El Fantasma, el Campeón del Pueblo o simplemente Ricky. Se trata del único campeón argentino, mundo hispano y sudamericano gallo con el que cuenta la provincia. Una persona a la que últimamente la vida lo golpeó más abajo que arriba de un ring. Diego Ricardo Santillán, de 25 años, decidió desprenderse de su promotora y manager Fabiola Soria.
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El Fantasma, el Campeón del Pueblo o simplemente Ricky. Se trata del único campeón argentino, mundo hispano y sudamericano gallo con el que cuenta la provincia. Una persona a la que últimamente la vida lo golpeó más abajo que arriba de un ring. Diego Ricardo Santillán, de 25 años, decidió desprenderse de su promotora y manager Fabiola Soria.
“Por cuestiones personales que no voy a profundizar porque no vienen al caso, decidí seguir mi camino y que ella (por Fabiola) siga el suyo. Hablamos, se dijeron las cosas y todo terminó en buenos términos. Ahora quiero escuchar propuestas de promotores y elegir lo que más nos convenga”, le dijo Santillán a El Tribu no.
Dispuesto a buscar nuevos horizontes, el cambio no solo radicará en el promotor que vaya a seducir a Ricky, el campeón también está dispuesto a dejar su Tartagal natal, donde forjó toda su carrera, escenario de logros y festejos inolvidables. “Sé que va a costar pero también sé que me quedan varios años para seguir cre ciendo”.
El tartagalense considera que tanto en su pueblo como en la capital ya se cumplió un ciclo y es hora de partir. “Pasó mucho tiempo y creo que pelear en la provincia no te da el rédito que debería. Quiero pelear afuera, quién te dice que me ve gente del medio y, si Dios me ilumina ese día, puedo firmar un buen contrato”.
En principio Ricky piensa venir a Salta para buscar dónde quedarse. A la hora de hacer un balance de lo realizado con Soria, el púgil sostuvo: “No tengo por qué quejarme, todo fue muy bien”, de hecho los números así lo confirman: sigue invicto con 18 victorias y 13 por KO y tres coronas. Uno de los puntos que más influyeron a la hora de la separación fue la poca contención. “En la cuestión personal no me supo comprender, pero insisto, son cuestiones personales que prefiero guardármelas para mí”, sostuvo.
“Cuando no me presenté a la conferencia de la pelea contra Báez, no fue porque no tenía ganas, de hecho no veo las horas de arrancarle la cabeza, fue porque mi señora, ella perdió nuestro segundo bebé y lo que es peor le confirmaron que no podrá tener nunca más un hijo”, señaló Ricky. Verdaderos golpes que recibió el campeón, de esos que dañan el corazón. Sin embargo, seguirá adelante con la esperanza de que sus títulos, sus ganas y cualidades impacten en la persona que deberá seguir guiando sus pasos en un cuadrilátero.
Rocky no, Báez sí
Cuando todo daba cuenta de que Santillán y Rocky Medina (foto) iban a enfrentarse, el propio Ricky se encargó de descararlo. “La propuesta es muy interesante pero, siendo sincero, no quiero pelear con otro salteño, no quiero dividir las aguas.
A Lucas Báez lo quiero, entiendo que mi imagen quedó deteriorada por lo que pasó pero se dijeron muchas mentiras, que yo no quería pelear y otras cosas. Al que dijo eso sí que me gustaría pelearle en Salta, meterle una buena paliza y dejar en claro quién es el campeón. Ojalá se pueda hacer“, apuntó Santillán. Hay que recordar que a fines del año pasado Ricky no dio el peso ante Báez y en la segunda oportunidad no se pre sentó.