Como si fuera una película de Hollywood. La historia comenzaría con un niño humilde de Vila Kennedy, una favela de Rio de Janeiro, y terminaría con ese mismo chico en el partido inaugural del Mundial Brasil 2014, pero en lugar de jugar para el anfitrión, se pone la camiseta del rival.
El carioca Eduardo da Silva se nacionalizó croata y jugará contra la selección de Brasil en el inicio de la Copa del Mundo.
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Como si fuera una película de Hollywood. La historia comenzaría con un niño humilde de Vila Kennedy, una favela de Rio de Janeiro, y terminaría con ese mismo chico en el partido inaugural del Mundial Brasil 2014, pero en lugar de jugar para el anfitrión, se pone la camiseta del rival.
El carioca Eduardo da Silva se nacionalizó croata y jugará contra la selección de Brasil en el inicio de la Copa del Mundo.
A los 31 años, el cumplirá el sueño de jugar el Mundial y de escuchar el himno brasileño en el campo de juego, pero con la indumentaria de otro seleccionado. “Cuándo ingrese al estadio, y esté lleno, me va a invadir un nerviosísimo y será un momento muy especial. Nunca pensé que un día iba a tener la oportunidad de, siendo brasileño, jugar la Copa en Brasil contra la selección. Es como si fuera una película”, dijo el futbolista a O Globo.
No será el único caso en el partido inaugural que se jugará en el estadio Arena Corinthians. El atacante Sammir nació en Bahía, pero también forma parte del equipo croata que comparte el Grupo A con Brasil, Camerún y México.
“Siempre hablamos con Sammir sobre la oportunidad de jugar la Copa en nuestra casa. Estamos aquí para ser el caballo negro de la Copa, para dar el golpe. Si comenzamos bien el juego y hacemos un gol, todo es posible”, declaró Eduardo.
Su familia saldrá de Río para trasladarse al Estadio Itaquerao de San Pablo y asistir al juego inicial del torneo. A pesar de que corre sangre brasileña en sus venas, Eduardo defenderá los colores de Croacia.
“Elegí a Croacia por el cariño que recibí y estoy orgulloso de esto”, dijo el atacante del Shakhtar Donetsk de Ucrania, que podría ser titular.