Llegan las fiestas de fin de año y mucha gente insiste en celebrar con pirotecnia, generando ruidos que atormentan a nuestras mascotas. El uso de bombas y petardos es una costumbre que en Salta aún no ha podido erradicarse por una conjunción de factores. Mientras tanto, los estallidos siguen siendo un padecimiento no sólo para los animales (tanto como los perros sufren, por ejemplo, gatos, caballos y pájaros), sino también para niños autistas, bebés y personas enfermas.
Esta es la época del año más riesgosa para extraviar a nuestros compañeros de cuatro patas. Ante esta realidad, los propietarios deben extremar los cuidados y no pecar de exceso de confianza. "Mi perro no se asusta"; "A mi mascota la dejo afuera porque nunca se va muy lejos de mi casa", "Dejo al perro en el jardín, la reja es bajita pero nunca la saltó así que me voy tranquilo"... Estos son algunos de los argumentos que suelen anteceder el triste momento de la pérdida. La gente se confía y, sin querer, cuando la mascota se extravía, la dejan librada a todos los padecimientos de la calle. La pirotecnia le causa mucho daño a los animales. En general, perros y gatos reaccionan al estimulo potente que les produce una explosión. Por eso es preferible prevenir y no dejarlas nunca en la calle.
Rodrigo Aguilar es educador canino salteño (Estiloanimal Centro Canino, en Facebook). Consultado acerca de los recaudos que se deben tomar para proteger a las mascotas frente a los efectos de la pirotecnia, destacó ante todo: "Lo primordial es ponerle una identificación: un collar con un número de teléfono y una dirección para que, en caso de que se pierda, logremos recuperarlo lo más rápido posible". No existen pretextos para desatender este consejo, ni siquiera el factor económico: si no se puede gastar en un collar y en una chapita, se le puede atar al animalito una cinta cualquiera, con un cartoncito donde figure un número de teléfono, cubierto con varias vueltas de cinta adhesiva transparente (ver foto en página 165). El sistema no es muy duradero pero alcanza para sacar al animalito de apuro en caso de que se extravíe. Otras recomendaciones del educador canino para que, en estas fiestas, nuestras mascotas estén seguras:
Esta es la época del año más riesgosa para extraviar a nuestros compañeros de cuatro patas. Ante esta realidad, los propietarios deben extremar los cuidados y no pecar de exceso de confianza. "Mi perro no se asusta"; "A mi mascota la dejo afuera porque nunca se va muy lejos de mi casa", "Dejo al perro en el jardín, la reja es bajita pero nunca la saltó así que me voy tranquilo"... Estos son algunos de los argumentos que suelen anteceder el triste momento de la pérdida. La gente se confía y, sin querer, cuando la mascota se extravía, la dejan librada a todos los padecimientos de la calle. La pirotecnia le causa mucho daño a los animales. En general, perros y gatos reaccionan al estimulo potente que les produce una explosión. Por eso es preferible prevenir y no dejarlas nunca en la calle.
Rodrigo Aguilar es educador canino salteño (Estiloanimal Centro Canino, en Facebook). Consultado acerca de los recaudos que se deben tomar para proteger a las mascotas frente a los efectos de la pirotecnia, destacó ante todo: "Lo primordial es ponerle una identificación: un collar con un número de teléfono y una dirección para que, en caso de que se pierda, logremos recuperarlo lo más rápido posible". No existen pretextos para desatender este consejo, ni siquiera el factor económico: si no se puede gastar en un collar y en una chapita, se le puede atar al animalito una cinta cualquiera, con un cartoncito donde figure un número de teléfono, cubierto con varias vueltas de cinta adhesiva transparente (ver foto en página 165). El sistema no es muy duradero pero alcanza para sacar al animalito de apuro en caso de que se extravíe. Otras recomendaciones del educador canino para que, en estas fiestas, nuestras mascotas estén seguras:
1- Si la familia se va y debe dejar la mascota en casa, lo ideal es que quede en una habitación adecuada, sin elementos que la lastimen o que ella pueda romper. Debe ser un lugar al que ella esté acoistumbrada. Es preferible que quede con la luz encendida. También se aconseja dejarle la radio o el televisor prendido a un volumen un poquito más alto de lo normal (no muy fuerte porque eso también las aturde). No hay que olvidar dejarle bastante agua.
2- Rodrigo comentó que un producto que se está usando mucho últimamente porque contribuye a la relajación de la mascota es la lavanda. Se rocía esta fragancia en la cucha o en la mantita donde ella suele dormir y eso la tranquiliza.
3- Otra sugerencia es sacar a pasear al perrito la misma tarde del 24/12 o del 31/12, antes de que empiecen los estruendos de la pirotecnia. El objetivo es que el animalito se canse, gaste energía y esté menos ansioso.
4- Si los dueños se quedan en casa la noche de Navidad o Año Nuevo, deben tratar de estar tranquilos, actuar con normalidad, de manera que la mascota no asimile el estrés o la alteración de "su humano".
5- Si el animal se esconde debajo de una cama o mesa, Rodrigo aconseja dejarlo ahí. "Bajo ningún punto de vista conviene sacarlo, menos arrastrándolo, porque puede reaccionar mordiendo", remarcó.
6- Si la mascota se altera con los cohetes, no hay que castigarla y menos aún dejarla en terrazas o atada. La desesperación por escapar puede ocasionar que el animalito se lastime.
7- Una vez que terminan los estruendos, Rodrigo sugiere evaluar el nivel de estrés del animal. "Si gime más de lo normal, tiembla, jadea mucho y no tiene apetito, es porque quedó muy estresado. Si está en ese estado, lo ideal es dejarlo adentro de la casa si él quiere. Permitirle que duerma en un lugar donde se sienta seguro. No es recomendable sacarlo al patio en ese momento".
8- Si el perrito se altera demasiado con los cohetes y ninguno de los consejos anteriores funciona, es hora de pensar en un método de sedación que lo ayude a relajarse sin causar daños, siempre con la guía de un veterinario. "En algunos perritos el sedante funciona bien y en otros, no. Por eso se sugiere probarlo unos días antes, para ver el efecto de la droga en la mascota. Si no le hace efecto, es preferible no usarla", concluyó Rodrigo
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla
Llegan las fiestas de fin de año y mucha gente insiste en celebrar con pirotecnia, generando ruidos que atormentan a nuestras mascotas. El uso de bombas y petardos es una costumbre que en Salta aún no ha podido erradicarse por una conjunción de factores. Mientras tanto, los estallidos siguen siendo un padecimiento no sólo para los animales (tanto como los perros sufren, por ejemplo, gatos, caballos y pájaros), sino también para niños autistas, bebés y personas enfermas.
Esta es la época del año más riesgosa para extraviar a nuestros compañeros de cuatro patas. Ante esta realidad, los propietarios deben extremar los cuidados y no pecar de exceso de confianza. "Mi perro no se asusta"; "A mi mascota la dejo afuera porque nunca se va muy lejos de mi casa", "Dejo al perro en el jardín, la reja es bajita pero nunca la saltó así que me voy tranquilo"... Estos son algunos de los argumentos que suelen anteceder el triste momento de la pérdida. La gente se confía y, sin querer, cuando la mascota se extravía, la dejan librada a todos los padecimientos de la calle. La pirotecnia le causa mucho daño a los animales. En general, perros y gatos reaccionan al estimulo potente que les produce una explosión. Por eso es preferible prevenir y no dejarlas nunca en la calle.
Rodrigo Aguilar es educador canino salteño (Estiloanimal Centro Canino, en Facebook). Consultado acerca de los recaudos que se deben tomar para proteger a las mascotas frente a los efectos de la pirotecnia, destacó ante todo: "Lo primordial es ponerle una identificación: un collar con un número de teléfono y una dirección para que, en caso de que se pierda, logremos recuperarlo lo más rápido posible". No existen pretextos para desatender este consejo, ni siquiera el factor económico: si no se puede gastar en un collar y en una chapita, se le puede atar al animalito una cinta cualquiera, con un cartoncito donde figure un número de teléfono, cubierto con varias vueltas de cinta adhesiva transparente (ver foto en página 165). El sistema no es muy duradero pero alcanza para sacar al animalito de apuro en caso de que se extravíe. Otras recomendaciones del educador canino para que, en estas fiestas, nuestras mascotas estén seguras:
Esta es la época del año más riesgosa para extraviar a nuestros compañeros de cuatro patas. Ante esta realidad, los propietarios deben extremar los cuidados y no pecar de exceso de confianza. "Mi perro no se asusta"; "A mi mascota la dejo afuera porque nunca se va muy lejos de mi casa", "Dejo al perro en el jardín, la reja es bajita pero nunca la saltó así que me voy tranquilo"... Estos son algunos de los argumentos que suelen anteceder el triste momento de la pérdida. La gente se confía y, sin querer, cuando la mascota se extravía, la dejan librada a todos los padecimientos de la calle. La pirotecnia le causa mucho daño a los animales. En general, perros y gatos reaccionan al estimulo potente que les produce una explosión. Por eso es preferible prevenir y no dejarlas nunca en la calle.
Rodrigo Aguilar es educador canino salteño (Estiloanimal Centro Canino, en Facebook). Consultado acerca de los recaudos que se deben tomar para proteger a las mascotas frente a los efectos de la pirotecnia, destacó ante todo: "Lo primordial es ponerle una identificación: un collar con un número de teléfono y una dirección para que, en caso de que se pierda, logremos recuperarlo lo más rápido posible". No existen pretextos para desatender este consejo, ni siquiera el factor económico: si no se puede gastar en un collar y en una chapita, se le puede atar al animalito una cinta cualquiera, con un cartoncito donde figure un número de teléfono, cubierto con varias vueltas de cinta adhesiva transparente (ver foto en página 165). El sistema no es muy duradero pero alcanza para sacar al animalito de apuro en caso de que se extravíe. Otras recomendaciones del educador canino para que, en estas fiestas, nuestras mascotas estén seguras:
1- Si la familia se va y debe dejar la mascota en casa, lo ideal es que quede en una habitación adecuada, sin elementos que la lastimen o que ella pueda romper. Debe ser un lugar al que ella esté acoistumbrada. Es preferible que quede con la luz encendida. También se aconseja dejarle la radio o el televisor prendido a un volumen un poquito más alto de lo normal (no muy fuerte porque eso también las aturde). No hay que olvidar dejarle bastante agua.
2- Rodrigo comentó que un producto que se está usando mucho últimamente porque contribuye a la relajación de la mascota es la lavanda. Se rocía esta fragancia en la cucha o en la mantita donde ella suele dormir y eso la tranquiliza.
3- Otra sugerencia es sacar a pasear al perrito la misma tarde del 24/12 o del 31/12, antes de que empiecen los estruendos de la pirotecnia. El objetivo es que el animalito se canse, gaste energía y esté menos ansioso.
4- Si los dueños se quedan en casa la noche de Navidad o Año Nuevo, deben tratar de estar tranquilos, actuar con normalidad, de manera que la mascota no asimile el estrés o la alteración de "su humano".
5- Si el animal se esconde debajo de una cama o mesa, Rodrigo aconseja dejarlo ahí. "Bajo ningún punto de vista conviene sacarlo, menos arrastrándolo, porque puede reaccionar mordiendo", remarcó.
6- Si la mascota se altera con los cohetes, no hay que castigarla y menos aún dejarla en terrazas o atada. La desesperación por escapar puede ocasionar que el animalito se lastime.
7- Una vez que terminan los estruendos, Rodrigo sugiere evaluar el nivel de estrés del animal. "Si gime más de lo normal, tiembla, jadea mucho y no tiene apetito, es porque quedó muy estresado. Si está en ese estado, lo ideal es dejarlo adentro de la casa si él quiere. Permitirle que duerma en un lugar donde se sienta seguro. No es recomendable sacarlo al patio en ese momento".
8- Si el perrito se altera demasiado con los cohetes y ninguno de los consejos anteriores funciona, es hora de pensar en un método de sedación que lo ayude a relajarse sin causar daños, siempre con la guía de un veterinario. "En algunos perritos el sedante funciona bien y en otros, no. Por eso se sugiere probarlo unos días antes, para ver el efecto de la droga en la mascota. Si no le hace efecto, es preferible no usarla", concluyó Rodrigo