Dos chicos de corta edad y su madre resultaron intoxicados con monóxido de carbono, en grado leve, a causa de un brasero que quedó encendido en la vivienda. Afortunadamente fueron rescatados y auxiliados a tiempo, por lo que fueron dados de alta, sin ninguna secuela.
“Antes de descansar hay que apagar toda fuente de calor. El brasero, incluso, debe quedar fuera de la vivienda”, remarcó la jefa de Toxicología Pediátrica del Materno Infantil, Adriana Flores Blasco.
El accidente ocurrió la madrugada del sábado último e involucró a dos hermanitos de 3 y 4 años de edad y a su madre. Según el relato de la familia, abuela dio la alerta cuando “le pareció” sentir que uno de ellos estaba descompuesto. Cuando se levantó a ver, advirtió el brasero dentro de la vivienda e inmediatamente hizo el pedido de ayuda.
“La madre fue la más afectada; los tres fueron asistidos en el Materno Infantil, donde evolucionaron bien”, informó Flores Blasco. Estos fueron los primeros casos de intoxicaciones por monóxido de carbono en julio.
Para lo que va del año, el acumulado registrado en el establecimiento dice que ya fueron atendidos 10 chicos y 5 adultos. “Si bien los adultos no son internados en el hospital, si sólo requieren oxigeno se le administra al lado de su niño”, se indicó.
A la fecha y durante el año, del total de estos accidentes, dos fueron provocados por brasero, dos por calefones y uno por estufa. Resaltó la doctora que en prevención el equipo trabaja coordinadamente con Gasnor. E hizo hincapié en la importancia de mantener siempre una ventana algo abierta mientras esté funcionando cualquier elemento a llama. “El fuego se alimenta de oxígeno, generando monóxido de carbono” , insistió.
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Dos chicos de corta edad y su madre resultaron intoxicados con monóxido de carbono, en grado leve, a causa de un brasero que quedó encendido en la vivienda. Afortunadamente fueron rescatados y auxiliados a tiempo, por lo que fueron dados de alta, sin ninguna secuela.
“Antes de descansar hay que apagar toda fuente de calor. El brasero, incluso, debe quedar fuera de la vivienda”, remarcó la jefa de Toxicología Pediátrica del Materno Infantil, Adriana Flores Blasco.
El accidente ocurrió la madrugada del sábado último e involucró a dos hermanitos de 3 y 4 años de edad y a su madre. Según el relato de la familia, abuela dio la alerta cuando “le pareció” sentir que uno de ellos estaba descompuesto. Cuando se levantó a ver, advirtió el brasero dentro de la vivienda e inmediatamente hizo el pedido de ayuda.
“La madre fue la más afectada; los tres fueron asistidos en el Materno Infantil, donde evolucionaron bien”, informó Flores Blasco. Estos fueron los primeros casos de intoxicaciones por monóxido de carbono en julio.
Para lo que va del año, el acumulado registrado en el establecimiento dice que ya fueron atendidos 10 chicos y 5 adultos. “Si bien los adultos no son internados en el hospital, si sólo requieren oxigeno se le administra al lado de su niño”, se indicó.
A la fecha y durante el año, del total de estos accidentes, dos fueron provocados por brasero, dos por calefones y uno por estufa. Resaltó la doctora que en prevención el equipo trabaja coordinadamente con Gasnor. E hizo hincapié en la importancia de mantener siempre una ventana algo abierta mientras esté funcionando cualquier elemento a llama. “El fuego se alimenta de oxígeno, generando monóxido de carbono” , insistió.