Otra vez problemas con la seguridad en Brasil. A poco más de seis meses de que comience el Mundial de Fútbol 2014, un grupo de narcotraficantes causó pánico entre los vecinos de Río de Janeiro al atacar con armas de guerra una base de la Policía Militarizada en una favela, donde el Gobierno envió refuerzos y detuvo a 17 sospechosos.
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Otra vez problemas con la seguridad en Brasil. A poco más de seis meses de que comience el Mundial de Fútbol 2014, un grupo de narcotraficantes causó pánico entre los vecinos de Río de Janeiro al atacar con armas de guerra una base de la Policía Militarizada en una favela, donde el Gobierno envió refuerzos y detuvo a 17 sospechosos.
Los atacantes lanzaron morteros y realizaron disparos contra un puesto de la Unidad de la Policía Pacificadora establecida en la favela Manguinhos, ubicada en el norte de la ciudad. Vecinos declararon haber vivido momentos de pánico durante el ataque a la base policial de Manguinhos, que amaneció en tensa calma mientras era recorrida por patrullas policiales que recibieron el refuerzo procedente de otras UPP.
Más de 30 UPP fueron distribuidas en las favelas cariocas en los últimos cinco años con el propósito de erradicar a las bandas de narcotraficantes que dominaron esas barriadas durante décadas.
Pero en los últimos meses grupos narcos reaparecieron en escena lanzando una serie de ataques contra las unidades, que costaron la vida de algunos agentes y causaron serios daños materiales. En tanto, la Policía Militarizada reportó la incautación de una ametralladora calibre 50, capaz de derribar helicópteros, en la favela ubicada en el Morro Dendé.
Mayor vigilancia
En una medida tendiente a provocar un “shock de orden”, un camión equipado con cámaras de alta definición comenzó a vigilar las playas de Río de Janeiro luego de la reciente ola de asaltos simultáneos contra bañistas, que motivó una nota de alerta por parte del gobierno de Estados Unidos. La base de control del Batallón de Choque de la Policía Militarizada fue estacionada en el Arpoador, un punto turístico tradicional ubicado entre Copacabana e Ipanema, con 14 cámaras capaces de rotar 360 grados y un alcance de 8 kilómetros.