Profeta en su tierra. El referente del socialismo Hermes Binner consolidó su liderazgo en Santa Fe al lograr 15 puntos de ventaja en las elecciones legislativas primarias del domingo en toda la provincia y ser el precandidato más votado en 18 de los 19 departamentos en los que se divide el territorio santafesino.
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Profeta en su tierra. El referente del socialismo Hermes Binner consolidó su liderazgo en Santa Fe al lograr 15 puntos de ventaja en las elecciones legislativas primarias del domingo en toda la provincia y ser el precandidato más votado en 18 de los 19 departamentos en los que se divide el territorio santafesino.
Sólo en 9 de Julio la lista del Frente Progresista Cívico y Social (FPCyS) apareció relegado del primer puesto.
Allí el Frente para la Victoria, que llevó como precandidato a diputado nacional al exgobernador Jorge Obeid, fue el más votado.
El PRO, con Miguel Del Sel al frente de la lista de precandidatos, no logró imponerse en ninguno de los departamentos santafesinos.
La extensión territorial del dirigente socialista quedó en evidencia en la elección del domingo. No sólo se impuso con comodidad en el bastión natural de su partido, Rosario, ciudad que el socialismo gobierna desde 1989, sino que además lo hizo en Santa Fe capital y en otros centros urbanos y rurales donde durante años dominó el peronismo.
En Rosario, donde la tragedia ocurrida con la explosión de un edificio que dejó hasta el momento un saldo de 19 muertos, el socialismo alcanzó una ventaja de 17 puntos. El objetivo del FPCyS, la coalición que integran socialistas, radicales, la democracia progresista, la Coalición Cívica ARI y el GEN, tiene como objetivo renovar las cuatro bancas de su espacio cuyo mandato vence en diciembre. Sin embargo, la aspiración máxima es obtener un caudal mayor de votos en octubre que le permita extender a cinco las bancas obtenidas. Con el 98,15 por ciento de los votos escrutados el FPCyS obtuvo un total de 730.002 votos, 25 mil más que en 2011, cuando el socialista Antonio Bonfatti accedió a la gobernación.
El PRO quedó ratificado en las primarias como la segunda fuerza