La Sociedad Argentina de Pediatría y Unicef Argentina en conjunto señalan que a partir del primer año, las muertes por causas externas empiezan a crecer y que después de los 10 años, los accidentes viales y los suicidios aumentan proporcionalmente.
A su vez destacan que el porcentaje de contribución de muertes por causas externas tiene una tendencia creciente cuando se analizan las causas y eso se explica por un cambio en el perfil de las causas más que por una suba de la frecuencia.
Aseguran que en tanto se controlaron otras causas con los avances de las ciencias o la mejora de los servicios de salud, nos muestra un fracaso en la conciencia social y acciones del Estado para prevenir muertes.
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La Sociedad Argentina de Pediatría y Unicef Argentina en conjunto señalan que a partir del primer año, las muertes por causas externas empiezan a crecer y que después de los 10 años, los accidentes viales y los suicidios aumentan proporcionalmente.
A su vez destacan que el porcentaje de contribución de muertes por causas externas tiene una tendencia creciente cuando se analizan las causas y eso se explica por un cambio en el perfil de las causas más que por una suba de la frecuencia.
Aseguran que en tanto se controlaron otras causas con los avances de las ciencias o la mejora de los servicios de salud, nos muestra un fracaso en la conciencia social y acciones del Estado para prevenir muertes.
Los números expresan que a partir de los 15 años, las causas externas explican el 66,4% de las 6238 muertes anuales del grupo hasta los 24 años, aunque con diferencias.
El suicidio, las peleas, los accidentes en moto o automóvil y por imprudencias, como trepar paredes o bañarse en lugares inadecuados, causan el 61,5% de las muertes hasta los 19 y el 62% entre los 20 y los 24. En los más grandes, los accidentes incluyen los laborales. El suicidio en tanto, provoca el 24,2% de las muertes entre los 15 y los 19 años y el 21,8% entre los 20 y los 24 años.
Cabe señalar que en los últimos 20 años, la mortalidad infantil, neonatal (30 primeros días de vida) y posneonatal (hasta el año de vida) fue bajando, más en los 90 que entre 2001 y 2011 aunque esa tendencia es menor que la esperada si se tiene en cuenta la inversión en salud de esos períodos.
Cada año, en el país nacen 758.042 chicos y mueren 8878 menores de un año, con grandes diferencias entre las provincias. La mayoría (5751) muere en los primeros 30 días de vida, sobre todo en la primera semana después del parto.
Ya en el primer año de vida, se podría evitar el 67,4% de las 3127 muertes. En los primeros 30 días tienen mucho que ver la infraestructura hospitalaria y el entrenamiento médico. Más allá de ese primer mes, lo que más influye es la disponibilidad de una vivienda digna y la educación, sobre todo materna.
En esta etapa además aparecen en el quinto lugar las causas de muerte externas, con el 2,95 por ciento. Son por ejemplo los casos de muerte súbita infantil, paro cardiorrespiratorio o ahogamiento. El síndrome de muerte súbita, por ejemplo, es la tercera de las 10 causas de muerte en el primer año. Con otros accidentes que obstruyen las vías respiratorias, como la aspiración del vómito.
Ya después del primer año, estas causas evitables ocupan el primer lugar entre los motivos que provocan la muerte. En los primeros cinco años, casi el 30% de los 1347 decesos anuales son por los "accidentes domésticos" y sus secuelas. Y crece al 37,6% de las 1764 muertes entre los 5 y 14 años, pero con una diferencia: aparecen los suicidios y las agresiones con sus secuelas.