El vocero de los gremialistas, Guido Dickason, adelantó que el próximo 3 de agosto, cuando finalice la medida dictada por el gobernador Buzzi, volverán con sus protestas hasta las últimas consecuencias
Durante quince días, la rama disidente de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) conocida como los Dragones mantuvo en vilo a la provincia de Chubut por las protestas y la ocupación del yacimiento petrolero de Cerro Dragón.
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El vocero de los gremialistas, Guido Dickason, adelantó que el próximo 3 de agosto, cuando finalice la medida dictada por el gobernador Buzzi, volverán con sus protestas hasta las últimas consecuencias
Durante quince días, la rama disidente de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) conocida como los Dragones mantuvo en vilo a la provincia de Chubut por las protestas y la ocupación del yacimiento petrolero de Cerro Dragón.
Los gremialistas reclamaban a la compañía Pan American Energy (PAE) aumentos salariales y el pase a planta permanente de los empleados tercerizados. Tras la toma, los destrozos y los diferentes piquetes, el gobernador Buzzi dispuso la conciliación obligatoria hasta el 3 de agosto.
Sin embargo, los Dragones advirtieron que el conflicto no está terminado, sino que “irán hasta las últimas consecuencias” con sus protestas.
El vocero de los sindicalistas, Guido Dickason, señaló que son optimistas respecto a las negociaciones, pero advirtió: “Si para el día 3 de agosto no tenemos soluciones, es mejor que nos tengan encerrados porque va a haber bardo”.
En diálogo con el programa local Radiocracia, el portavoz de los manifestantes consideró además que la reunión que Buzzi mantuvo con el titular de la Uocra, Gerardo Martínez, “agravó la situación” debido a que, según señalaron, debería haber recibido al líder de las protestas, Raúl Murga.