Franco Rinaldi nació en Salta en 1980 y a los 18 años decidió irse a vivir a Buenos Aires para seguir la carrera de Ciencias Políticas en la UBA. Pero su pasión por los aviones lo hizo especializarse de lleno en el tema aerocomercial.
Este año, Franco publicó su segundo libro con la editorial Planeta, una de las más importantes del mundo. Su trabajo nos habla de Aerolíneas Argentinas desde el momento en el que fue estatizada, en 2008. Critica la polémica gestión a cargo del abogado militante de La Cámpora, Mariano Recalde.
Este libro de investigación denuncia el desmanejo de la compañía y el gasto excesivo.
Hoy cobra un especial valor después de que Auditoría General de la Nación informara esta semana que Aerolíneas Argentinas y Austral, en el 2013, perdieron más de 3.859 millones de pesos, la peor cifra desde el 2008.
¿Aerolíneas Argentinas tendría que ser una aerolínea low cost, como Southwest o JetBlue en Estados Unidos?
En 2009, la consultora Oliver Wayman fue contratada por los gerentes Recalde y Kicillof para que les enseñaran como llevar adelante Aerolíneas Argentinas. Ellos diseñaron un plan de negocios muy distinto al que después aplicó el actual ministro de economía Kicillof y Recalde. En realidad tomaron decisiones empresariales opuestas a las que les indicaba Oliver Wayman en su plan de negocios.
¿Cuál era ese plan?
Era reestructurarse, reducirse, renovar flota, renegociar todos los convenios colectivos de trabajo, en ajustada síntesis modernizar la empresa, que en la industria aerocomercial eso significa bajar sustancialmente los costos. Recalde y Kicillof decidieron expandirse irresponsablemente y sin ninguna evidencia que les señalara que eso era posible o viable para la aerolínea. Si Aerolíneas Argentinas hubiese mutando la empresa hacia un modelo low cost como Jet Blue, Southwest, Easy Jet, Ryanair, GOL, y se hubiese designado un management con, al menos un piso mínimo, de capacidad, posiblemente hoy Aerolíneas podría estar equilibrada económicamente y dando ganancias.
Esta política equivocada de gestión podría llevar a que deje de existir o sea vendida?
Como desarrollo en Aerolíneas Argentinas 2000 días de pérdidas, la derrota económica sostenida de la empresa ha sido el principal motor para alimentar apetitos privatizadores por venir en los próximos años en la Argentina. Y si bien, yo no creo que una empresa sea mejor o peor por estar en manos del Estado, es lamentable porque Aerolíneas se verá forzosamente a tener que reestructurarse de una manera más brutal que lo que podría haberlo hecho en 2008, 2009 o 2010.
El relato del Gobierno nacional siempre dijo que las aerolíneas dan pérdida. ¿Esto es así?
Mirá, lo más importante es que el negocio global de las aerolíneas desde 2010 como mínimo volvió a ser rentable. Y esa rentabilidad es creciente. Está en una tasa de ganancia del 5,4% de lo invertido. Realmente son números extraordinarios los que ha conseguido la industria en los últimos tiempos, y eso se debe a que esta cambió, se modernizó y genera ganancias. Aerolíneas Argentinas está entre las compañías que no aporta para ese saldo, sino que tiene pérdidas.
En el libro contás que te entrevistaste con personas de otras compañías. Que diferencias encontrás en el gerenciamiento?
La definida tendencia a buscar rentabilidad. Todo el discurso que hay alrededor de Aerolíneas y sus consecutivas decisiones que no están vinculadas a obtener rentabilidad por la actividad comercial que realiza son un macaneo perjudicial para la empresa que la refuerza en su inviabilidad. Todos los empleados de otras aerolíneas, gerentes y empleados de un escalafón más bajos están comprometidos con la rentabilidad de la compañía para la que trabajan.
En el libro decís que la flota es vieja. ¿Porqué no tienen una flota más moderna?
La verdad es que conseguir los aviones que se quieren y que mejor funcionan con la aerolínea que vos puedas tener es un trabajo para nada sencillo, pero en el que más o menos el management ávido en la materia resuelve sin mayores complicaciones. Aerolíneas no tiene el personal indicado que sepa qué le conviene más a la compañía. Las aerolíneas en los últimos cinco o diez años y entonces hasta el 2013 estuvieron incorporando Airbus A340-300 que son viejos, con cuatro motores (más consumo y mayores costos de mantenimiento) y que su fabricante dejó de producir en 2011 por ser un producto no rentable. Pero debido a que la gestión de Aerolíneas no es empresarial sino estrictamente política, se necesitan anuncios. Y los anuncios no son lo que parecen. Se pretende presentar una prosperidad que Aerolíneas no tiene y el costo de esa decisión es más déficit para la empresa. La compañía incorporó muchos aviones con la necesidad política de presentar trofeos, aunque esos trofeos fueran un ancla insoportable para la economía de la aerolínea.
Este año, Franco publicó su segundo libro con la editorial Planeta, una de las más importantes del mundo. Su trabajo nos habla de Aerolíneas Argentinas desde el momento en el que fue estatizada, en 2008. Critica la polémica gestión a cargo del abogado militante de La Cámpora, Mariano Recalde.
Este libro de investigación denuncia el desmanejo de la compañía y el gasto excesivo.
Hoy cobra un especial valor después de que Auditoría General de la Nación informara esta semana que Aerolíneas Argentinas y Austral, en el 2013, perdieron más de 3.859 millones de pesos, la peor cifra desde el 2008.
¿Aerolíneas Argentinas tendría que ser una aerolínea low cost, como Southwest o JetBlue en Estados Unidos?
En 2009, la consultora Oliver Wayman fue contratada por los gerentes Recalde y Kicillof para que les enseñaran como llevar adelante Aerolíneas Argentinas. Ellos diseñaron un plan de negocios muy distinto al que después aplicó el actual ministro de economía Kicillof y Recalde. En realidad tomaron decisiones empresariales opuestas a las que les indicaba Oliver Wayman en su plan de negocios.
¿Cuál era ese plan?
Era reestructurarse, reducirse, renovar flota, renegociar todos los convenios colectivos de trabajo, en ajustada síntesis modernizar la empresa, que en la industria aerocomercial eso significa bajar sustancialmente los costos. Recalde y Kicillof decidieron expandirse irresponsablemente y sin ninguna evidencia que les señalara que eso era posible o viable para la aerolínea. Si Aerolíneas Argentinas hubiese mutando la empresa hacia un modelo low cost como Jet Blue, Southwest, Easy Jet, Ryanair, GOL, y se hubiese designado un management con, al menos un piso mínimo, de capacidad, posiblemente hoy Aerolíneas podría estar equilibrada económicamente y dando ganancias.
Aerolíneas Argentinas debería suspender sus vuelos regionales y dedicarse a un mercado interno o regional?
Habría que ver caso por caso, si se puede mejorar la situación de cada vuelo, comercializándolo mejor en cada destino internacional. Con gente competente y profesional y una reestructuración integral de flota y personal se podría, tal vez, salvar algunos destinos internacionales. Pero lo cierto es que, Aerolíneas debería cortar inmediatamente Nueva York y reducir sus frecuencias a Miami que hoy por hoy mantiene alrededor de 12 frecuencias por semana y es su principal fuente de déficit operativo. El primer caso es un destino que jamás debió abrirse, Miami es una ruta prescindible, o que al menos debería dejarse como máximo una frecuencia por día para comenzar a reducir el déficit que tiene la empresa. Los destinos no rentables, que son los internacionales, no solo producen una injusticia hacia todos los contribuyentes del país que subsidian esa derrota de nuestra línea de bandera, sino que también profundizan la inviabilidad de la empresa y eso es muy grave. Aerolíneas necesita urgente una reducción de su déficit operativo.
"Un trabajador precarizado, al comprar leche, carne o yerba mate involuntaria y forzosamente subsidió el viaje de Sofía Zámolo o Ricky Sarkany a Nueva York. Me parece una obsenidad." Habría que ver caso por caso, si se puede mejorar la situación de cada vuelo, comercializándolo mejor en cada destino internacional. Con gente competente y profesional y una reestructuración integral de flota y personal se podría, tal vez, salvar algunos destinos internacionales. Pero lo cierto es que, Aerolíneas debería cortar inmediatamente Nueva York y reducir sus frecuencias a Miami que hoy por hoy mantiene alrededor de 12 frecuencias por semana y es su principal fuente de déficit operativo. El primer caso es un destino que jamás debió abrirse, Miami es una ruta prescindible, o que al menos debería dejarse como máximo una frecuencia por día para comenzar a reducir el déficit que tiene la empresa. Los destinos no rentables, que son los internacionales, no solo producen una injusticia hacia todos los contribuyentes del país que subsidian esa derrota de nuestra línea de bandera, sino que también profundizan la inviabilidad de la empresa y eso es muy grave. Aerolíneas necesita urgente una reducción de su déficit operativo.
Esta política equivocada de gestión podría llevar a que deje de existir o sea vendida?
Como desarrollo en Aerolíneas Argentinas 2000 días de pérdidas, la derrota económica sostenida de la empresa ha sido el principal motor para alimentar apetitos privatizadores por venir en los próximos años en la Argentina. Y si bien, yo no creo que una empresa sea mejor o peor por estar en manos del Estado, es lamentable porque Aerolíneas se verá forzosamente a tener que reestructurarse de una manera más brutal que lo que podría haberlo hecho en 2008, 2009 o 2010.
El relato del Gobierno nacional siempre dijo que las aerolíneas dan pérdida. ¿Esto es así?
Mirá, lo más importante es que el negocio global de las aerolíneas desde 2010 como mínimo volvió a ser rentable. Y esa rentabilidad es creciente. Está en una tasa de ganancia del 5,4% de lo invertido. Realmente son números extraordinarios los que ha conseguido la industria en los últimos tiempos, y eso se debe a que esta cambió, se modernizó y genera ganancias. Aerolíneas Argentinas está entre las compañías que no aporta para ese saldo, sino que tiene pérdidas.
En el libro contás que te entrevistaste con personas de otras compañías. Que diferencias encontrás en el gerenciamiento?
La definida tendencia a buscar rentabilidad. Todo el discurso que hay alrededor de Aerolíneas y sus consecutivas decisiones que no están vinculadas a obtener rentabilidad por la actividad comercial que realiza son un macaneo perjudicial para la empresa que la refuerza en su inviabilidad. Todos los empleados de otras aerolíneas, gerentes y empleados de un escalafón más bajos están comprometidos con la rentabilidad de la compañía para la que trabajan.
En el libro decís que la flota es vieja. ¿Porqué no tienen una flota más moderna?
La verdad es que conseguir los aviones que se quieren y que mejor funcionan con la aerolínea que vos puedas tener es un trabajo para nada sencillo, pero en el que más o menos el management ávido en la materia resuelve sin mayores complicaciones. Aerolíneas no tiene el personal indicado que sepa qué le conviene más a la compañía. Las aerolíneas en los últimos cinco o diez años y entonces hasta el 2013 estuvieron incorporando Airbus A340-300 que son viejos, con cuatro motores (más consumo y mayores costos de mantenimiento) y que su fabricante dejó de producir en 2011 por ser un producto no rentable. Pero debido a que la gestión de Aerolíneas no es empresarial sino estrictamente política, se necesitan anuncios. Y los anuncios no son lo que parecen. Se pretende presentar una prosperidad que Aerolíneas no tiene y el costo de esa decisión es más déficit para la empresa. La compañía incorporó muchos aviones con la necesidad política de presentar trofeos, aunque esos trofeos fueran un ancla insoportable para la economía de la aerolínea.
Este libro de Aerolíneas se encuentra disponible desde el 1 de octubre en todas las librerías
En tu libro decís que hay una sobrepoblación de empleados. ¿Cuántos tienen otras empresas y cuántos tiene Aerolíneas? Las razones son estrictamente políticas y la relación es muy mala. Aerolíneas tiene un promedio de 185 empleados por cada avión, siendo un poco generosos en favor de la empresa. Ethiopian Airlines que es una línea aérea estatal y que da ganancias tiene 93 empleados por avión. La relación es muy adversa y te da una idea bastante importante de una estructura de costos inviables para la aerolínea. El peor enemigo de Aerolíneas fue su gerente general Recalde y su subgerente Kicillof que en sus dos primeros años de gestión al frente de la línea aérea de bandera tomaron empleados descontrolada e irresponsablemente.
Recalde dijo que la compañía no mira la rentabilidad sólo en términos económicos, sino
también en términos sociales. ¿No es un error gerenciar una empresa de esa manera?
Absolutamente. Eso que al doctor Recalde lo satisface es parte central de por qué su gestión no podrá ser nunca exitosa. No alcanza a reconocer o dimensionar el problema enorme que tiene entre manos con su procedimiento político ahí donde la respuesta es técnica y muy específica.
¿Porqué le cuesta presentar sus balances?
Aerolíneas después de 5 años de no presentar balances, violando flagrantemente las normativas vigentes, presentó sus balances en septiembre de 2013 hasta el ejercicio 2012. Y en julio de este año presentó sus balances provisorios, es decir no están aprobados de 2013. Viendo los números oficiales, se entiende por qué se intentó ocultar información. El déficit, el endeudamiento y los resultados son horribles, ruinosos para la compañía y para el Estado Argentino.
Revela que un trabajador precarizado de Santiago del Estero, Tucumán, Salta o cualquier provincia, que con dificultades llega a pagar sus cuentas, al comprar leche, carne o yerba mate involuntaria y forzosamente subsidió el viaje de Sofía Zamolo o Ricky Sarkany a Nueva York. Me parece una obscenidad inaceptable.
En tu libro decís que hay una sobrepoblación de empleados. ¿Cuántos tienen otras empresas y cuántos tiene Aerolíneas? Las razones son estrictamente políticas y la relación es muy mala. Aerolíneas tiene un promedio de 185 empleados por cada avión, siendo un poco generosos en favor de la empresa. Ethiopian Airlines que es una línea aérea estatal y que da ganancias tiene 93 empleados por avión. La relación es muy adversa y te da una idea bastante importante de una estructura de costos inviables para la aerolínea. El peor enemigo de Aerolíneas fue su gerente general Recalde y su subgerente Kicillof que en sus dos primeros años de gestión al frente de la línea aérea de bandera tomaron empleados descontrolada e irresponsablemente.
Recalde dijo que la compañía no mira la rentabilidad sólo en términos económicos, sino
también en términos sociales. ¿No es un error gerenciar una empresa de esa manera?
Absolutamente. Eso que al doctor Recalde lo satisface es parte central de por qué su gestión no podrá ser nunca exitosa. No alcanza a reconocer o dimensionar el problema enorme que tiene entre manos con su procedimiento político ahí donde la respuesta es técnica y muy específica.
¿Porqué le cuesta presentar sus balances?
Aerolíneas después de 5 años de no presentar balances, violando flagrantemente las normativas vigentes, presentó sus balances en septiembre de 2013 hasta el ejercicio 2012. Y en julio de este año presentó sus balances provisorios, es decir no están aprobados de 2013. Viendo los números oficiales, se entiende por qué se intentó ocultar información. El déficit, el endeudamiento y los resultados son horribles, ruinosos para la compañía y para el Estado Argentino.
Revela que un trabajador precarizado de Santiago del Estero, Tucumán, Salta o cualquier provincia, que con dificultades llega a pagar sus cuentas, al comprar leche, carne o yerba mate involuntaria y forzosamente subsidió el viaje de Sofía Zamolo o Ricky Sarkany a Nueva York. Me parece una obscenidad inaceptable.
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Franco Rinaldi nació en Salta en 1980 y a los 18 años decidió irse a vivir a Buenos Aires para seguir la carrera de Ciencias Políticas en la UBA. Pero su pasión por los aviones lo hizo especializarse de lleno en el tema aerocomercial.
Este año, Franco publicó su segundo libro con la editorial Planeta, una de las más importantes del mundo. Su trabajo nos habla de Aerolíneas Argentinas desde el momento en el que fue estatizada, en 2008. Critica la polémica gestión a cargo del abogado militante de La Cámpora, Mariano Recalde.
Este libro de investigación denuncia el desmanejo de la compañía y el gasto excesivo.
Hoy cobra un especial valor después de que Auditoría General de la Nación informara esta semana que Aerolíneas Argentinas y Austral, en el 2013, perdieron más de 3.859 millones de pesos, la peor cifra desde el 2008.
¿Aerolíneas Argentinas tendría que ser una aerolínea low cost, como Southwest o JetBlue en Estados Unidos?
En 2009, la consultora Oliver Wayman fue contratada por los gerentes Recalde y Kicillof para que les enseñaran como llevar adelante Aerolíneas Argentinas. Ellos diseñaron un plan de negocios muy distinto al que después aplicó el actual ministro de economía Kicillof y Recalde. En realidad tomaron decisiones empresariales opuestas a las que les indicaba Oliver Wayman en su plan de negocios.
¿Cuál era ese plan?
Era reestructurarse, reducirse, renovar flota, renegociar todos los convenios colectivos de trabajo, en ajustada síntesis modernizar la empresa, que en la industria aerocomercial eso significa bajar sustancialmente los costos. Recalde y Kicillof decidieron expandirse irresponsablemente y sin ninguna evidencia que les señalara que eso era posible o viable para la aerolínea. Si Aerolíneas Argentinas hubiese mutando la empresa hacia un modelo low cost como Jet Blue, Southwest, Easy Jet, Ryanair, GOL, y se hubiese designado un management con, al menos un piso mínimo, de capacidad, posiblemente hoy Aerolíneas podría estar equilibrada económicamente y dando ganancias.
Esta política equivocada de gestión podría llevar a que deje de existir o sea vendida?
Como desarrollo en Aerolíneas Argentinas 2000 días de pérdidas, la derrota económica sostenida de la empresa ha sido el principal motor para alimentar apetitos privatizadores por venir en los próximos años en la Argentina. Y si bien, yo no creo que una empresa sea mejor o peor por estar en manos del Estado, es lamentable porque Aerolíneas se verá forzosamente a tener que reestructurarse de una manera más brutal que lo que podría haberlo hecho en 2008, 2009 o 2010.
El relato del Gobierno nacional siempre dijo que las aerolíneas dan pérdida. ¿Esto es así?
Mirá, lo más importante es que el negocio global de las aerolíneas desde 2010 como mínimo volvió a ser rentable. Y esa rentabilidad es creciente. Está en una tasa de ganancia del 5,4% de lo invertido. Realmente son números extraordinarios los que ha conseguido la industria en los últimos tiempos, y eso se debe a que esta cambió, se modernizó y genera ganancias. Aerolíneas Argentinas está entre las compañías que no aporta para ese saldo, sino que tiene pérdidas.
En el libro contás que te entrevistaste con personas de otras compañías. Que diferencias encontrás en el gerenciamiento?
La definida tendencia a buscar rentabilidad. Todo el discurso que hay alrededor de Aerolíneas y sus consecutivas decisiones que no están vinculadas a obtener rentabilidad por la actividad comercial que realiza son un macaneo perjudicial para la empresa que la refuerza en su inviabilidad. Todos los empleados de otras aerolíneas, gerentes y empleados de un escalafón más bajos están comprometidos con la rentabilidad de la compañía para la que trabajan.
En el libro decís que la flota es vieja. ¿Porqué no tienen una flota más moderna?
La verdad es que conseguir los aviones que se quieren y que mejor funcionan con la aerolínea que vos puedas tener es un trabajo para nada sencillo, pero en el que más o menos el management ávido en la materia resuelve sin mayores complicaciones. Aerolíneas no tiene el personal indicado que sepa qué le conviene más a la compañía. Las aerolíneas en los últimos cinco o diez años y entonces hasta el 2013 estuvieron incorporando Airbus A340-300 que son viejos, con cuatro motores (más consumo y mayores costos de mantenimiento) y que su fabricante dejó de producir en 2011 por ser un producto no rentable. Pero debido a que la gestión de Aerolíneas no es empresarial sino estrictamente política, se necesitan anuncios. Y los anuncios no son lo que parecen. Se pretende presentar una prosperidad que Aerolíneas no tiene y el costo de esa decisión es más déficit para la empresa. La compañía incorporó muchos aviones con la necesidad política de presentar trofeos, aunque esos trofeos fueran un ancla insoportable para la economía de la aerolínea.
Este año, Franco publicó su segundo libro con la editorial Planeta, una de las más importantes del mundo. Su trabajo nos habla de Aerolíneas Argentinas desde el momento en el que fue estatizada, en 2008. Critica la polémica gestión a cargo del abogado militante de La Cámpora, Mariano Recalde.
Este libro de investigación denuncia el desmanejo de la compañía y el gasto excesivo.
Hoy cobra un especial valor después de que Auditoría General de la Nación informara esta semana que Aerolíneas Argentinas y Austral, en el 2013, perdieron más de 3.859 millones de pesos, la peor cifra desde el 2008.
¿Aerolíneas Argentinas tendría que ser una aerolínea low cost, como Southwest o JetBlue en Estados Unidos?
En 2009, la consultora Oliver Wayman fue contratada por los gerentes Recalde y Kicillof para que les enseñaran como llevar adelante Aerolíneas Argentinas. Ellos diseñaron un plan de negocios muy distinto al que después aplicó el actual ministro de economía Kicillof y Recalde. En realidad tomaron decisiones empresariales opuestas a las que les indicaba Oliver Wayman en su plan de negocios.
¿Cuál era ese plan?
Era reestructurarse, reducirse, renovar flota, renegociar todos los convenios colectivos de trabajo, en ajustada síntesis modernizar la empresa, que en la industria aerocomercial eso significa bajar sustancialmente los costos. Recalde y Kicillof decidieron expandirse irresponsablemente y sin ninguna evidencia que les señalara que eso era posible o viable para la aerolínea. Si Aerolíneas Argentinas hubiese mutando la empresa hacia un modelo low cost como Jet Blue, Southwest, Easy Jet, Ryanair, GOL, y se hubiese designado un management con, al menos un piso mínimo, de capacidad, posiblemente hoy Aerolíneas podría estar equilibrada económicamente y dando ganancias.
Aerolíneas Argentinas debería suspender sus vuelos regionales y dedicarse a un mercado interno o regional?
Habría que ver caso por caso, si se puede mejorar la situación de cada vuelo, comercializándolo mejor en cada destino internacional. Con gente competente y profesional y una reestructuración integral de flota y personal se podría, tal vez, salvar algunos destinos internacionales. Pero lo cierto es que, Aerolíneas debería cortar inmediatamente Nueva York y reducir sus frecuencias a Miami que hoy por hoy mantiene alrededor de 12 frecuencias por semana y es su principal fuente de déficit operativo. El primer caso es un destino que jamás debió abrirse, Miami es una ruta prescindible, o que al menos debería dejarse como máximo una frecuencia por día para comenzar a reducir el déficit que tiene la empresa. Los destinos no rentables, que son los internacionales, no solo producen una injusticia hacia todos los contribuyentes del país que subsidian esa derrota de nuestra línea de bandera, sino que también profundizan la inviabilidad de la empresa y eso es muy grave. Aerolíneas necesita urgente una reducción de su déficit operativo.
"Un trabajador precarizado, al comprar leche, carne o yerba mate involuntaria y forzosamente subsidió el viaje de Sofía Zámolo o Ricky Sarkany a Nueva York. Me parece una obsenidad." Habría que ver caso por caso, si se puede mejorar la situación de cada vuelo, comercializándolo mejor en cada destino internacional. Con gente competente y profesional y una reestructuración integral de flota y personal se podría, tal vez, salvar algunos destinos internacionales. Pero lo cierto es que, Aerolíneas debería cortar inmediatamente Nueva York y reducir sus frecuencias a Miami que hoy por hoy mantiene alrededor de 12 frecuencias por semana y es su principal fuente de déficit operativo. El primer caso es un destino que jamás debió abrirse, Miami es una ruta prescindible, o que al menos debería dejarse como máximo una frecuencia por día para comenzar a reducir el déficit que tiene la empresa. Los destinos no rentables, que son los internacionales, no solo producen una injusticia hacia todos los contribuyentes del país que subsidian esa derrota de nuestra línea de bandera, sino que también profundizan la inviabilidad de la empresa y eso es muy grave. Aerolíneas necesita urgente una reducción de su déficit operativo.
Esta política equivocada de gestión podría llevar a que deje de existir o sea vendida?
Como desarrollo en Aerolíneas Argentinas 2000 días de pérdidas, la derrota económica sostenida de la empresa ha sido el principal motor para alimentar apetitos privatizadores por venir en los próximos años en la Argentina. Y si bien, yo no creo que una empresa sea mejor o peor por estar en manos del Estado, es lamentable porque Aerolíneas se verá forzosamente a tener que reestructurarse de una manera más brutal que lo que podría haberlo hecho en 2008, 2009 o 2010.
El relato del Gobierno nacional siempre dijo que las aerolíneas dan pérdida. ¿Esto es así?
Mirá, lo más importante es que el negocio global de las aerolíneas desde 2010 como mínimo volvió a ser rentable. Y esa rentabilidad es creciente. Está en una tasa de ganancia del 5,4% de lo invertido. Realmente son números extraordinarios los que ha conseguido la industria en los últimos tiempos, y eso se debe a que esta cambió, se modernizó y genera ganancias. Aerolíneas Argentinas está entre las compañías que no aporta para ese saldo, sino que tiene pérdidas.
En el libro contás que te entrevistaste con personas de otras compañías. Que diferencias encontrás en el gerenciamiento?
La definida tendencia a buscar rentabilidad. Todo el discurso que hay alrededor de Aerolíneas y sus consecutivas decisiones que no están vinculadas a obtener rentabilidad por la actividad comercial que realiza son un macaneo perjudicial para la empresa que la refuerza en su inviabilidad. Todos los empleados de otras aerolíneas, gerentes y empleados de un escalafón más bajos están comprometidos con la rentabilidad de la compañía para la que trabajan.
En el libro decís que la flota es vieja. ¿Porqué no tienen una flota más moderna?
La verdad es que conseguir los aviones que se quieren y que mejor funcionan con la aerolínea que vos puedas tener es un trabajo para nada sencillo, pero en el que más o menos el management ávido en la materia resuelve sin mayores complicaciones. Aerolíneas no tiene el personal indicado que sepa qué le conviene más a la compañía. Las aerolíneas en los últimos cinco o diez años y entonces hasta el 2013 estuvieron incorporando Airbus A340-300 que son viejos, con cuatro motores (más consumo y mayores costos de mantenimiento) y que su fabricante dejó de producir en 2011 por ser un producto no rentable. Pero debido a que la gestión de Aerolíneas no es empresarial sino estrictamente política, se necesitan anuncios. Y los anuncios no son lo que parecen. Se pretende presentar una prosperidad que Aerolíneas no tiene y el costo de esa decisión es más déficit para la empresa. La compañía incorporó muchos aviones con la necesidad política de presentar trofeos, aunque esos trofeos fueran un ancla insoportable para la economía de la aerolínea.
Este libro de Aerolíneas se encuentra disponible desde el 1 de octubre en todas las librerías
En tu libro decís que hay una sobrepoblación de empleados. ¿Cuántos tienen otras empresas y cuántos tiene Aerolíneas? Las razones son estrictamente políticas y la relación es muy mala. Aerolíneas tiene un promedio de 185 empleados por cada avión, siendo un poco generosos en favor de la empresa. Ethiopian Airlines que es una línea aérea estatal y que da ganancias tiene 93 empleados por avión. La relación es muy adversa y te da una idea bastante importante de una estructura de costos inviables para la aerolínea. El peor enemigo de Aerolíneas fue su gerente general Recalde y su subgerente Kicillof que en sus dos primeros años de gestión al frente de la línea aérea de bandera tomaron empleados descontrolada e irresponsablemente.
Recalde dijo que la compañía no mira la rentabilidad sólo en términos económicos, sino
también en términos sociales. ¿No es un error gerenciar una empresa de esa manera?
Absolutamente. Eso que al doctor Recalde lo satisface es parte central de por qué su gestión no podrá ser nunca exitosa. No alcanza a reconocer o dimensionar el problema enorme que tiene entre manos con su procedimiento político ahí donde la respuesta es técnica y muy específica.
¿Porqué le cuesta presentar sus balances?
Aerolíneas después de 5 años de no presentar balances, violando flagrantemente las normativas vigentes, presentó sus balances en septiembre de 2013 hasta el ejercicio 2012. Y en julio de este año presentó sus balances provisorios, es decir no están aprobados de 2013. Viendo los números oficiales, se entiende por qué se intentó ocultar información. El déficit, el endeudamiento y los resultados son horribles, ruinosos para la compañía y para el Estado Argentino.
Revela que un trabajador precarizado de Santiago del Estero, Tucumán, Salta o cualquier provincia, que con dificultades llega a pagar sus cuentas, al comprar leche, carne o yerba mate involuntaria y forzosamente subsidió el viaje de Sofía Zamolo o Ricky Sarkany a Nueva York. Me parece una obscenidad inaceptable.
En tu libro decís que hay una sobrepoblación de empleados. ¿Cuántos tienen otras empresas y cuántos tiene Aerolíneas? Las razones son estrictamente políticas y la relación es muy mala. Aerolíneas tiene un promedio de 185 empleados por cada avión, siendo un poco generosos en favor de la empresa. Ethiopian Airlines que es una línea aérea estatal y que da ganancias tiene 93 empleados por avión. La relación es muy adversa y te da una idea bastante importante de una estructura de costos inviables para la aerolínea. El peor enemigo de Aerolíneas fue su gerente general Recalde y su subgerente Kicillof que en sus dos primeros años de gestión al frente de la línea aérea de bandera tomaron empleados descontrolada e irresponsablemente.
Recalde dijo que la compañía no mira la rentabilidad sólo en términos económicos, sino
también en términos sociales. ¿No es un error gerenciar una empresa de esa manera?
Absolutamente. Eso que al doctor Recalde lo satisface es parte central de por qué su gestión no podrá ser nunca exitosa. No alcanza a reconocer o dimensionar el problema enorme que tiene entre manos con su procedimiento político ahí donde la respuesta es técnica y muy específica.
¿Porqué le cuesta presentar sus balances?
Aerolíneas después de 5 años de no presentar balances, violando flagrantemente las normativas vigentes, presentó sus balances en septiembre de 2013 hasta el ejercicio 2012. Y en julio de este año presentó sus balances provisorios, es decir no están aprobados de 2013. Viendo los números oficiales, se entiende por qué se intentó ocultar información. El déficit, el endeudamiento y los resultados son horribles, ruinosos para la compañía y para el Estado Argentino.
Revela que un trabajador precarizado de Santiago del Estero, Tucumán, Salta o cualquier provincia, que con dificultades llega a pagar sus cuentas, al comprar leche, carne o yerba mate involuntaria y forzosamente subsidió el viaje de Sofía Zamolo o Ricky Sarkany a Nueva York. Me parece una obscenidad inaceptable.