Madonna comenzó su duodécima gira en octubre del año pasado, y recorrió numerosos destinos, entre los que se destacaron Londres, Barcelona, París, Berlín, Nueva York, San Francisco y Ciudad de México. The Celebration Tour llega a su fin con el show que se realizará en Río de Janeiro, en Copacabana, el próximo 4 de mayo.
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Madonna comenzó su duodécima gira en octubre del año pasado, y recorrió numerosos destinos, entre los que se destacaron Londres, Barcelona, París, Berlín, Nueva York, San Francisco y Ciudad de México. The Celebration Tour llega a su fin con el show que se realizará en Río de Janeiro, en Copacabana, el próximo 4 de mayo.
Como suele suceder en cada uno de sus shows, la popular artista se presenta frente a estadios completo con la presencia de miles de fans entusiasmados. Su presentación en el Hotel Belmond Copacabana Palace, en Río, no es la excepción, y la ansiedad entre los fanáticos por ver a la icónica reina del pop en vivo se hace notar en redes sociales.
El sábado próximo se espera un concierto masivo, en el cual se estima una asistencia superior al millón de espectadores. El escenario donde Madonna realizará su actuación tendrá una extensión total de ochocientos metros cuadrados y estará elevado a aproximadamente dos metros y medio con el propósito de ser visible para todos los presentes sin importar su posición en el predio.
Madonna llegó a Río de Janeiro
Durante las últimas horas, se viralizaron los primeros vídeos que registran la llegada de Madonna a la importante ciudad latinoamericana. Sus fans siguen con especial atención cada uno de sus movimientos en el país desde el aterrizaje del avión en el que viajaba la artista en el Aeropuerto internacional de Galeão, en Río de Janeiro. Este acontecimiento fue captado a través de la señal Aviation TV, que registra el movimiento de dicho aeropuerto.
Luego, se compartieron imágenes de su llegada al hotel donde se hospeda los días previos a su presentación. Algunos usuarios pudieron capturar a la cantante en el lobby del Copacabana Palace. En las afueras del complejo, se reunieron cientos de personas para darle una cálida bienvenida a la artista de reconocimiento internacional.
Madonna viajó acompañada de su equipo de trabajo compuesto por doscientas personas, como es habitual, y todas ellas se hospedan en alrededor de noventa habitaciones del mencionado hotel. Este espectáculo es el cuarto de la cantante en suelo brasileño y, sin dudas, provocará un cambio significativo en la actividad habitual de la concurrida playa, que se verá con más movimiento que nunca.
En México
Madonna concluyó una semana de conciertos espectaculares en la Ciudad de México con una velada en la que tuvo como invitada especial a Salma Hayek y en la que abundaron las emociones, desde el amor y la gratitud, hasta el dolor y la memoria de sus seres queridos perecidos por VIH-sida.
En la semana en México Madonna también había compartido que cuando era una chica que vivía en el Medio Oeste de Estados Unidos descubrió a Frida Kahlo y fue al único museo de arte que había en ese entonces en Detroit donde encontró un retrato de la pintora mexicana con el pelo trenzado y una mirada intensa.
Kahlo le dio esperanzas de sentirse integrada, de ser auténtica, al grado de considerarla su “alma gemela, musa interna, madre, animal espiritual, todo”.
Y para su último concierto se le concedió que Kahlo estuviera presente gracias al vestuario que eligió Hayek para participar en la competencia de baile de su éxito “Vogue” en el que Madonna ha tenido invitados como Ricky Martin, Wendy Guevara y Alberto Guerra.