Martín Quinteros Navarro, el joven que fue apuñalado a la salida del boliche bailable Club Room hace más de tres semanas, sigue peleando por su vida. Tras contraer una infección respiratoria en el hospital, le dieron la internación domiciliaria, para evitar mayores complicaciones.
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Martín Quinteros Navarro, el joven que fue apuñalado a la salida del boliche bailable Club Room hace más de tres semanas, sigue peleando por su vida. Tras contraer una infección respiratoria en el hospital, le dieron la internación domiciliaria, para evitar mayores complicaciones.
A raíz de lo sucedido, cuatro personas permanecen detenidas y el fiscal Eduardo Barrionuevo pidió al juez Antonio Pastrana que los sospechosos no sean liberados para no correr el riesgo de una fuga, por la gravedad del hecho y de la condena que se espera.
Cuando ocurrió el ataque, la policía detuvo a José Ignacio Aguirrebengoa, Lautaro Matías Aguirrebengoa y al patovica del boliche, Ariel Cesar Vera.
Días después Nicolás Alejandro Aguirrebengoa se presentó voluntariamente en Ciudad Judicial, acompañado de su abogado, al saber que la policía lo buscaba intensamente.
Los hermanos Aguirrebengoa están acusados de homicidio en grado de tentativa, mientras que el patovica lo está de encubrimiento agravado.
Todo comenzó el viernes 16 de agosto cuando Martín, de tan sólo 24 años, salió a divertirse con su novia Florencia, su amigo Javier y su hermano. Todos ingresaron al boliche ubicado sobre la calle Ameghino, en el corredor Balcarce. En el interior habrían tenido un altercado con otro grupo de chicos.
Pasadas las cuatro de la madrugada, Martín y sus amigos se retiraron del lugar. Cuando llegaron a la esquina de Balcarce y Ameghino, un joven se paró frente a él y le dio una puñalada. Luego escapó.
Desesperado, se sacó el cuchillo y cayó al suelo. Su hermano y sus amigos lo auxiliaron. Pedían a gritos una ambulancia, pero esta recién llegó 20 minutos después.
“Se desangró. Lo operaron, pero como tardó tanto la ambulancia, su cerebro no se oxigenó bien, dejándole serias secuelas motrices. Necesita mucha rehabilitación. Casi no habla por la lesiones que le dejó el respirador artificial ”, señaló uno de sus hermanos a este matutino.
En la causa judicial que se formó por el ataque, la familia se constituyó como querellante de la mano del abogado Darío Palmier. “Volcamos nuestra confianza en el estudio jurídico de Palmier para que se haga justicia y que estos delincuentes reciban el castigo que merecen”, expresó la familia de Martín.
En una entrevista exclusiva con El Tribuno, el letrado informó sobre el estado de la investigación. “La causa está caratulada como homicidio en grado de tentativa. Nosotros pretendemos llevarla a homicidio calificado en grado de tentativa. Por el momento los cuatro sospechosos se encuentran detenidos. Ninguno se autoincriminó y sólo dos de ellos declararon; los otros se abstuvieron”, explicó.
Hasta el momento, desde el juzgado estuvieron tomando declaración a los testigos propuestos por la defensa, pero la querella ya presentó sus pedidos de prueba.
“Pedimos que se realice la reconstrucción del hecho, una inspección ocular judicial y una rueda en reconocimiento para la novia de Matías, su hermano y uno de sus amigos. Ellos aseguraron estar en condiciones de reconocer al agresor”, contó Palmier.
En cuanto a las pistas que conducen a que Nicolás Aguirrebengoa fue el autor de la brutal agresión que recibió Martín -y que sus amigos definieron como “un ataque a sangre fría”-, se sabe que José Ignacio, uno de los detenidos y primo del principal sospechoso, declaró que estaba en el boliche Club Room y que en ningún momento salió. Aseguró creer que la policía lo detuvo únicamente por tener el apellido Aguirrebengoa. Se desvinculó del hecho pero sí reconoció haber visto el altercado que hubo adentro del lugar.
Por otro lado este matutino supo que el patovica Ariel César Vera declaró que ese día no estaba trabajando y que fue a divertirse. Contó que salió a fumar y vio a Nicolás muy nervioso porque, según él, le habían pegado. Después, fue directo al chico y vio que le dio un golpe y salió corriendo, pero como estaba lejos no pudo ver si tenía un arma.
“Hay pistas que conducen a que Nicolás fue la persona que agredió al Martín, pero estamos esperando que el juez nos conceda las pruebas que pedimos”, cerró el letrado.
Vecinos y amigos de Martín se sienten consternados con lo ocurrido: “No lo podemos creer, es un chico sano. Su familia está destruida, pero él es joven, fuerte y está vivo. Confiamos en que va a recuperarse y vencer esta adversidad”, contó un vecino de la cuadra.
“Los detenidos son muy violentos”
Vecinos del barrio Castañares, lugar donde residen los detenidos Nicolás Aguirrebengoa, su hermano José Ignacio y su primo Lautaro, todos acusados de homicidio en grado de tentativa en prejuicio de Martín Quinteros Navarro, aseguraron a este medio que se trata de una familia violenta.
“Nicolás es el líder de una patota que se llama ‘La C5’, que tiene a todos los vecinos atemorizados. Son muy violentos y tienen muchos antecedentes en el barrio”, señaló una mujer que vive cerca del domicilio de los acusados.
Al enterarse de lo ocurrido los vecinos piensan en la posibilidad de organizar una marcha para pedir que esta familia abandone el vecindario.
“No queremos gente así viviendo al lado nuestro. Siempre están armados y sabemos que hace años apuñaló a otra persona. Son un peligro y tememos por nuestra seguridad y la de nuestro hijos”, señalaron sus vecinas.