El presidente de la Sociedad Rural, Luis Biolcati, manifestó ayer su solidaridad con los productores agropecuarios que afrontan inundaciones en los campos bonaerenses y cuestionó al Gobierno por “menospreciar la actividad”.
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El presidente de la Sociedad Rural, Luis Biolcati, manifestó ayer su solidaridad con los productores agropecuarios que afrontan inundaciones en los campos bonaerenses y cuestionó al Gobierno por “menospreciar la actividad”.
Biolcati, en el último discurso que pronunció como jefe de la Rural en la ciudad correntina de Mercedes, aseguró además que el martes participará de la asamblea agraria de Bolívar, donde entidades de productores reclamarán soluciones políticas y de infraestructura ante las inundaciones.
El dirigente saludó a los productores por su día, que se celebró el sábado, y destacó especialmente a "los que sufren las inundaciones en una enorme superficie de la provincia de Buenos Aires, que ven su trigo bajo el agua, sus vacas en plena parición en potreros inundados con la consiguiente mortandad de terneros al nacer, que ven destruidas sus esperanzas”. Esos productores, dijo, “quizás tarden años en recuperar la fertilidad de sus tierras”.
Ellos “no pueden esperar más que declamaciones de un gobierno que menosprecia su actividad”, advirtió Biolcati.
En ese marco, el titular de la Sociaedad Rural Argentina ratificó que “con ellos estaremos el martes en Bolívar, y a ellos nuestra solidaridad”. En esa reunión, que se realizará a las 15 del martes en la sede de la rural bolivarense la Mesa Agropecuaria bonaerense analizará la situación de los pequeños y medianos productores que se agrava “por las condiciones climáticas, que se suman al revalúo e impuestazo” implementado por el gobierno de Daniel Scioli, indicó en su convocatoria la Federación Agraria. Si bien los gobiernos nacional y provincial se comprometieron a realizar un monitoreo y un censo que esperan tener listos antes del miércoles, los productores reclamaron soluciones de fondo para evitar nuevos colapsos hídricos en la tierra.
Las lluvias recientes inundaron más de 10 millones de hectáreas de la provincia lo que genera pérdidas en cultivos, mortandad de hacienda y descenso en actividades comerciales de los pueblos afectados. En ese marco, el diputado nacional Ricardo Alfonsín sostuvo ayer que “las inundaciones son una consecuencia inevitable cuando se gobierna para el día a día y se olvidan los grandes problemas estructurales del país”.
En este sentido, criticó a los gobiernos peronistas de la provincia de los últimos 25 años, que "no pueden justificar su incapacidad para ejecutar un plan de obras para la cuenca del río Salado, realizado entre 1997 y 1999”.