La fiesta del Milagrito marcó el epílogo de los cultos que en distintos puntos de la provincia se llevan adelante en honor a los Patronos Tutelares y contó con la participación del vicegobernador, Andrés Zottos; el arzobispo de Salta, Monseñor Mario Antonio Cargnello, y el intendente local, Mario Cuenca.
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La fiesta del Milagrito marcó el epílogo de los cultos que en distintos puntos de la provincia se llevan adelante en honor a los Patronos Tutelares y contó con la participación del vicegobernador, Andrés Zottos; el arzobispo de Salta, Monseñor Mario Antonio Cargnello, y el intendente local, Mario Cuenca.
“Como cada año, estamos aquí para acompañar al pueblo de Campo Santo y para renovar nuestro compromiso de trabajo conjunto”, afirmó Zottos.
Luego se desarrolló sobre calle Güemes el desfile cívico militar, con participación de alumnos de establecimientos escolares, academias, fuerzas de seguridad, fortines gauchos y otras organizaciones sociales, para concluir nuevamente ya en horas de la noche en la iglesia con los fuegos artificiales y los pañuelos blancos.