Además del show musical que brindó Topa en el playón del Centro Cívico Municipal, hubo diferentes actividades en otras parte de la ciudad y en los barrios por el Día de los Reyes Magos.
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Además del show musical que brindó Topa en el playón del Centro Cívico Municipal, hubo diferentes actividades en otras parte de la ciudad y en los barrios por el Día de los Reyes Magos.
Muchísimos niños y niñas disfrutaron ayer del teleférico, que por el día de los Reyes Magos ofrecía pases gratis para los menores de 12 años. Esto generó mucho movimiento en el parque San Martín, para intentar subir al funicular: la cola ocupaba varios cientos de metros.
Si bien las puertas abrirían a las 9, desde las 7 ya había fila. Muchos esperaron alrededor de tres horas para ingresar.
La convocatoria fue multitudinaria y se vio favorecida por el hecho de que los chicos también podían viajar gratis en los colectivos de Saeta de toda el área metropolitana.
Desde muy temprano, cientos de niños acompañados por sus padres se acercaron al complejo para conocer una de las atracciones turísticas que tiene la ciudad. No solo había salteños de la capital, sino también del interior; además de turistas nacionales y extranjeros.
En cada góndola podían entrar cuatro niños y un adulto, que debía abonar un pase especial, de $500.
En diálogo con El Tribuno, que realizó una transmisión en vivo desde el lugar, los niños mostraban los regalos que recibieron mientras esperaban para subir a las góndolas.
Una familia de Uruguay, que estaba a punto de ingresar al teleférico, comentó que es la primera vez que visitan la provincia y que Salta capital les resulta muy parecida a Montevideo: "La ciudad es hermosa, muy arbolada y con los colores de las flores se ve muy parecida a donde vivimos".
Alrededor del mediodía, ya había cola en la cima del cerro San Bernardo para bajar a la ciudad.
Muchas familias eligieron quedarse arriba para pasar el día de Reyes. Por la tarde, un espectáculo para chicos, con juegos, regalos y sorpresas sería el gran atractivo.
En la cima del cerro, había muchos turistas de otras provincias y de otros países, como Paraguay. Un grupo de jóvenes y adultos que forman parte de un movimiento católico vinieron a Salta de vacaciones y de "retiro espiritual" para descansar y disfrutar de los paisajes.