En un creciente clima de confrantación, Evo Morales anunció la creación de una presa hidroeléctrica que utilizará las aguas del río Silala, que nace en Bolivia pero abastece a las poblaciones y empresas instaladas en la puna de Atacama fronteriza también con el norte de Argentina. Entre las empresas que utilizan esas aguas se encuentra la gigantesca Chuquicamata, cuya producción define el precio del cobre en el mundo.
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En un creciente clima de confrantación, Evo Morales anunció la creación de una presa hidroeléctrica que utilizará las aguas del río Silala, que nace en Bolivia pero abastece a las poblaciones y empresas instaladas en la puna de Atacama fronteriza también con el norte de Argentina. Entre las empresas que utilizan esas aguas se encuentra la gigantesca Chuquicamata, cuya producción define el precio del cobre en el mundo.
El anuncio de la represa que estará a pleno en 2014, fue realizado por el presidente boliviano a una semana de denunciar la detención del desminado al que se había comprometido a realizar Chile en la frontera con Bolivia. Miles de minas antipersonales fueron puestas por el país trasandino durante el gobierno de facto de Augusto Pinochet.
"Hay que recuperar las aguas del Silala para el pueblo de Bolivia", enfatizó Morales el jueves al inaugurar la estación de piscicultura, según reseñó la agencia de noticias DPA.
Como parte de este objetivo, el gobierno busca poner en funcionamiento la estación hidroeléctrica en 2014 para suministrar energía a un puesto militar en la frontera con Chile, y para que funcione una planta envasadora de agua.
"La inversión alcanzará a 3,7 millones de dólares y se utilizarán de 150 a 200 litros de agua por segundo. El diseño de la obra incluye una caída de 44 metros de alto, con una capacidad de generación de 50 kilovatios", explicó el gobernador de Potosí, Félix Gonzáles, luego de que el presidente Evo Morales encabezara la inauguración en esa zona de seis piscinas para cría de truchas.
Confrontación por las aguas
El norte de Chile desde hace 107 años que se aprovisiona gratuitamente de 169 litros por segundo de agua dulce de la pampa del Silala, a través de un acueducto artificial y aprovechando el declive que existe desde el altiplano boliviano hasta la región chilena de Atacama.
Este río nace en Bolivia y por posteriores canalizaciones desemboca en Chile. Según el argumento chileno nace originalmente como una acumulación de manantiales provenientes del Quetena y luego recorre algunos kilómetros para desembocar en el río San Pedro de Inacaliri, el cual es parte de la cuenca hidrográfica del río Loa.
Este es el río Silala cuyas aguas serán encausadas por Bolivia.
De acuerdo a Bolivia, este cauce habría sido formado artificialmente por canalizaciones realizadas por chilenos durante los años 1960 en territorio boliviano, juntando una serie de vertientes cordilleranas sin circulación determinada. Dicho cauce habría sido descrito por primera vez en 1880 por el ingeniero inglés Hosias Holding, pero recién el 11 de junio de 1906, la empresa "The Antofagasta and Bolivia Railway Company Limited" (actual Ferrocarril de Antofagasta a Bolivia) pasó a ser titular en Chile de una merced de aguas sobre el Silala, otorgada por la Intendencia de Antofagasta, la que fue inscrita en el correspondiente registro. La merced de aguas fue aprobada dos años más tarde por el gobierno boliviano, el 23 de septiembre de 1908. La Compañía concesionaria en sus inicios utilizó el agua para las máquinas de su ferrocarril, pero posteriormente permitió su utilización a diversas empresas del norte de Chile, principalmente a Codelco-Chuquicamata y a las empresas sanitarias de Antofagasta.