Guillermo Moreno, defendió el control del precio de los alimentos y de la energía, sectores que consideró “vectores de competitividad” de la economía nacional, y anticipó que seguirán los controles a la importación.
“Hay precios que tenemos que regular. Si no lo hacemos sube la desocupación y se hace ingobernable el sistema”, afirmó Moreno al cerrar un seminario sobre capitalismo nacional e integración regional.
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Guillermo Moreno, defendió el control del precio de los alimentos y de la energía, sectores que consideró “vectores de competitividad” de la economía nacional, y anticipó que seguirán los controles a la importación.
“Hay precios que tenemos que regular. Si no lo hacemos sube la desocupación y se hace ingobernable el sistema”, afirmó Moreno al cerrar un seminario sobre capitalismo nacional e integración regional.
En una exposición fundamentalmente teórica, Moreno dijo que el gobierno “asume al capitalismo como modo de organización de la producción” y que por ello se considera que “estamos dentro del Club” del Grupo de los 20 y las naciones capitalistas.
Moreno justificó la introducción de controles de precios al afirmar que “la inflación se aceleraba” en 2006 cuando comenzaron los controles.
El funcionario también justificó la necesidad de “afectar los intereses” del sector agropecuario, en tanto, criticó la modalidad de alquiler de campos para la producción porque a su criterio “eleva el precio de los alimentos”.
En el campo del comercio internacional, consideró que “hemos logrado el objetivo de superávit de balanza” en el primer semestre del año.
“Ahora tenemos las notas de pedido en cero. En enero del año que viene empezamos de nuevo”, anticipó el funcionario, en lo que es un reconocimiento de la continuidad de las restricciones a las importaciones. “Me imagino en 2020 una negociación paritaria entre Techint y la UOM donde se negocia el salario, y también una distribución de utilidades entre los trabajadores que tienen acciones de la empresa”, señaló.
En cuanto a la inflación, algo que afecta a todos los argentinos, señaló que “es del 10 por ciento” anual, y no como “dicen algunos que llegará al 25”.