José Alperovich: el gobernador de Tucumán habló ayer desde la Casa de Gobierno, destacó el triunfo del oficialismo y reconoció las elecciones realizadas por la oposición. “Es bueno tener una oposición. Quiero felicitar a la Unión Cívica Radical”, manifestó.
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José Alperovich: el gobernador de Tucumán habló ayer desde la Casa de Gobierno, destacó el triunfo del oficialismo y reconoció las elecciones realizadas por la oposición. “Es bueno tener una oposición. Quiero felicitar a la Unión Cívica Radical”, manifestó.
José Cano: “Que el alperovichismo no quiera disfrazar los resultados. Perdieron la elección, al igual que el Gobierno Nacional. Nosotros vamos a trabajar para que se termine la impunidad”, dijo el electo diputado nacional por el ACyS.
El oficialista Frente para la Victoria y el opositor Acuerdo Cívico y Social (ACyS) ganaron ayer cada uno dos bancas en la Cámara de Diputados, de las cuatro que estaban en juego en las elecciones legislativa. Con este resultado, el alperovichismo, que gobierna desde 2003, realizó su peor elección desde que está en el poder.
Con el 98,85% de las mesas escrutadas, el Frente para la Victoria obtenía un 46,7% de los votos, contra el 34,8% del ACyS, y así, ambas fuerzas se repartirán de manera equitativa las cuatro bancas disputadas para la Cámara baja.
Desde que el kirchnerista José Alperovich asumió como gobernador por primera vez, en octubre de 2003, el Frente para la Victoria provincial ganó todas las elecciones, y en la mayoría de los casos por triunfos arrolladores, de modo que el “empate” de bancas obtenidas de este domingo supone el peor desempeño electoral en una década.
De esta forma, el 2 a 2 en la disputa electoral, a pesar de que el oficialismo aventaje a la oposición por más de diez puntos, es la victoria menos contundente desde que asumió Alperovich.
De las nueve bancas que le corresponden a la provincia, ahora seis le pertenecerán al Frente para la Victoria y tres, a representantes del radicalismo.
El oficialismo además perdió en la localidad de Yerba Buena, una de las ciudades de mayor importancia electoral en Tucumán, y en la capital provincial, donde la oposición se ilusiona con recuperar la intendencia, que está en manos del peronismo desde 2003.