La flema conservadora ayer pasó a la historia, cuando los parlamentarios británicos dieron un fuerte respaldo a la legalización del matrimonio homosexual. Se trató de la primera de varias votaciones sobre el asunto, tras un debate que dividió al gobernante Partido Conservador del primer ministro David Cameron.
El borrador de ley, que propone legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo en 2014, se aprobó por 400 votos a favor y 175 en contra. El proyecto está a varias fases de convertirse en ley, pero ya ha expuesto las fracturas del partido de Cameron mientras el primer ministro se enfrenta a crecientes rumores de un posible reto a su liderazgo.
inicia sesión o regístrate.
La flema conservadora ayer pasó a la historia, cuando los parlamentarios británicos dieron un fuerte respaldo a la legalización del matrimonio homosexual. Se trató de la primera de varias votaciones sobre el asunto, tras un debate que dividió al gobernante Partido Conservador del primer ministro David Cameron.
El borrador de ley, que propone legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo en 2014, se aprobó por 400 votos a favor y 175 en contra. El proyecto está a varias fases de convertirse en ley, pero ya ha expuesto las fracturas del partido de Cameron mientras el primer ministro se enfrenta a crecientes rumores de un posible reto a su liderazgo.