La voz se le entrecorta, está muy angustiada, pero no muestra signos de bajar los brazos. Berta Soler, vocera de las Damas de Blanco de Cuba, confirmó esta tarde a El Tribuno digital que son 61 las mujeres del grupo disidente que están desaparecidas en distintos puntos de la isla.
inicia sesión o regístrate.
La voz se le entrecorta, está muy angustiada, pero no muestra signos de bajar los brazos. Berta Soler, vocera de las Damas de Blanco de Cuba, confirmó esta tarde a El Tribuno digital que son 61 las mujeres del grupo disidente que están desaparecidas en distintos puntos de la isla.
“En estos momentos hay 61 Damas de Blanco reportadas como desaparecidas. Tenemos conocimiento de que algunas ya fueron enviadas a sus provincias, pero otras no aparecen y ni nosotras, ni las familias sabemos donde están”, dijo con la voz quebrada la mujer.
El objetivo de estas desapariciones sería impedir la participación de las mujeres en una jornada de actividades de cuatro días para homenajear a expresos políticos que comenzó ayer con una misa por la memoria de Laura Pollán, Oswaldo Payá Sardiñas y Harold Cepero.
“Las fuerzas represivas vienen actuando contra nosotras hace cuatro días. Ahora estamos en la sede de las Damas de Blanco, a un cuadra de la iglesia La Merced. Y las fuerzas cubanas están afuera de la sede, pegadas a la puerta, y no nos permiten ir a la iglesia. Nosotras queremos pedirle a la virgen la libertad de los presos políticos y del pueblo de Cuba, que vive atrapado en la isla”, contó a El Tribuno la disidente, en una comunicación telefónica en donde las interferencias a sus teléfonos son muy evidentes.
Pese a la opresión, seis Damas de Blanco lograron llegar esta tarde a la iglesia La Merced. “Ellas están representando a todas nosotras, que sufrimos la intolerancia del Gobierno cubano”, dijo Soler.
Organización de lucha
El movimiento “Damas de Blanco” surgió para reclamar la liberación de los opositores del llamado “Grupo de los 75” encarcelados y condenados a penas de hasta 28 años de cárcel durante la ola represiva conocida como la “Primavera Negra” de 2003, acusados de conspirar con Estados Unidos.
Los últimos 52 opositores de ese grupo que estaban presos fueron excarcelados entre mediados de 2010 y principios de 2011, tras una negociación del Gobierno de la isla con la Iglesia Católica.
El Gobierno cubano considera a los miembros de la disidencia interna “contrarrevolucionarios” y “mercenarios” al servicio de Estados Unidos.
Vivir con miedo
La vida de las Damas de Blanco no es nada fácil. “Somos amenazadas y el Gobierno de Castro usa la violencia contra nosotras. Estas fuerzas no son fuerzas que cuidan al Estado, sino que son mandadas por el Gobierno para reprimir”, señaló Berta Soler.
Al ser consultadas sobre si temen por su vida señaló que: “Somos mujeres que amamos la vida, amamos la familia, amamos la patria, los principios y la moral. El amor que tenemos por la patria nos hace fuertes frente a los Castro. Este Gobierno es capaz de hacer cualquier cosa con la gente. Lo único que quieren es aceitar más su maquinaria represiva para apalear y terminar con las personas que alcen sus voces pacíficamente y pidan la libertad de los presos políticos y el respeto a los derechos humanos”.
Tanto Fidel como su hermano Raúl Castro consideran mercenarias enviadas por Washington a las Damas, a lo que Soler Respondió: “No tuvimos contacto con ningún otro país. Solo hacemos un llamado a la comunidad internacional y pedimos a los gobiernos democráticos que alcen sus voces y que llamen al gobierno de Cuba que no tenga actos violentos contra el pueblo cubano”.
La fortaleza de estas mujeres es tal que están dispuestas a todo, solo por un poco de libertad. “Nosotras estamos para resistir y no importa que por la libertad tenga que correr sangre por las calles de Cuba”, concluyó Berta Soler en la charla con El Tribuno.