Despertar cada día y advertir que la muerte de Blanquita no fue una pesadilla, seguramente es lo más duro que debe atravesar por estos días la familia Vicuña Ardohain.
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Despertar cada día y advertir que la muerte de Blanquita no fue una pesadilla, seguramente es lo más duro que debe atravesar por estos días la familia Vicuña Ardohain.
A un mes de la muerte de Blanca, la hija de Pampita y Benjamín Vicuña, todo es lucha, fortaleza y apego a la familia, instalada en la casona que construyeron en las afueras de Santiago de Chile, y que debieron reformar por los daños que le causó el terremoto de 2010. La modelo argentina pasa sus días totalmente alejada del trabajo, sumida en una profunda y natural tristeza.
Un informe publicado en la última edición de la revista Paparazzi da cuenta de que desde aquel fatídico 8 de septiembre, Carolina Ardohain se encuentra recluida en la casa, contenida por los abrazos de su marido y animada por los logros de Bautista, su segundo hijo. Ya en edad escolar, Bauti le lleva alivio y un mínimo desahogo a esta pareja profundamente herida por la pérdida.
Beltrán, el bebé de apenas tres meses, requiere de toda la atención y los cuidados. Pampita pasa sus horas pendiente de la lactancia, que tanto necesita el bebé en esta primera etapa de su vida.
Evitando exponerse en los medios, sin ánimos para hablar, no volvió a escribir en Twitter y suspendió todos sus compromisos laborales próximos. Lee los mensajes de apoyo en su cuenta de la red social y de vez en cuando retuitea aquellos que le tocaron el corazón.
Algo es seguro, la inesperada muerte de Blanca, de sólo 6 años, marca un antes y un después en la historia de esta familia.
En busca de ayuda profesional, por recomendación del entorno íntimo y de los médicos que acompañaron a la pareja hasta el último minuto, Carolina y Benjamín aceptaron comenzar terapia con un especialista en duelo de niños. Vicuña retomó las grabaciones pendientes de la serie de HBO Prófugos. En su cuenta de Twitter expresó: “En un largo mes se develó frente a mi el poder de la humanidad, el amor y la solidaridad”.