Domingo 2 de diciembre. Raya el sol y en el escenario suenan desordenadas voces e instrumentos. Es la prueba de sonido. La gente se va acercando y se ubica ahí donde la sombra ofrece una cuota de alivio en medio del calor sofocante. Hernán llega con su bandeja de cocacolero vacía. La apoya en el piso, saca su celular y dispara fotos, aquí y allá.
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Domingo 2 de diciembre. Raya el sol y en el escenario suenan desordenadas voces e instrumentos. Es la prueba de sonido. La gente se va acercando y se ubica ahí donde la sombra ofrece una cuota de alivio en medio del calor sofocante. Hernán llega con su bandeja de cocacolero vacía. La apoya en el piso, saca su celular y dispara fotos, aquí y allá.
Son apenas las 16.30 y Mi Karma González le sacude el tedio a la tarde con los primeros golpes de su batería rítmica. Andrés González (guitarra, charango y voz), Miqueas López (teclado), Carlos Aguilera (bajista) y Marcos Goldáraz (batería) protagonizan la primera secuencia de la larga segunda jornada del Personal Fest 2012, en el club Geba (Bs. As.).
Hernán es porteño y corea, junto al resto del público (poco numeroso), las canciones que la banda salteña va desgranando con muy buena energía. En alguna pausa grita: “Mi almita”. Y desde arriba lo complacen. Es el tema que Mi Karma elige para cerrar su breve pero significativo paso por el festival de bandas más importante de Buenos Aires.
“Conocí el tema a través de internet y se lo dediqué a una novia que tenía -le cuenta Hernán a El Tribuno-. Pero conozco unos cuantos más, porque a partir de "Mi almita' comencé a seguirlos”, explica.
Mi Karma González fue este año una de las siete bandas del interior invitadas a engrosar la grilla del Personal Fest. Cantaron cuatro temas y el horario que le asignaron para subir al escenario fue un tropezón. Pero los muchachos saben que un acontecimiento así, definitivamente, no es caída. Al contrario, suma. “El Concurso de Bandas de Los 40 Principales, donde conseguimos el 2§ puesto entre las 600 bandas del país, fue un buen empujón para darnos a conocer acá en Buenos Aires. Hoy está buenísimo poder participar en este tipo de festivales y representar al reggae y al rock de Salta”, sostuvo Andrés González a poco de enfundar su guitarra.
Mi Karma ya no es lo que era. Al primer disco, marcado por un reggae casi under, le siguió una segunda apuesta que incluyó algunas canciones de amor. Hoy, la propuesta está aún más diversificada. “Todos venimos de distintos palos de la música y eso nos lleva a ser versátiles y a no encasillarnos. Nuestro tercer disco es una mezcla de varios estilos: tenemos un poco de rock, un poco de reggae y hay temas de hip hop... La idea es ofrecer nuevas propuestas, para contribuir a la amplitud musical de la gente que nos sigue”, reseñó el líder de la banda.
Con respecto al horario asignado para tocar en el Personal Fest, Andrés González confesó: “No pensamos que iba a ser tan así, pero se cayeron tres bandas y bueno, eso llevó a que las presentaciones en este escenario se adelantaran casi dos horas. Teníamos previsto tocar cerca de las 18 y nos pasaron a las 16.30. Pero bueno, lo importante para nosotros es estar, participar y entrar de a poco en este circuito. En Salta también vivimos este proceso. Al principio nos ponían para abrir los espectáculos y ahora cerramos prácticamente todos los festivales. Como dice mi vieja: no se trata de poner una semilla y al otro día sentarse a la sombra de un árbol. Hay que regarla y después hay que cuidar el árbol e ir enderezándolo... En ese camino está Mi Karma González”, comparó.
El tema que catapultó a la banda a nivel nacional, “Mi almita”, y que suena como ringtone en miles de celulares salteños, sigue haciendo camino al andar. La gente puede votar en Twitter (@Los40ar) o en facebook para que la canción se afiance camino a los 40 Principales.
Música y calor en la ciudad
El implacable calor del domingo en Buenos Aires fue cómplice de una tarde con reminiscencias jamaiquinas. En la segunda jornada del Personal Fest 2012 desfilaron por el escenario Dread Mar I y SOJA, exponente local uno, y extranjero el otro, de la música rastafari que hace rato traspasó todas las fronteras.
El rock se abrió paso luego, más potente que nunca, con la presencia de Molotov, los mexicanos que encendieron pogos frente al escenario Motorola.
En el cierre, los seguidores de Illya Kuryaki and the Valderramas coparon la explanada principal para disfrutar de los pegadizos temas con base de rap, funk y hip hop que propone el dúo de Dante Spinetta y Emmanuel Horvilleur.
El festival se transmitió en vivo para Latinoamérica en una home page de YouTube.