Si bien los equipos que tomarán parte de la etapa final del Torneo del Interior jugarán dos partidos -play-off-, a matar o morir, en la búsqueda de la clasificación a la segunda fase (la etapa final cuenta con 6 fases), la participación en la etapa clasificatoria les demandó una importante erogación de dinero.
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Si bien los equipos que tomarán parte de la etapa final del Torneo del Interior jugarán dos partidos -play-off-, a matar o morir, en la búsqueda de la clasificación a la segunda fase (la etapa final cuenta con 6 fases), la participación en la etapa clasificatoria les demandó una importante erogación de dinero.
Por tal motivo, los 19 equipos salteños que continúan en carrera esperan ansiosos la entrega del subsidio prometido por el Gobierno provincial para hacer frente a los gastos que demandarán los próximos compromisos.
Mientras tanto, los clubes se encuentran organizando rifas, venta de comidas regionales y demás para generar los recursos financieros que les otorgue alguna ayuda en este orden y, de esa forma contar, con el respaldo financiero por los gastos que representará la participación en la rueda con lo que proseguirá el desarrollo del torneo, programada para el próximo domingo. Inclusive, los directivos profundizan las gestiones en procura de sumar un mayor caudal de socios y la incorporación de algún sponsor.
Pero no solo las instituciones deben costear la apertura del estadio o el gasto interno que propiamente se ocasiona cuando juegan como local. La problemática surge cuando se tienen que dirigir hacia otros puntos geográficos de la provincia. Así, por ejemplo, los dirigentes de River Plate de Embarcación y Deportivo Tabacal dieron a conocer que recorrieron unos 1.500 kilómetros en la primera fase. Además, ambos clubes, que pertenecen a la Liga Regional del Bermejo, dejaron constancia de que el traslado a Taco Pozo tuvo un costo de $3.500 y $ 2.500 a Quebrachal.
El trabajo a pulmón da pie a una apuesta difícil, porque en una etapa previa, como la que pasó en el torneo, no hubo también una respuesta esperada por parte de la gente.
Es lo que ocurrió en el sur salteño, porque en los partidos que Atlético Progreso y General Gemes jugaron en la cancha de la Liga las expectativas no se vieron reflejadas en las tribunas. A tal punto que ante esta situación el club gaucho le tuvo que dar de baja el DT Carlos Gómez al no poder cumplir con el vínculo económico que se había firmado entre las partes.
De todas maneras, otro clubes pudieron hacer frente a las demandas financieras, como en el caso de Juventud Unida, de Rosario de Lerma, porque el último partido frente a San Antonio, la recaudación alcanzó para cubrir varios frentes, por la presencia de ambas parcialidades en la cancha de Boroquímica, de Quijano.
De todos modos, en general el respaldo económico desde el Gobierno será un pilar muy importante. “Esperamos que el subsidio llegue pronto”, señalaron de manera unánime.