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19 de Mayo,  Jujuy, Argentina
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Preocupan las pérdidas por sequía y costos para producir

En tomate y otros perdieron del 30 al 40%. El arriendo pasó de $200 a $450 mil por hectárea e insumos en dólares.
Lunes, 17 de julio de 2023 01:00

Productores de distintas regiones coinciden en que la sequía les generó pérdidas del 30 al 40% en esta cosecha, en que el precio no permite recuperar lo invertido ya que los insumos están a precio dólar, y les preocupa afrontar la nueva campaña ya que los arriendos duplicaron su valor y llegan a 450 mil pesos la hectárea (ha).

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Productores de distintas regiones coinciden en que la sequía les generó pérdidas del 30 al 40% en esta cosecha, en que el precio no permite recuperar lo invertido ya que los insumos están a precio dólar, y les preocupa afrontar la nueva campaña ya que los arriendos duplicaron su valor y llegan a 450 mil pesos la hectárea (ha).

"Este año ha sido complicado en la producción principalmente por la sequía, en la zona escasea el agua y también porque somos arrendatarios, no tenemos para arrendar y por la inflación el tema de las semillas, insumos, son muy caros, cuando sacamos para vender el tomate... toda la verdura no tiene precio", explicó Hugo Arroyo, productor de Yuto.

HUGO ARROYO, PRODUCTOR DE YUTO

Enfatizó en que los insumos tienen precio dólar y se complica afrontar esos altos costos, y se dificulta poder recuperar lo invertido a juzgar por los precios de venta, además de la baja productividad por los efectos de la helada. Es que actualmente al cajón de tomate los intermediarios lo están pagando 2.000 pesos. "Todos redujeron, los que plantaban cuatro o cinco hectáreas ahora plantan dos. En el sector son casi todos pequeños productores, plantan una hectárea de tomate, zapallito, pimiento, chaucha, de todo un poco. Este año por el tema de la sequía y nos agarró una tormenta, perdió mucho la floración, por lo que estamos cosechando un 30% menos del año pasado", sostuvo Arroyo.

En Santa Clara cultivan tomate, zapallito, berenjena, chaucha, ají y la situación se repite. "El agua por este tiempo es poca, bajó y no hay lluvias", dijo y explicó que en esta época solía lloviznar pero ahora es menos, con lo cual afecta los cultivos y genera que al cosechar sean de menor tamaño. "El año pasado hemos sufrido el agua y cosechamos menos, ha sido un 50% menos. Este año vamos cosechando bien, la pérdida es del 30% y ahora ya nos está faltando el agua", explicó Rafael Aramayo. Es tiempo de cosecha y se está sacando la producción con ese déficit en las zonas de Santa Clara, Arroyo Colorado, Sauce, que comercializan hacia el mercado de Perico y se envía a provincias del Sur.

Son pequeños productores que arriendan, por lo que explicó que les resulta caro afrontarlo y se les suman los gastos de insumos que están a precio dólar. Otra complicación es el bajo precio en la finca a los intermediarios, por ejemplo un cajón de tomate 20 a 22 kilos está de 1.500 a 2.000 pesos, y en el mercado se revende a un precio superior.

CONTROL DE PLAGAS A PRECIO DÓLAR

"Este año está feo para todos por el tema del dólar más que nada, los insumos, las semillas están carísimas, no hay arriendo. Nosotros somos arrenderos, no somos propietarios, está difícil para hacerlo para el año, este año están hablando de 400 a 450 mil pesos la hectárea para seis meses, el año pasado pagamos 200 mil", coincidió Juan Mamaní, productor de Fraile Pintado, expresando su preocupación.

Respecto a la sequía estimó que al parecer este año se extenderá ya que algunos ríos estarían secándose, por lo que decidió que a partir de septiembre no podrá plantar porque entiende que no habrá agua. Producen tomate, pimiento y otras verduras, y este año cosechó el 60% y el resto se perdió por la sequía, y no pudieron afrontar virus que afectan al zapallo angolita y al tomate, porque los insumos son caros y el pago por el cajón del tomate tampoco les permite recuperar.

También coincidió Juan Alberto Flores, productor de Santa Clara. "Tenemos la problemática de los arriendos, son muy altos y la sequía, por lo que no se hizo lo que se hacía años anteriores sino la mitad de la producción. Por falta de agua y la sequía es tremendo para todos los productores, estaba peligrando la producción este año", precisó.

Además, todos son arrenderos, este año fue de 200 a 250 mil pesos por ha, con contratos a seis meses: les cuesta afrontar el alto costo de insumos agroquímicos; y pesa el bajo precio del tomate por los intermediarios.

Planteó que tampoco tienen posibilidad de trabajar en producción agroecológica debido a que no son propietarios, les resulta difícil mejorar la tierra porque lleva tiempo. Otra de las preocupaciones son las fumigaciones aéreas de grandes productores que al aplicar afectan las hectáreas arrendadas y terminan dañando sus plantas generándoles pérdidas y esto se da en Santa Clara, Fraile Pintado y Yuto.

Alternativa agroecológica

CULTIVOS DE KALE AGROECOLÓGICO

Otra de las alternativas productivas que se desarrollan es mediante la agroecología, que en Perico impulsan a través de una biofábrica de insumos ubicada en esa localidad. Trabajan desde hace años pero asumen que la dificultad en la aplicación se da cuando no son las mismas tierras que trabajan debido a que todos deben arrendar para poder cultivar y necesitan como mínimo tres años de aplicación de los productos.

LECHUGA | EL CONTROL BIOLÓGICO SE HACE CON PREPARADOS NATURALES (PERICO).

Preparan abono denominado bocachi, con cenizas, leche, miel, tierra y chala, entre otros, lo que permite recuperar suelos que llevan daños por uso de químicos. También elaboran otros preparados para combatir diversas enfermedades y plagas. Una de ellas es la que llaman tintura de ají para evitar la aparición de arañuelas, y otras que suelen aparecer según el tipo de cultivo.

Enrique Delgado, técnico en agroecología explicó que se formó en la Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT) en La Plata junto a un centenar de pares de todo el país, por lo que enseñan a colegas a elaborar sus propios abonos e insumos. Lleva adelante los trabajos en el laboratorio de agroecología de Perico, que incluye a 70 personas que rotan en la labor, producen frutilla, papa y otros cultivos con éxito. Tienen su sede que está en Fraile Pintado, y comercializan los abonos y remedios a productores de la Quebrada y otras regiones ya que tienen buenos resultados.