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20 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
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La hermana mayor que se quedó con la herencia

Martes, 07 de julio de 2015 12:57

La hermana mayor que se quedó con la herencia

La Argentina, con otro nombre, claro, nació en 1810, pero el proyecto de Nación abortó rápidamente, luego de algunos vanos intentos que finalmente naufragaron con la primera presidencia de Bernardino Rivadavia.
Fracasado ese intento, las provincias se encerraron sobre sí mismas y lo hicieron tan bien, que también se encerraron respecto de la posibilidad de conectarse con el mundo y prosperar a través del comercio exterior, con la excepción, desde luego, de la provincia de Buenos Aires, que además de encerrar a las demás provincias, capitalizó el puerto y la aduana para su propio provecho.
Cuando las provincias se cansaron de tanto aislamiento y de las diferencias siderales y crecientes entre su propio subdesarrollo y la prosperidad porteña, finalmente reaccionaron y volvieron al proyecto de unidad nacional que consolidó la anhelada, o el reciclado anhelo, de la Argentina en unión y libertad.
Sin embargo, ya era casi demasiado tarde: el primer presidente de la flamante República Argentina se asombraba de que el presupuesto de la provincia de Buenos Aires superaba al de toda la -ahora ex- Confederación Argentina.
Como quiera que sea, el "derrame" de las ventajas de la aduana y el puerto por fin llegaba a toda la Argentina, lo que no impidió que la hermana mayor siguiera al frente, y por varios cuerpos, del resto del país, gracias al desarrollo conseguido en la etapa del "aislamiento", más el que siguió logrando con la inmigración y el florecimiento de la agricultura, el perfeccionamiento de la ganadería y las primeras industrias.
Sin duda, no todas fueron rosas, porque tanto progreso le hizo a nuestra hermana mayor perder la cabeza, literalmente hablando, ya que las provincias, que ahora también podían gobernar la Argentina -­y vaya si lo hicieron!...- separaron la Ciudad de Buenos Aires de la Provincia de Buenos Aires y, pese a las protestas de los -ahora- bonaerenses, las cosas quedaron así, ya que las provincias que se sumaron a Buenos Aires ante un intento similar de Rivadavia muchos años antes, ahora aceptaban la idea que antes rechazaron, de fraccionar al "monstruo".
Pese a esa pérdida, la hermana mayor no se amilanó y siguió adelante, aun ante el cambio de paradigma económico que reemplazó la importación de bienes finales a cambio de productos agropecuarios exportados, bienes que ahora se empezaron a fabricar, ¿dónde?... efectivamente, en Buenos Aires... Por cierto, en esta nueva etapa los flamantes -y no tanto- establecimientos manufactureros necesitaban mano de obra que fue provista por las provincias donde no había (¿no hay?) vestigios de industrias, y, para bien o para mal, entre la inmigración y la migración interna, hoy Buenos Aires, además de poseer la mayor extensión territorial, concentra más de 15 millones de habitantes, casi el 40% del total del país, siendo la provincia más poblada de la Argentina, al punto que algunos partidos -departamentos- tienen más población que otras tantas provincias, lo que le permite, por ejemplo, definir las elecciones presidenciales.
La hermana mayor tiene la mayor concentración de industrias de la Argentina, sin perjuicio de liderar también la producción agropecuaria, la pesca y la actividad turística al ubicarse la casi totalidad de las playas de mar en la Provincia de Buenos Aires, todo lo cual explica que la hermana mayor genere casi el 40% del PBI de la Argentina.
La gran paradoja, sin embargo, es que la provincia de Buenos Aires detente también las cifras más altas de criminalidad de la Argentina, evidenciadas en que los medios comunican no menos de un asesinato por día, además de numerosos robos y situaciones de violencia, a los que deben sumarse los delitos de distinto tipo que no se denuncian por diversas razones.
Buenos Aires provincia muestra también un altísimo número de habitantes con necesidades básicas insatisfechas, carencias de agua potable, desages pluviales, déficit de viviendas, mortalidad infantil, enfermedades respiratorias, adicciones, deserción escolar, etc. a lo que se suma el ostensible crecimiento de la delincuencia asociada a las bandas de narcotraficantes.
Por cierto, en el listado de indicadores negativos, la hermana mayor está por debajo de provincias tradicionalmente pobres de la República Argentina, como las del norte, pero está claramente peor que otras provincias con recursos humanos y materiales muy por debajo de la provincia de Buenos Aires.
En estas elecciones presidenciales, uno de los candidatos es precisamente el actual dos veces gobernador de Buenos Aires, quien se propone mantener "el modelo" vigente de gobierno de la Argentina, que es también el de su provincia, puesto que es el candidato oficial, modelo que repite, casi sin modificaciones, el de anteriores gobiernos provinciales de su mismo signo político. ¿Significa esto que, bajo su eventual gobierno, todas las provincias se industrializarán como Buenos Aires y lograrán su desarrollo agropecuario y turístico, o que se exportará a todas las provincias la inseguridad y se replicarán los gravísimos desequilibrios sociales que padece estructuralmente la provincia de Buenos Aires?...
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La hermana mayor que se quedó con la herencia

La Argentina, con otro nombre, claro, nació en 1810, pero el proyecto de Nación abortó rápidamente, luego de algunos vanos intentos que finalmente naufragaron con la primera presidencia de Bernardino Rivadavia.
Fracasado ese intento, las provincias se encerraron sobre sí mismas y lo hicieron tan bien, que también se encerraron respecto de la posibilidad de conectarse con el mundo y prosperar a través del comercio exterior, con la excepción, desde luego, de la provincia de Buenos Aires, que además de encerrar a las demás provincias, capitalizó el puerto y la aduana para su propio provecho.
Cuando las provincias se cansaron de tanto aislamiento y de las diferencias siderales y crecientes entre su propio subdesarrollo y la prosperidad porteña, finalmente reaccionaron y volvieron al proyecto de unidad nacional que consolidó la anhelada, o el reciclado anhelo, de la Argentina en unión y libertad.
Sin embargo, ya era casi demasiado tarde: el primer presidente de la flamante República Argentina se asombraba de que el presupuesto de la provincia de Buenos Aires superaba al de toda la -ahora ex- Confederación Argentina.
Como quiera que sea, el "derrame" de las ventajas de la aduana y el puerto por fin llegaba a toda la Argentina, lo que no impidió que la hermana mayor siguiera al frente, y por varios cuerpos, del resto del país, gracias al desarrollo conseguido en la etapa del "aislamiento", más el que siguió logrando con la inmigración y el florecimiento de la agricultura, el perfeccionamiento de la ganadería y las primeras industrias.
Sin duda, no todas fueron rosas, porque tanto progreso le hizo a nuestra hermana mayor perder la cabeza, literalmente hablando, ya que las provincias, que ahora también podían gobernar la Argentina -­y vaya si lo hicieron!...- separaron la Ciudad de Buenos Aires de la Provincia de Buenos Aires y, pese a las protestas de los -ahora- bonaerenses, las cosas quedaron así, ya que las provincias que se sumaron a Buenos Aires ante un intento similar de Rivadavia muchos años antes, ahora aceptaban la idea que antes rechazaron, de fraccionar al "monstruo".
Pese a esa pérdida, la hermana mayor no se amilanó y siguió adelante, aun ante el cambio de paradigma económico que reemplazó la importación de bienes finales a cambio de productos agropecuarios exportados, bienes que ahora se empezaron a fabricar, ¿dónde?... efectivamente, en Buenos Aires... Por cierto, en esta nueva etapa los flamantes -y no tanto- establecimientos manufactureros necesitaban mano de obra que fue provista por las provincias donde no había (¿no hay?) vestigios de industrias, y, para bien o para mal, entre la inmigración y la migración interna, hoy Buenos Aires, además de poseer la mayor extensión territorial, concentra más de 15 millones de habitantes, casi el 40% del total del país, siendo la provincia más poblada de la Argentina, al punto que algunos partidos -departamentos- tienen más población que otras tantas provincias, lo que le permite, por ejemplo, definir las elecciones presidenciales.
La hermana mayor tiene la mayor concentración de industrias de la Argentina, sin perjuicio de liderar también la producción agropecuaria, la pesca y la actividad turística al ubicarse la casi totalidad de las playas de mar en la Provincia de Buenos Aires, todo lo cual explica que la hermana mayor genere casi el 40% del PBI de la Argentina.
La gran paradoja, sin embargo, es que la provincia de Buenos Aires detente también las cifras más altas de criminalidad de la Argentina, evidenciadas en que los medios comunican no menos de un asesinato por día, además de numerosos robos y situaciones de violencia, a los que deben sumarse los delitos de distinto tipo que no se denuncian por diversas razones.
Buenos Aires provincia muestra también un altísimo número de habitantes con necesidades básicas insatisfechas, carencias de agua potable, desages pluviales, déficit de viviendas, mortalidad infantil, enfermedades respiratorias, adicciones, deserción escolar, etc. a lo que se suma el ostensible crecimiento de la delincuencia asociada a las bandas de narcotraficantes.
Por cierto, en el listado de indicadores negativos, la hermana mayor está por debajo de provincias tradicionalmente pobres de la República Argentina, como las del norte, pero está claramente peor que otras provincias con recursos humanos y materiales muy por debajo de la provincia de Buenos Aires.
En estas elecciones presidenciales, uno de los candidatos es precisamente el actual dos veces gobernador de Buenos Aires, quien se propone mantener "el modelo" vigente de gobierno de la Argentina, que es también el de su provincia, puesto que es el candidato oficial, modelo que repite, casi sin modificaciones, el de anteriores gobiernos provinciales de su mismo signo político. ¿Significa esto que, bajo su eventual gobierno, todas las provincias se industrializarán como Buenos Aires y lograrán su desarrollo agropecuario y turístico, o que se exportará a todas las provincias la inseguridad y se replicarán los gravísimos desequilibrios sociales que padece estructuralmente la provincia de Buenos Aires?...
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