Los vecinos de San Luis dudan la promesa del titular del Concejo Deliberante, Tomás Rodríguez, de que esta tarde se daría marcha atrás con la ordenanza ad referéndum que quedó aprobada la semana pasada y que abrió las puertas a la radicación de industrias en la zona Oeste de la ciudad, a la altura del cruce de la ruta nacional 51 y Circunvalación Oeste.
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Los vecinos de San Luis dudan la promesa del titular del Concejo Deliberante, Tomás Rodríguez, de que esta tarde se daría marcha atrás con la ordenanza ad referéndum que quedó aprobada la semana pasada y que abrió las puertas a la radicación de industrias en la zona Oeste de la ciudad, a la altura del cruce de la ruta nacional 51 y Circunvalación Oeste.
Los concejales sesionarán esta tarde y tenían establecido debatir dos proyectos para que cayera esa norma que impulsa el Ejecutivo municipal. Lo cierto es que por la polvareda y el rechazo que generó el proyecto oficial en los vecinos de la zona, el presidente del cuerpo Tomás Rodríguez informó que la aplicación de la normativa “quedará suspendida hasta tanto se conforme una comisión que evaluará la situación en forma integral, para lo cual se convocará al Consejo Municipal de Desarrollo Urbano Ambiental y a los vecinos”.
“Con esta medida queremos dar un paso adelante, más allá de la polémica o la discusión que cuando no se encaminan por la vía del consenso son improductivas”, dijo el concejal. Ahora bien, los vecinos de la zona mantienen su distancia y su desconfianza con las palabras del Turi Rodríguez, teniendo en cuenta que fueron engañados la semana pasada, cuando los concejales oficialistas les habían prometido que la ordenanza ad referendum sería rechazada.
Pero lo cierto es ese día los ediles no dieron quórum, permitiendo que la norma siga adelante.