Medio centenar de activistas de movimientos sociales intentaron ayer sacar alimentos de un supermercado Carrefour de Mérida, en la sureña Extremadura, en un nuevo saqueo con el que buscaban denunciar los recortes y la situación extrema de crisis.
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Medio centenar de activistas de movimientos sociales intentaron ayer sacar alimentos de un supermercado Carrefour de Mérida, en la sureña Extremadura, en un nuevo saqueo con el que buscaban denunciar los recortes y la situación extrema de crisis.
Los manifestantes, convocados por el colectivo “La Trastienda” y la “Plataforma por la Renta Básica en Extremadura”, emularon la acción realizada a principios de agosto en Sevilla y Cádiz por el Sindicato de Andaluz de Trabajadores (SAT), bajo el liderazgo del diputado de Izquierda Unida (IU) Juan Manuel Gordillo, quien fue denunciado ante la justicia.
En aquella ocasión lograron sacar varios changos con alimentos de dos supermercados que repartieron entre personas necesitadas, pero esta vez la policía incautó los pocos productos que los manifestantes se estaban llevando sin pagar.
De esta nueva acción participó el también diputado regional de IU Víctor Casco y el ex coordinador de la coalición Manuel Cañada, un destacado activista político y social de Extremadura.
A través de Twitter, Casco relató lo ocurrido y publicó una foto ilustrativa: “Ahora mismo en el Carrefour, en un acto de protesta y rebeldía: expropiación de alimentos”.
En total participaron unas 60 personas y se lograron sacar sin pagar cuatro changos con alimentos como aceite, azúcar, arroz, leche y legumbres, aunque la policía, que estuvo siempre presente, finalmente incautó los productos sustraídos y los devolvió al supermercado.
Al igual que la acción protagonizada por Gordillo, que tuvo una gran repercusión mediática nacional e internacional, los manifestantes de Extremadura tenían como objetivo denunciar las “injusticias” que están viviendo muchas familias en España que ya no tienen dinero para comer.
“Frente a la acaparación de riqueza por unos pocos, reparto de la riqueza”, dijo Casco al justificar la protesta, que describió como un acto de “insumisión frente al poder”.
Por su parte, el coordinador regional de IU en Extremadura, Pedro Escobar, expresó su solidaridad con los manifestantes y destacó el valor simbólico del acto de expropiación de alimentos, según la prensa española.
Desalojo exprés para morosos
El gobierno del presidente Mariano Rajoy aprobó ayer un polémico proyecto de ley que permitirá el desalojo exprés de los inquilinos que se retrasen en el pago de su alquiler si no presentan alegaciones ante un juez en el plazo de diez días, lo que podría dejar a miles de familias en la calle. La reforma supone una amenaza para miles de familias con graves problemas económicos y que no hallan trabajo en un escenario de recesión y elevado desempleo, que afecta a 5,6 millones de personas, el 24,4% de la población activa. Este año, el número de desahucios por impago hipotecario o de alquileres alcanzó la cifra récord de 46.559 en el primer trimestre.
Ya se habla del “Grexit”
Angel Merkel recibió a Samaras pero no hizo concesiones a Grecia
El Gobierno alemán admitió ayer la existencia de un grupo de trabajo en el Ministerio Federal de Finanzas que estudia las repercusiones que tendría la salida de Grecia de la eurozona, después de que la edición alemana del Financial Times publicara informaciones al respecto.
El portavoz del Ministerio de Finanzas, Martin Kotthaus, al ser confrontado con la información intentó quitar peso a la misma al decir que los ciudadanos esperan que el gobierno se ocupe de todos los escenarios posibles relacionados con la crisis de la deuda “por improbables que estos sean. “No es sorprendente que el Ministerio de Finanzas se ocupe de la crisis de la deuda y hay un grupo de trabajo que estudia los diversos aspectos de la misma”, dijo Kotthaus cuando se le pidió que confirmase o desmintiese la noticia.
Según Financial Times, el grupo, llamado Grexit en un juego de palabras entre Grecia y “exit” (salida), está dirigido por el secretario de Estado ministerial Thomas Steffen.
La existencia de ese grupo se conoció justo cuando la canciller alemana, Angela Merkel, recibió al primer ministro griego, Andonis Samaras.
Grecia avanzó poco sin embargo ayer en su intento de obtener más tiempo para implementar dolorosos recortes financieros. La gobernante alemana solo le ofreció cierto apoyo al agobiado país, al manifestar que Berlín desea la permanencia de Grecia en la eurozona y no pretende apresurarse a tomar una decisión prematura sobre la situación de las reformas.
Los partidos de oposición griegos criticaron con dureza las declaraciones de Samarás y su genuflexión.