Tras el procedimiento judicial de ayer por la mañana a la Municipalidad, el intendente Marcelo Lara Gros contó a El Tribuno que “el trámite se debe a una denuncia del concejal José Rodríguez, quien antes de asumir el cargo fue proveedor de áridos de la Municipalidad. Según me contó hace unos dos meses, le habrían falsificado dos facturas en Hacienda”.
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Tras el procedimiento judicial de ayer por la mañana a la Municipalidad, el intendente Marcelo Lara Gros contó a El Tribuno que “el trámite se debe a una denuncia del concejal José Rodríguez, quien antes de asumir el cargo fue proveedor de áridos de la Municipalidad. Según me contó hace unos dos meses, le habrían falsificado dos facturas en Hacienda”.
Aclaró que “en aquella oportunidad Rodríguez me mostró las copias de dichas facturas. Cuando tomé conocimiento de la situación ordené inmediatamente un sumario y puse en conocimiento de la situación a la Justicia, para que no quede ningún tipo de dudas ni sospechas. Ayer, cuando se apersonaron la jueza Norma Vera y el fiscal, les entregamos todo lo que requirieron, porque nadie más que nosotros quieren que se aclare esta situación”.
Las posibles motivaciones
El jefe comunal dejó entrever que esto tendría origen en una cuestión política.
Al parecer, Rodríguez, quien ocupó una banca por el sector político del propio Lara Gros, no obtuvo el apoyo para que su bancada obtuviera la presidencia del Concejo Deliberante.
A partir de allí habrían comenzaron los desacuerdos.
Para finalizar, el jefe comunal resaltó que el edil es propietario de una empresa que en 2011, durante una emergencia vial dictada por la comuna local para mejorar el estado de las calles de la ciudad, le proveyó de ripio.
Según dijo, fue en esas transacciones en las que se le habrían entregado dos supuestas facturas falsificadas en las que se daban cuenta de operaciones que no se concretaron.