Un barrabrava de Lanús fue asesinado ayer como consecuencia de una feroz pelea que se produjo en una de las puertas de acceso a la tribuna local entre dos fracciones, minutos antes del comienzo del partido que el club granate le ganó a All Boys por 1 a 0.
El hincha murió después de haber recibido un balazo en el pecho, que lo dejó gravemente herido. Luego fue ingresado al hospital Eva Perón de la ciudad, donde finalmente perdió la vida. La violenta pelea desatada en las inmediaciones de la cancha, en la esquina de Arias y Guidi, cuando apenas faltaban 15 minutos para el arranque del cotejo, dejó un saldo provisorio de 9 detenidos (3 de ellos acusados por el homicidio) y 5 heridos (2 de ellos “muy graves”, según contaron fuentes hospitalarias).
Además, fuentes policiales confiaron que se secuestraron “un arma 9 milímetros, otra Bersa calibre 22 y una tercera calibre 38”. Agentes de la Policía Científica y un fiscal ya trabajan en la investigación.
Según voceros de la entidad sureña, el principal episodio de violencia se produjo minutos antes del inicio del partido. Según lo relatado, una fracción de la barra, identificados por vivir en Monte Chingolo, y otra, componentes de la Villa Sapito, se trenzaron duramente, a los balazos, en la puerta principal del acceso a la tribuna local.
Un testigo del cruce, cuando todavía no se conocía el desenlace fatal, contó: “Tres hinchas quedaron heridos; uno de ellos, de gravedad”.
Al parecer, el hincha fallecido pertenecería a la fracción de Monte Chingolo y, curiosamente, sería familiar de un tal “Fanfi”, “uno de los capos de la barra del Sapito”.
La misma fuente relató: “Me parece que se trató de una vieja disputa por el poder en la barra. No resulta casual que se haya ‘liberado’ la zona, porque escuché cuando un agente policial le sugería a uno de los parrilleros que se ubicase 60 metros más lejos para vender los chorizos”.
Por su lado, una fuente policial perteneciente a la Distrital Lanús había manifestado que este enfrentamiento se había producido, no con tanta virulencia, en el “partido pasado con Banfield, donde también hubo peleas por el manejo del dinero”.
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Un barrabrava de Lanús fue asesinado ayer como consecuencia de una feroz pelea que se produjo en una de las puertas de acceso a la tribuna local entre dos fracciones, minutos antes del comienzo del partido que el club granate le ganó a All Boys por 1 a 0.
El hincha murió después de haber recibido un balazo en el pecho, que lo dejó gravemente herido. Luego fue ingresado al hospital Eva Perón de la ciudad, donde finalmente perdió la vida. La violenta pelea desatada en las inmediaciones de la cancha, en la esquina de Arias y Guidi, cuando apenas faltaban 15 minutos para el arranque del cotejo, dejó un saldo provisorio de 9 detenidos (3 de ellos acusados por el homicidio) y 5 heridos (2 de ellos “muy graves”, según contaron fuentes hospitalarias).
Además, fuentes policiales confiaron que se secuestraron “un arma 9 milímetros, otra Bersa calibre 22 y una tercera calibre 38”. Agentes de la Policía Científica y un fiscal ya trabajan en la investigación.
Según voceros de la entidad sureña, el principal episodio de violencia se produjo minutos antes del inicio del partido. Según lo relatado, una fracción de la barra, identificados por vivir en Monte Chingolo, y otra, componentes de la Villa Sapito, se trenzaron duramente, a los balazos, en la puerta principal del acceso a la tribuna local.
Un testigo del cruce, cuando todavía no se conocía el desenlace fatal, contó: “Tres hinchas quedaron heridos; uno de ellos, de gravedad”.
Al parecer, el hincha fallecido pertenecería a la fracción de Monte Chingolo y, curiosamente, sería familiar de un tal “Fanfi”, “uno de los capos de la barra del Sapito”.
La misma fuente relató: “Me parece que se trató de una vieja disputa por el poder en la barra. No resulta casual que se haya ‘liberado’ la zona, porque escuché cuando un agente policial le sugería a uno de los parrilleros que se ubicase 60 metros más lejos para vender los chorizos”.
Por su lado, una fuente policial perteneciente a la Distrital Lanús había manifestado que este enfrentamiento se había producido, no con tanta virulencia, en el “partido pasado con Banfield, donde también hubo peleas por el manejo del dinero”.
Los datos
La ONG Salvemos al Fútbol dice que las muertes en el fútbol son 264. La última fue el hincha de Lanús fallecido ayer.
El primer fallecido fue el uruguayo Pedro Demby, el 2 de noviembre de 1924, en el Sudamericano jugado en Argentina.
El dinero, los viajes, los estacionamientos, la política y la droga causaron gran parte de esas muertes.
En este marco estaría el caso de Martín Stambulli Laborda, jefe de la barra brava de River, muerto en Carlos Keen, en Luján.