Su partido, el socialismo, hace tiempo que dejó de ser una fuerza testimonial en Argentina y pasó a ocupar una posición expectante de cara al recambio presidencial de 2015. Hermes Binner, máximo referente del espacio, obtuvo el domingo 27 una contundente victoria en Santa Fe, quedando automáticamente lanzado a la carrera por la sucesión. “Nosotros apostamos a una transición tranquila porque el país no está para soportar cualquier dislate”, señaló el diputado nacional electo. En una entrevista con El Tribuno, el exgobernador santafesino sostuvo que “si hay una inflación imparable las demandas salariales van a ser imparables”, y aseveró que en las provincias en las que ganó el kirchnerismo por mucha diferencia “el clientelismo político está muy difundido”.
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Su partido, el socialismo, hace tiempo que dejó de ser una fuerza testimonial en Argentina y pasó a ocupar una posición expectante de cara al recambio presidencial de 2015. Hermes Binner, máximo referente del espacio, obtuvo el domingo 27 una contundente victoria en Santa Fe, quedando automáticamente lanzado a la carrera por la sucesión. “Nosotros apostamos a una transición tranquila porque el país no está para soportar cualquier dislate”, señaló el diputado nacional electo. En una entrevista con El Tribuno, el exgobernador santafesino sostuvo que “si hay una inflación imparable las demandas salariales van a ser imparables”, y aseveró que en las provincias en las que ganó el kirchnerismo por mucha diferencia “el clientelismo político está muy difundido”.
“No hay conducción, nadie sabe quién es el presidente. Hasta tal punto llegamos que hay un ministro (Florencio Randazzo) que ha estatizado una línea de trenes”, concluyó Binner.
¿Qué análisis hace de los comicios del domingo pasado?
Fue una confirmación de la orientación que dieron las primarias. Los que vienen son dos años que tenemos que transitarlos con la mayor tranquilidad posible. Son dos años en los que hay fecha de finalización, por ese viejo axioma que dice que todo lo que empieza termina. En eso estamos. Por otra parte, es muy importante el rol de la oposición, que debe ser responsable e ir trazándose líneas para un futuro del país que debe ser de características diferentes al que estamos viviendo.
¿Qué características cree que debería tener?
Bueno, hay que pensar en lo social. Esa es una cuestión ética básica para cualquier país normal.
El Gobierno nacional salió a decir que sigue siendo la primera minoría y que vio positivos los resultados, ¿cómo evalúa esa reacción?
Sigue siendo la primera minoría en el Congreso, eso es verdad, pero en las últimas elecciones ha bajado la cantidad de votos con relación a las PASO. Lo que en su momento fue un 54% después se transformó en un 26 y ahora en el 24%.
¿A qué factores le atribuye esa caída en los votos del oficialismo?
A que no se resuelven los problemas esenciales. No se resuelve el problema de la inflación, no se resuelve el problema de la inseguridad, no se resuelve el problema de la marginalidad social y no se resuelve el problema energético. Terminamos una década de oportunidades desaprovechadas que otros países han aprovechado y han crecido. Eso no ha ocurrido en la Argentina.
¿Imagina una transición dura hacia el 2015?
Nosotros apostamos a una transición tranquila porque el país no está para soportar cualquier dislate. Tenemos que trabajar en forma armónica y sustentable para una transición orde nada.
¿Considera que en estos dos años puede haber un aumento de la conflictividad social?
Eso dependerá del Gobierno porque si hay una inflación imparable las demandas salariales serán imparables. Cada día que pasa es una oportunidad para limitar esta situación.
Al socialismo le fue muy bien el domingo, pese al escándalo que hay en la provincia por el narcotráfico...
Es que la gente no le creyó a los agitadores y sí nos cree a nosotros que estamos en contacto con la gente y sabemos lo que piensa. La gente sabe que nosotros siempre hemos condenado al tráfico de drogas.
¿Por qué piensa que hay un crecimiento tan fuerte del crimen organizado en Rosario?
No es ni más ni menos que lo que pasa en el país. Es un problema nacional y que hay que operar sobre este flagelo como un problema nacional.
¿Cuál es su visión sobre la conducción del país mientras la Presidenta está de reposo?
No hay conducción, nadie sabe quién es el presidente. Hasta tal punto llegamos que hay un ministro (Florencio Randazzo) que ha estatizado una línea de trenes.
¿Usted realmente cree que la Presidenta no estuvo al tanto de nada todo este tiempo?
No, yo creo que está lúcida y está al tanto. Igual, todavía está en franca recuperación.
¿Cuántas fuerzas imagina compitiendo por la presidencia en 2015?
En la realidad de la Argentina es muy difícil pronosticar lo que puede ocurrir en 2015. Hay que esperar. Recién salimos de una elección y no podemos andar pensando en la próxima. Hay que gobernar y demostrar que tenemos capacidad, fe y confianza. Tenemos la valentía de llevar adelante un país que es una riqueza de norte a sur y de este a oeste, y sin embargo los distintos gobiernos nos han llevado a la situación que hoy tenemos.
¿Qué visión tiene sobre el fallo de la Corte que declaró constitucional a la ley de medios?
Bueno, hoy es ley así que hay que aplicarla. Más allá de lo que uno piense, si realmente creemos en el republicanismo tenemos que pensar en la independencia de los poderes, y eso amerita pensar que el Poder Judicial tiene la facultad de determinar la constitucionalidad de la ley.
O sea que no ve ningún pacto entre la Corte y el Gobierno como denunció Elisa Carrió...
No, no creo en eso.
En su fallo la Corte pide una autoridad de aplicación independiente del poder político, ¿la AFSCA lo es?
No, no es independiente. A tal punto que nosotros tenemos como tercer minoría en el Congreso la facultad de nombrar a un miembro, que fue Alejandro Pereyra, y hay un veto de la presidencia donde nos dicen: “Este no, manden a otro”. Nosotros debiéramos modificar la ley para que la AFSCA sea un órgano externo, como es la Auditoría General de la Nación.
¿El Gobierno es equitativo en la aplicación de la ley o que hay cierta animosidad con el Grupo Clarín?
Lo que debiera hacer el Gobierno es empezar por casa. Es decir: esta ley alcanza a los medios públicos y privados, y el primero que debería cumplirla es el Estado nacional.
El kirchnerismo tuvo muy buenos resultados en algunas provincias como Formosa y muy malo en las provincias grandes, ¿cómo explica esa dispersión?
Son provincias donde el clientelismo político está muy difundido. Creo que es la forma en que se logra estas victorias tan grandes que tuvo el kirchnerismo en algunas provincias.
¿Cree que deberían haber cambios en el Gabinete para oxigenar la gestión tras el resultado electoral?
Esa es una potestad exclusiva que tiene que tomar o no la Presidenta.
¿Qué cambios debería hacer la Presidenta para demostrar que escuchó el mensaje de las urnas?
Abordar el tema de la inflación y no creer en los números del Indec, que yo creo que no creen. Abordar la seguridad y la protección de nuestro país para obtener un mapa del delito que permita realmente actuar sobre los delitos complejos, sobre todo los vinculados a los delitos desde el Estado.
¿Considera que Cristina va a profundizar su proyecto o va a realizar algunos cambios cuando se recupere?
Yo creo que va a seguir adelante con su proyecto. Esperemos que sea plausible pensar en una recuperación en estos dos años que quedan de una mejor convivencia entre los argentinos.
En Santa Fe, al igual que en Salta y Jujuy, se llevaron a los gendarmes a cuidar el conurbano bonaerense, ¿cómo seguirá eso?
Tiene que devolverlos, ya que por Santa Fe pasan más de tres mil kilómetros de rutas de nacionales. Los únicos que pueden proteger las rutas nacionales son las policías federales. Si retira a Gendarmería de las rutas, realmente se va a complicar la situación.
¿Lo sorprendió el gran triunfo de Sergio Massa, teniendo en cuenta que encabeza una fuerza muy nueva?
En realidad está formando un frente pero hay que esperar un poco que camine así muestra sus virtudes. Creo que Massa es también una expresión del peronismo.
En caso de haber un Gobierno socialista, ¿cuáles son las medidas más urgentes que tomarían?
En lo político la descentralización y el federalismo en la autonomía de los municipios. En lo económico la industrialización de los productos primarios lo más cerca de su ciudad de origen. Y en lo social, un combate muy duro contra la exclusión social.