Hay empates que deben festejarse como triunfos. Es así. Cuando los planetas no se alinean parece complicado torcer el rumbo. Gimnasia venía de tres derrotas consecutivas en condición de visitante y entonces el desafío era salir de perdedor en Junín. Y lo logró, pero con mucho sufrimiento. Fue uno a uno ante Sarmiento, el único líder de la B Nacional. Por eso, los "lobos" tienen motivos para estar más que contentos y esperar con otros aires el cierre de la primera etapa el domingo frente a Brown de Adrogué en el "23".
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Hay empates que deben festejarse como triunfos. Es así. Cuando los planetas no se alinean parece complicado torcer el rumbo. Gimnasia venía de tres derrotas consecutivas en condición de visitante y entonces el desafío era salir de perdedor en Junín. Y lo logró, pero con mucho sufrimiento. Fue uno a uno ante Sarmiento, el único líder de la B Nacional. Por eso, los "lobos" tienen motivos para estar más que contentos y esperar con otros aires el cierre de la primera etapa el domingo frente a Brown de Adrogué en el "23".
En la etapa inicial no pasó nada de nada. El dueño de casa se mostró más incisivo, pero no tuvo ideas claras. Confundió velocidad con apresuramiento. La visita se plantó bien en el medio, dejando por momentos muy solo a Contín arriba.
A medida que fueron pasando los minutos, el trámite cayó en un pozo total y el balón fue castigado una y otra vez.
Sin embargo, a los 6’ de comenzar el complemento, "Nacho" Sanabria apareció muy solo por izquierda y tras un zapatazo cruzado, que se desvió en un defensor, la pelota infló la red.
El gol fue un cachetazo para Sarmiento. Jamás pensó que iba a tener que remotar un resultado adverso por lo hecho en el primer tiempo.
El "lobo" fue inteligente y dio pelea en el medio. No se refugió atrás porque sabía que el rival se iba a "agrandar".
Los nervios comenzaron a jugarle en contra al "verde" al ver que la igualdad no llegaba, pero en una acción desafortunada de Sebastián Sánchez llegó el penal que Miracco cambió por festejo. El central tomó del cuello al recién ingresado Depetris y el árbitro Nazareno Arasa cobró la pena máxima. Encima Sánchez vio la tarjeta roja.
La posterior expulsión de Olivera -le pegó sin pelota al juvenil Buono- dejó diez con diez dentro del campo.
Y los minutos finales fueron para el infarto porque hubo más espacios y menos "piernas". Ferreyra habilitó a Buono y su tiro cruzado exigió a Vicentini. Y cuando terminaba el juego, Arasa cobró penal por supuesta mano de Caro Torres. Nada que ver. Había sido Depetris quien saltó y le pegó un puñetazo al balón, estrellándose en el palo. Por suerte, el asistente número dos, Leandro Núñez, hizo rectificar la decisión del juez principal.
Pero la cosa no terminó allí. Arasa adicionó diez minutos, no justificándose el motivo concreto.
Gimnasia cosechó una unidad valiosa que ahora deberá potenciarla ganando en casa el próximo domingo cuando reciba a Brown de Adrogué.
Con este partido pondrá punto final a la primera ronda de la B Nacional, sabiendo que la consigna es mejorar para no sufrir con el descenso el próximo año.
Las posiciones del torneo
La fecha número 12 de la B Nacional se había iniciado con los triunfos de Nueva Chicago sobre Agropecuario de Carlos Casares y de Almagro como visitante ante Los Andes, ambos por 1 a 0; y el empate 2 a 2 entre Brown de Puerto Madryn y Villa Dálmine.
De esta manera, las posiciones se encuentran así.
Sarmiento 26 puntos; Nueva Chicago 25; Arsenal y Almagro 21; Independiente Rivadavia 19; Platense, Mitre, Agropecuario y Gimnasia (Mendoza) 17; Brown (Adrogué) y Central Córdoba 15; Villa Dálmine, Rafaela y Morón 14; Ferro e Instituto 13; Chacarita y Gimnasia (Jujuy)12; Olimpo 11; Defensores de Belgrano y Santamarina 10, Quilmes 9; Temperley y Brown (Madryn) 8; Los Andes 4.