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19 de Mayo,  Salta, Centro, Argentina
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La ley policial cordobesa, envuelta en una polémica

Viernes, 17 de agosto de 2012 01:22

A contramano. Pese a que hace poco tiempo entró en vigencia la Ley de Identidad de Género, que busca garantizar los derechos de ciudadanía de las personas trans, la provincia de Córdoba acaba de implementar una normativa polémica y discriminatoria para ingresar a la fuerza policial. Ayer, un decreto firmado por el gobernador José Manuel de la Sota señala que la Policía provincial rechazará a aquellos aspirantes que sufran distintas afecciones entre las que incluyó “amputación de pene”, renguera y tartamudez.

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A contramano. Pese a que hace poco tiempo entró en vigencia la Ley de Identidad de Género, que busca garantizar los derechos de ciudadanía de las personas trans, la provincia de Córdoba acaba de implementar una normativa polémica y discriminatoria para ingresar a la fuerza policial. Ayer, un decreto firmado por el gobernador José Manuel de la Sota señala que la Policía provincial rechazará a aquellos aspirantes que sufran distintas afecciones entre las que incluyó “amputación de pene”, renguera y tartamudez.

La nueva reglamentación fue informada por fuentes de la Jefatura policial, quienes explicaron que se trata de prevenir que “en el futuro, cuando ya sean policías en la calle, tengan algún padecimiento serio por su trabajo”.

Según establece la ley 9.728, para vestir uniforme policial no solo no se podrá tener ninguna afección en la salud, sino que tampoco ninguna alteración o enfermedad en los órganos genitales.

Tampoco se permitirá ingresar a personas a las que les falte algún dedo en la mano, o que sea renga, gorda, bulímica, tenga labio leporino, sea tartamuda o posea tics. Tampoco se podrá tener tatuajes a la vista y será condición excluyente saber nadar.

Por otro lado, a través del mismo decreto se consignan restricciones a la posibilidad de que los periodistas obtengan información sobre asuntos vinculados a la Policía cordobesa, porque los agentes tanto en actividad como retirados deben contar primero con autorización de la Jefatura para entregar datos.

Las reacciones

Al respecto Esteban Paulón, presidente de la Federación Argentina de lesbianas, gays, bisexuales y trans expresó: “Es muy grave el decreto reglamentario de la ley policial cordobesa. Es altamente discriminatorio no sólo hacia el colectivo LGBT, sino que constituye una ofensa grave a la sociedad toda. Mientras a nivel nacional y en algunas provincias avanzamos en inclusión del colectivo trans en las fuerzas de seguridad, Córdoba da un paso atrás”, señaló.

Por su parte, Marcela Romero, secretaria general de esta federación y presidenta de la Asociación de Travestis, Transexuales y Transgéneros de la Argentina (Attta) agregó: “Parece mentira que a pesar de haber alcanzado la igualdad jurídica con la Ley de Identidad de Género, el gobierno de Córdoba siga discriminando y estigmatizando al colectivo trans de la provincia, en lo que constituye una provocación inadmisible para los tiempos que corren”.

“Esto no es nuevo, ni es una sorpresa. La declaración de De la Sota hace unas semanas menospreciando la Ley de Identidad de Género y la permanente persecución y hostigamiento de la Policía cordobesa hacia el colectivo trans van en la misma dirección de discriminación abierta por parte de esa fuerza, discriminación que en muchas ocasiones deriva en violencia”, señaló.

La norma

La ley 9.728 dice que para vestir el uniforme policial no se podrá tener ninguna afección a la salud ni alteración en los genitales.

Tampoco se permitirá ingresar a la Policía a quienes les falte algún dedo en la mano, o que sea rengo, gordo, bulímico, etc.

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