La presión a las reservas y el dólar paralelo significan un problema que aún tiene pendiente soluciones macroeconómicas
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La presión a las reservas y el dólar paralelo significan un problema que aún tiene pendiente soluciones macroeconómicas
El escenario económico argentino luce complejo para 2014, según el diagnóstico de consultoras que prevén caída de exportaciones, reducción del superávit comercial, estancamiento del PBI, y aceleración inflacionaria.
Los análisis
Los análisis advirtieron sobre un deterioro de la balanza comercial ante menores ventas externas y crecientes importaciones en el área energética.
Así surge de informes dados a conocer por las consultoras Econométrica, la Fundación Mediterránea, y Management & Fit (M&F).
De acuerdo a las estimaciones de Econométrica, las exportaciones argentinas bajarían en 2014 un 5 por ciento en relación a este año, y alertó que ese contexto “impone un claro límite al crecimiento económico”.
“Nuestras proyecciones advierten una baja de las exportaciones del 5 por ciento para 2014, por la combinación de menor precio de la soja, menores ventas a Brasil y menores exportaciones de energía”, planteó En este marco, prevé para 2014 un “estancamiento del PBI, y una inflación que se acelera levemente en el margen”. Según su visión, el 2014 “es un año donde sería todo un logro si no caen las exportaciones, ante un contexto externo menos benévolo”.
“Si las exportaciones no crecen, pero en cambio crece el mercado interno en base a política fiscal y monetaria expansiva, rápidamente se traduciría en mayores importaciones, lo que achicaría el menguado saldo comercial o le pondría mayor presión a las reservas y al tipo de cambio paralelo”, explicó.
“Todo crecimiento económico de 2014 sería a expensas de menores reservas en el BCRA, en franco descenso ante tantas presiones, aún con restricciones”, evaluó.
Por su parte, un informe de la Fundación Mediterránea, hizo hincapié en la desmejora de la balanza comercial.
Según sus cálculos, el superávit comercial de este año alcanzaría a 9.100 millones de dólares, lo que implicaría una reducción de 3.300 millones en relación al saldo positivo registrado en 2012, y atribuyó esa baja al impacto de las crecientes importaciones de combustibles. El informe indicó que el intercambio comercial acumuló en los primeros nueve meses del año un superávit de 7.142 millones de dólares, un 30 por ciento inferior a los 10.206 millones del mismo período de 2012, y remarcó que el resultado “puede atribuirse exclusivamente al déficit de la balanza energética”.
“Las menores exportaciones y crecientes necesidades de importar combustibles han ocasionado el achicamiento del superávit comercial general”, subrayó. En coincidencia, M&F estimó que el 2013 cerraría con un superávit comercial cercano a los 9.000 millones de dólares.