Una crisis con el sector docente golpea a la gobernadora de Tierra del Fuego, Fabiana Ríos, quien aseguró ayer que desde el viernes no podía ingresar a trabajar a la Casa de Gobierno, que continuaba tomada por docentes en el marco de un duro conflicto salarial. Hace cinco días la Casa de Gobierno permanece tomada y Ríos destacó que recibió el respaldo de gobernadores y sectores opositores, pero no fue llamada por funcionarios nacionales.
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Una crisis con el sector docente golpea a la gobernadora de Tierra del Fuego, Fabiana Ríos, quien aseguró ayer que desde el viernes no podía ingresar a trabajar a la Casa de Gobierno, que continuaba tomada por docentes en el marco de un duro conflicto salarial. Hace cinco días la Casa de Gobierno permanece tomada y Ríos destacó que recibió el respaldo de gobernadores y sectores opositores, pero no fue llamada por funcionarios nacionales.
La mandataria sostuvo que está trabajando en una “oficina alternativa porque están bloqueadas las entradas a la Casa de Gobierno y no hay policías”, ya que dispuso su retiro el viernes último, para prevenir hechos de violencia.
Ese día el sindicato de docentes, Sutef, dispuso ocupar la sede gubernamental luego de mantener serios incidentes con la policía, a la vez que lanzó un paro por tres días que se inició ayer en Ushuaia, ya que la filial Río Grande decidió acatar la conciliación obligatoria.
La mandataria, en declaraciones a radio Vórterix, precisó que los docentes rechazaron el último ofrecimiento efectuado por la Provincia, que consistía en otorgar un 33 por ciento de aumento, y ratificaron su reclamo de un 50 por ciento de incremento.
En ese sentido, afirmó que los dirigentes “están convocados al diálogo en el momento, día y hora que lo soliciten”, pero advirtió que “acá no hay problema de diálogo, es un problema económico y presupuestario”, ya que la Provincia no está en condiciones de otorgar la mejora exigida.