Salvador Mazza está al rojo vivo. Que Juan Manuel Urtubey le haya dado legitimidad política a Carlos Villalba para que sea candidato por el Partido Justicialista cayó muy mal entre los habitantes del municipio. Es que los vecinos que habían pedido por la intervención hoy padecen una nueva aparición política del depuesto jefe comunal. Mientras, en el PJ local reina el malestar y el desconcierto por la unilateral decisión proveniente de la capital.
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Salvador Mazza está al rojo vivo. Que Juan Manuel Urtubey le haya dado legitimidad política a Carlos Villalba para que sea candidato por el Partido Justicialista cayó muy mal entre los habitantes del municipio. Es que los vecinos que habían pedido por la intervención hoy padecen una nueva aparición política del depuesto jefe comunal. Mientras, en el PJ local reina el malestar y el desconcierto por la unilateral decisión proveniente de la capital.
En un contexto en que el pueblo se partió en dos (los que apoyan a Villalba y los que no), quien fuera detenido en un cabaret donde se investiga una conexión internacional de trata de personas ya comenzó a reordenar su tropa para meterse de lleno en la campaña.
En la ronda de reuniones que ya mantuvo, quedó explícito que Villalba sigue contando con el apoyo de trabajadores del municipio, organizaciones piqueteras y sociales de la zona. A contramano de lo que se podía interpretar, el ahora candidato a intendente no cuenta con el apoyo del PJ de Salvador Mazza. Así lo demostraron históricos dirigentes del peronismo que retiraron su apoyo de la lista y bajaron a candidatos. Hay un malestar y desconcierto generalizados en el justicialismo. Nadie entiende a ciencia cierta por qué el intendente cuenta con tanta protección del gobernador. “Tal vez sea por los dos mil votos que tiene de piso Villalba”, dice un dirigente off the record.
No obstante, la lista apadrinada por Santiago Godoy, La Ragone, tampoco despierta demasiadas expectativas en el peronismo desmoralizado por la actualidad que transita. “Es la primera vez que salen. No hay antecedentes políticos de Exeni”, dicen.
Mientras, entre los vecinos la sorpresa y el estupor son generalizados. El enojo parece tener un solo destinatario y es el gobernador Juan Manuel Urtubey. Todos creen que fue el responsable de habilitar nuevamente a Carlos Villalba para que tenga una nueva oportunidad de ser intendente.
La situación financiera
Pero las actitudes del intendente no son lo único cuestionable en Villalba.
Sectores opositores señalan que el depuesto jefe comunal manejaba las actividades financieras tipo “almacén de pueblo”.
Hace once meses que no hay registro contable en el libro del municipio. Así lo denunció el concejal Alfredo Palacios ante la interventora, Mercedes Junco.
Es que uno de los temas que más preocupan a la enviada por el Gobierno provincial es la situación financiera del municipio.
Por eso apenas llegó a Salvador Mazza encabezó reuniones con los concejales por sueldos atrasados, respecto a quienes cobran quincenalmente, a los contratados, que se les debe hasta quince meses de sueldo.