuy podría llegar a elaborar un producto final de vicuña?

Con los chakus (esquila de vicuñas) que ya se realizaron hay unos 200 kilos disponibles, lo que quiere decir que ya están en condiciones de comenzar a trabajar con los artesanos. La gran ventaja de considerar un producto como arte es que no se demanda de una perfección desde el día uno, sino que tiene que ser una expresión de arte, por eso pienso que a finales de este año podemos tener los primeros productos de arte que podrían ser ocho o diez piezas para vender. Antes de fin de año además necesitamos unos 20 o 30 chakus importantes que deben ser documentados, y tienen que tener una metodología transparente; los dos objetivos deberíamos cumplirlos antes de fin de año.

¿En qué consiste la "economía azul" y de qué manera la aplicará en las comunidades vicuñeras?

La economía azul pretende ser mucho mejor que la economía verde;  es decir, no solamente tener un alto valor agregado, con un producto realizado íntegramente en un lugar, sino que además propicia la regeneración del ecosistema, ya que en la zona norte de Jujuy existen glaciares subterráneos en peligro con la presencia del ganado, de modo que con la vicuña se puede recuperar esta zona tan frágil, es decir que la convivencia con estos animales silvestres permite recuperar el ecosistema. 

 

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