Susana Gonzales viene desde La Quiaca Vieja, distante a 5 kilómetros del ejido urbano quiaqueño.
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Susana Gonzales viene desde La Quiaca Vieja, distante a 5 kilómetros del ejido urbano quiaqueño.
Todas las mañanas, se ubica en avenida Lamadrid entre Hipólito Irigoyen y Catamarca. No viene sola, la acompañan sus cuatro burras en el trayecto que realiza diariamente.
“Es época de frio y las personas consumen leche de burra para evitar los resfríos y otras enfermedades respiratorias, es un método que funciona porque protege los pulmones y levanta las defensas” explica a El Tribuno de Jujuy.
Ante la consulta de cuánto tiempo se debe consumir la leche de burra, afirmó muy segura que “como mínimo 9 días, eso ayuda a prevenir las enfermedades, pero debe ser consumida antes de que la persona este enferma”.
Y añadió: “Cada vasito cuesta 300 pesos por ahora, con el aumento de las cosas puede ser que suba, el consumo se incrementó en personas de todas las edades, luego cuando hace calor bajan las ventas. Los residentes en otras provincias son quienes compran”.
Según su experiencia, la leche de burra ayuda a tener una buena digestión, colabora en brindar solución a los problemas de asma, desnutrición, hígado, colesterol, pulmonías y cáncer, ya que incrementa el sistema inmunológico en quimioterapias, reumatismo, diabetes, regenerador y antioxidante de la piel, cansancio o fatiga.
Un estudio señala que la leche de burra se caracteriza por su parecido a la leche materna humana, tanto en tipo de proteínas como en lactosa, lo que le entrega a ambas ese dulzor característico y agradable al gusto.
La leche de burra casi no contiene caseína (una proteína difícil de digerir) y es alta en lactoalbuminas.
Además, contiene vitamina A, B1, B2, B6, C, D y E, calcio, ácidos grasos omega 3 y antioxidantes que previenen el envejecimiento precoz.
Incremento de enfermedades respiratorias
La directora del hospital Jorge Uro, Fernanda Elías manifestó que hubo un notable incremento de enfermedades respiratorias en niños y adultos, “la guardia registró unas cuatro planillas diarias de personas que vienen por atención, eso hizo colapse la atención, no damos abasto” sostuvo.
También añadió, “la sala pediátrica está llena con varios internados, algunos con oxígeno pero la situación está controlada por nuestro personal, también es importante el número de contagios en personas adultas”, indicó.
Al tiempo que recomendó; “si los niños o adolescentes en edad escolar tienen síntomas de gripe pedimos que por 72 horas hagan reposo, o en su defecto usar barbijo para no contagiar a los demás. Lo mismo en las instituciones donde la gente trabaja, debemos recordar las recomendaciones que aprendimos en época de pandemia, lavado de manos y uso de alcohol en gel, ventilar los espacios, la responsabilidad es de todos”, enfatizó.