La peor semana de Amado Boudou. Advertido sobre el significado de su procesamiento por el delito de cohecho y tráfico de influencias en la venta de la exCiccone Calcográfica, el vicepresidente optó por el perfil bajo y retomaría su agenda en el Senado recién después del 16 de julio. Mientras, su defensa prepara la estrategia y ya adelantaron que ante el juez Ariel Lijo apelarán la medida.
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La peor semana de Amado Boudou. Advertido sobre el significado de su procesamiento por el delito de cohecho y tráfico de influencias en la venta de la exCiccone Calcográfica, el vicepresidente optó por el perfil bajo y retomaría su agenda en el Senado recién después del 16 de julio. Mientras, su defensa prepara la estrategia y ya adelantaron que ante el juez Ariel Lijo apelarán la medida.
“No estamos sorprendidos porque desde el primer momento vimos todo lo que viene pasando en la causa, y advertimos un montón de circunstancias que no tienen nada que ver con los procedimientos que debe tener una causa”, manifestó su abogado Diego Pirota.
Respecto de la ampliación de la declaración indagatoria que había solicitado Boudou, Pirota dijo que ahora no saben “si se va a hacer” y, en este sentido, evaluó que Lijo declaró el procesamiento “para evitar que el vicepresidente le pueda decir algo la semana que viene que pueda frenar esta causa”.
El magistrado aseguró que el procesamiento dictado por el juez Ariel Lijo ya estaba decidido antes de las indagatorias. “Desde diciembre advertimos cosas que no tenían nada que ver con cómo se lleva una causa, injustificadas”, afirmó el letrado, quien denunció “diversas irregularidades” por parte del juez.
Afirmó que el juez Lijo decidió “apurar los tiempos sin dar lugar al nuevo pedido de indagatoria por parte del vicepresidente porque tenía miedo de perder la causa. El se quería quedar con la causa, tenía miedo de perderla. Existía el rumor de que lo correrían, por eso decidió citar a Boudou en un marco extraño. Eso no corresponde, pero el tiempo nos da la razón de que así fue, por eso aceleró todo”.
Lijo procesó a Boudou -quien está de gira oficial en Cuba- por cohecho pasivo y negociaciones incompatibles en el marco de la causa que investiga el salvataje de la calcográfica. También procesó a José María Núñez Carmona, Alejandro Vandenbroele, Rafael Resnick Brenner, Nicolás Ciccone y Guillermo Reinwick.
El arco político en su plenitud pidió que separen a Boudou del Gobierno, que pida licencia o renuncie.