No será un encuentro más. A días del fuerte documento firmado por la cúpula de la Iglesia católica, criticando a la clase política y sobre todo al Gobierno nacional, la presidenta Cristina Fernández se reunirá mañana con la cúpula episcopal, encabezada por José María Arancedo.
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No será un encuentro más. A días del fuerte documento firmado por la cúpula de la Iglesia católica, criticando a la clase política y sobre todo al Gobierno nacional, la presidenta Cristina Fernández se reunirá mañana con la cúpula episcopal, encabezada por José María Arancedo.
La Iglesia llamó días atrás a bajar los niveles de confrontación en la sociedad, alertó sobre el riesgo de una división en “bandos irreconciliables” y pidió la independencia del Poder Judicial en un duro documento del Episcopado argentino.
“A casi treinta años de la democracia, los argentinos corremos el peligro de dividirnos nuevamente en bandos irreconciliables. Se extiende el temor a que se acentúen estas divisiones y se ejerzan presiones que inhiban la libre expresión y la participación de todos en la vida cívica”, alertó.
La declaración “Creemos en Jesucristo, Señor de la historia”, fue aprobado en el plenario episcopal de principios de noviembre.
Se estima que el encuentro sea en la casa de Gobierno, alrededor de las 19, y a priori con agenda abierta.
En ese marco, la mesa ejecutiva de la Conferencia Episcopal llevará un saludo por la Navidad y entregará en mano a la primera mandataria el texto del pronunciamiento de noviembre que el Gobierno intentó ignorar o minimizar, y que obligó a la Iglesia a hacer precisiones sobre a quién o quiénes estaba dirigido el documento.
Los obispos también buscarán transmitirle a la jefa de Estado la “preocupación” por el aumento de la droga por el crecimiento del narcotráfico, entre otras cosas.
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