El líder opositor venezolano Henrique Capriles dijo ayer que no cree que los militares repriman a electores que eventualmente reclamen el fin del Gobierno de Nicolás Maduro si sus candidatos pierden las municipales del 8 de diciembre próximo.
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El líder opositor venezolano Henrique Capriles dijo ayer que no cree que los militares repriman a electores que eventualmente reclamen el fin del Gobierno de Nicolás Maduro si sus candidatos pierden las municipales del 8 de diciembre próximo.
Ante la posibilidad de que los candidatos de Maduro pierdan la mayoría que actualmente ostentan en los municipios, y que a la vez los opositores festejen pidiendo el fin de la gestión presidencial, el Gobierno podría ordenar “darle palo a la gente”, dijo Capriles en una entrevista publicada hoy por el diario caraqueño El Universal.
“Si el Gobierno quiere darle palo a la gente, dudo que las Fuerzas Armadas acompañen esa posición”, manifestó el ahora jefe de campaña de los candidatos municipales opositores.
Capriles fue derrotado por Maduro en las presidenciales del 14 de abril pasado, lo que atribuyó a un fraude que cree imposible que se repita en las municipales si el triunfo opositor resulta holgado.
En ese escenario, añadió, Maduro tendrá la opción de “leer la señal de cambio y buscar una salida”, la que estimó pasará por convocar al país a las urnas para preguntarle “si quiere o no al Gobierno”.
Pero si Maduro, advirtió Capriles, “pretende sacar el garrote como reacción ante la derrota, el pueblo le va a pasar por encima”.
Maduro, por su parte, dijo ayer que serán encarcelados quienes desconozcan el resultado de las elecciones municipales y generen violencia.
“Al primero que salga a desconocer (los resultados de las) elecciones y a intentar crear violencia (...) van directamente a ponerle los ganchos (encarcelarlo) y va a pagar caro, muy caro”, manifestó.
El jefe de Estado anunció que en los 335 municipios del país se instalarán el 8 de diciembre “observatorios de paz”, con funcionarios del Poder Electoral, la Fiscalía, la Defensoría del Pueblo y las fuerzas militares y policiales, con plenos poderes para ordenar prisión y abrir causas judiciales. Maduro ha responsabilizado del asunto a Capriles, a quien llama “parásito” y acusa de la decena de muertes que dejaron unos incidentes registrados tras las presidenciales del 14 de abril.
Por el contrario, Capriles se atribuyó un papel de contención popular tras las presidenciales y achacó a hechos delictivos las muertes.