Fue un anuncio muy esperado. En medio de las crecientes presiones gremiales que amenazaban con entorpecer las paritarias, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner sorprendió anoche a más de uno al anunciar el aumento del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias, como así también los incremento de los haberes de jubilados y pensionados.
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Fue un anuncio muy esperado. En medio de las crecientes presiones gremiales que amenazaban con entorpecer las paritarias, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner sorprendió anoche a más de uno al anunciar el aumento del mínimo no imponible del impuesto a las ganancias, como así también los incremento de los haberes de jubilados y pensionados.
Y dentro del mismo paquete, la mandataria informó que el desempleo bajó y se situó en el 6,9%.
De esta manera, la jefa de Estado confirmó lo que las cinco centrales sindicales estaban reclamando: que a partir de marzo próximo, los trabajadores solteros comenzarán a tributar Ganancias a partir de los 8.360 pesos, mientras que en el caso de los casados con dos hijos, recién tributará desde los 11.563 pesos.
La suba representa un 20 por ciento, quedando por debajo de la inflación de los privados, que sería de cinco puntos más. Cabe recordar que el año pasado no había subido el piso del impuesto, con lo que el aumento quedaría algo licuado y promediaría un diez por ciento en los últimos dos períodos.
La Presidenta aprovechó la ocasión, en cadena nacional, para fustigar a dos de sus principales opositores: Mauricio Macri y José de la Sota. Nada dijo sobre el acuerdo con Irán ni sobre el reclamo del sciolismo por una nueva ley de coparticipación federal.
La primera mandataria dijo que con estos cambios el 82,5 % de los empleados en relación de dependencia dejará de pagar este gravamen, lo que significará un sacrificio fiscal importante de 8 mil millones de pesos que se dejarán de tributar. Con respecto a los jubilados y pensionados la jefa de Estado señaló que percibirán a partir de marzo un aumento en sus haberes de 15,18%.
De esta manera, la jubilación mínima pasará de $1.879,67 a $2.165, mientras que la pensión asistencial pasará de $1.502 a $1.730. El incremento será el primero de los dos que prevé la ley de movilidad jubilatoria para este año.
Finalmente Cristina volvió a disparar contra la Justicia por las medidas cautelares contra el Estado, tras el pedido del gobernador cordobés, José Manuel de la Sota, que intentó frenar el pago de un préstamo de la Anses.
“Una cautelar y un vaso de agua no te lo niega ningún juez de la Argentina”, ironizó la mandataria.
Y luego tildó de “increíble” que la Justicia le diera una cautelar a De la Sota para no pagar un título de deuda solicitado por su gobierno.
55 certificados por $976 millones
Los créditos del Bicentenario ya superan los $11.000 millones y traccionan una inversión total de más de $17.000 millones, mientras que la presidenta Cristina Kirchner entregó ayer 55 certificados de estos préstamos por $976 millones.
Los 546 préstamos aprobados generarán más de 32.000 nuevos empleos, $18.600 millones más de exportaciones anuales y una sustitución de importaciones mayor a los $6.500 millones al año.
Entre otras empresas, recibieron préstamos blandos la proveedora de insumos petroleros Venver, la láctea Verónica, la carrocera Metalpar, las autopartistas Ciccarelli y Ferrosider y la agripartista Carraro.
El programa que financia proyectos para aumentar la oferta de bienes y servicios a 5 años, a una tasa anual fija en pesos del 9,9%, lleva entregados 546 créditos (el 62 por ciento de las empresas que han recibido estos préstamos son pequeñas y medianas) por $11.034 millones.
“Estoy desprovista de ambiciones”, aseguró Cristina
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner aseguró ayer que está “desprovista de ambiciones”, porque tiene “mucho más de lo que podría aspirar”, y pidió ayuda a “las jerarquías de todos los poderes” para que “el país siga adelante”.
En un discurso de 52 minutos, con muchos anuncios y tono electoral que fue difundido a través de la segunda cadena nacional del año, la jefa de Estado apeló al “corazón” de los argentinos para pedir “con la fuerza de siempre que la ayuden” a continuar con el modelo.
“Estoy desprovista de ambiciones, tengo mucho más de lo que podría aspirar, llegué a donde nunca pensé que iba a llegar”, advirtió durante el acto realizado en la Casa Rosada, y agregó: “Tengo todo y por eso les pido que me ayuden para que el país siga adelante”.
En este marco, la mandataria advirtió que “la Argentina no empezó cuando yo llegué ni se va a terminar cuando yo me vaya”.
Finalizado el acto, la Presidenta se asomó al balcón de uno de los patios interiores de la Rosada, donde la esperaba una gran cantidad de militantes que habían sido convocados para la ocasión.
A diferencia de otras oportunidades, donde se limitó al simple saludo, la jefa del Estado pidió un micrófono e improvisó un mensaje mientras la militancia no dejaba de cantar “no toquen a Cristina”, o “aquí están los pibes para la liberación”.
“Yo siempre los voy a escuchar”, les dijo, cuando consiguió un poco de silencio.
Resaltó entonces “la alegría que tenemos de poder decir que bajó la desocupación, que los trabajadores van a poder ganar un poquito más a través de que aumentamos el mínimo no imponible para los que más bajo estaban y nuevamente un aumento para nuestros jubilados y pensionados”.
Durante breves minutos les agradeció “esa militancia que hacen por amor al otro y la alegría”, y luego se quedó un rato largo bailando al ritmo de los cánticos.
Las opiniones
Agustín Rossi
El presidente del bloque de diputados nacionales del FpV destacó los anuncios de la presidenta, al señalar que “es la consecuencia de un Estado presente, de un Estado fuerte, que ha logrado mantener el índice de desocupación en un dígito”. Al referirse al detalle, el legislador manifestó que “los anuncios de la presidenta son una muy buena noticia para todos”.
Hugo Yasky
El titular de la CTA oficialista sostuvo anoche que el aumento del 20% del mínimo no imponible es “un dato positivo” y señaló que permitirá tener un panorama más claro en las paritarias y será un desahogo para los que están más abajo en la escala salarial. “Este anuncio es un paliativo que nos permite transcurrir este año electoral y llegar al 2014 con una mejor idea ”, dijo.