Tras la muerte por supuesta mala praxis de la beba de ocho meses Milagros Luján Correa, en el hospital de Las Lajitas, la Fiscal 2 del Distrito Judicial del Sur, Ana Inés Salinas, pidió al juez que entiende en la causa el procesamiento y la elevación a juicio por homicidio culposo de dos médicas.
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Tras la muerte por supuesta mala praxis de la beba de ocho meses Milagros Luján Correa, en el hospital de Las Lajitas, la Fiscal 2 del Distrito Judicial del Sur, Ana Inés Salinas, pidió al juez que entiende en la causa el procesamiento y la elevación a juicio por homicidio culposo de dos médicas.
Se informó que se trata de las profesionales Silvia Isa y Mónica Cabrera, quienes atendieron a la nena en el hospital Esperanza Burgos de Aguirre y quienes, según la fiscal, “no actuaron observando las mínimas reglas de su profesión”.
Milagros murió el 2 de marzo pasado en el Hospital Público Materno Infantil luego de ser trasladada de urgencia a la capital provincial por su delicado estado de salud. La causa se encuentra en el Juzgado Correccional 1 de Metán, a cargo del juez Sebastián Fuccho, bajo la carátula de homicidio culposo.
Para el abogado Luis Pablo Ibañez, querellante de la familia Correa, el pedido de la fiscal representa un paso importante. Indicó que como parte de la investigación se secuestraron historias clínicas, declaraciones testimoniales y consultas a médicos forenses del Cuerpo de Investigaciones Fiscales.
En un escrito, la Fiscalía sostiene que las médicas no actuaron con “la celeridad y precaución que exigían las circunstancias del caso, en un contexto en el que la mínima negligencia conduce a las más graves consecuencias”. Y sigue: “El curso casual de los acontecimientos denota el error en la terapéutica y del diagnóstico y la excesiva demora que agravaron el estado de Milagros Correa que desembocó en la muerte de la niña, no obstante las posibilidades objetivas de actuar para evitar el fatal desenlace”.
Los hechos
La niña tenía una neumonía sintomática. Sus padres la llevaron al hospital de Las Lajitas el 28 de febrero pasado. Luego de pedir dos placas radiográficas y análisis clínicos de la niña, las médicas dijeron que la bebé solo tenía “el pechito tomado”.
El 29 de febrero los padres volvieron al hospital para pedir que internaran a la bebé, pero se lo negaron. El 1 de marzo, cerca de las 10, ante la insistencia de los padres y abuelos la nena fue internada, pero ningún médico la controló entre las 12 y 18.
Luego fue derivada a Joaquín V. González en una ambulancia “en pésimas condiciones, sin médico ni oxígeno”. A esa localidad la bebé llegó cianótica, por lo que fue trasladada de urgencia a Salta en una ambulancia equipada y con personal médico de Joaquín V. González.
“Lamentablemente ya era tarde. Murió a las 3.10 de la madrugada, a la hora de llegar al Materno Infantil, producto de una septicemia por la neumonía”, informaron.